Los talleres cesarán su actividad hasta 20 días entre noviembre y diciembre y los sindicatos negocian para evitar un ERE
16 oct 2018 . Actualizado a las 10:17 h.La caída en la venta de automóviles y también la incertidumbre sobre el diésel pararán la las líneas de galvanizado e inspección en Arcelor. Al menos esos son los motivos aducidos por la dirección de la empresa para anunciar el cese de la actividad en la factoría de Avilés afectando a 190 trabajadores. La empresa comunicó que las líneas de galvanizado 1 y 2 y las de inspección pararán a finales de año, entre el 24 de diciembre y el 3 de enero. En el caso de la línea 1 de galvanizado, el paro se prolongará durante de ocho días de noviembre, entre los días 4 y 11. Tras el anuncio de la compañía, los sindicatos han iniciado conversaciones para tratar de evitar un expediente de regulación de empleo.
La empresa también quiere que el ERE sea la última opción, y en este sentido, se pretende buscar una vía para que los paros se hagan coincidir con vacaciones y descansos pendientes, incluso para que se aprovechen reconocimientos médicos y cursos de formación.
En esta ocasión, la causa proviene de la crisis en el sector automovilístico pero entre las compañías industriales electrointensivas también se lleva meses especulando con la posibilidad de que los precios de la energía provoquen paros como estos. Las restricciones anunciadas sobre los vehículos de diesel han afectado de forma profunda a la producción y ha aumentado la demanda de coches de gasolina sin que haya stock de motores suficiente. Las ventas de diesel se han desplomado en el primer semestre más de un 10%, hasta situarse en el 38% total de los coches vendidos en España en ese periodo, especialmente después de que el Gobierno anunciara una subida de los tributos que gravan este combustible.
Por otro lado, a finales del pasado mes de septiembre, Fernando Soto, director general de la asociación de empresas con gran consumo de energía (Aege), señaló que «Si continúa esta escalada de precios de la electricidad, hay riesgo de parada en alguna instalación industrial, sí», como único modo de ahorrar en la factura de la luz. La asociación engloba a empresas como ArcelorMittal, la multinacional del aluminio Alcoa o Asturiana de Zinc, que han reiterado su preocupación por el incesante encarecimiento de los costes eléctricos. Para este tipo de industrias, estos suponen en torno a un 40 % del presupuesto dedicado a gastos de explotación.
