El parricida de la radial también podría haber robado a comunidades

Alfredo López Penide
LÓPEZ PENIDE REDACCION

ASTURIAS

RAMON LEIRO

El fiscal solicita cuatro años y medio por apropiarse de algo más de 69.651 euros, principalmente, entre los años 2013 y el 2015

15 nov 2018 . Actualizado a las 13:11 h.

Cumple una condena de prisión permanente revisable en la prisión leonesa de Mansilla de las Mulas y ahora David Oubel, el parricida de Moraña, se enfrenta a una nueva petición de pena de la Fiscalía de Pontevedra de cuatro años y medio de prisión y el pago de una multa de 1.800 euros por, supuestamente, apropiarse de importantes cantidades de dinero de ocho comunidades de vecinos ubicadas en las localidades pontevedresas de Caldas de Reis y Moraña. Oubel, nacido en Avilés, fue el primer condenado a prisión permanente revisable tras dictarse sentencia por el terrible crimen que terminó con la vida de sus hijas.

En el procedimiento que se instruye en los juzgados de Pontevedra, se recoge que David Oubel y su hermana constituyeron una asesoría o inmobiliaria que, además de dedicarse a la venta de propiedades, ofrecía entre sus servicios la gestión de comunidades de vecinos. De este modo, el parricida tenía acceso a las cuentas, para lo cual estaba perfectamente apoderado. El fiscal añade que fue precisamente la hermana de Oubel la que, no solo interpuso la denuncia que dio pie a esta causa judicial, sino que también ha venido colaborado en la investigación e, incluso, localizó las comunidades de vecinos damnificadas. Lo cierto es que siempre ha estado personada en este procedimiento, si bien, por el momento, no ha trascendido si finalmente intervendrá como acusación particular.

Fuentes del ministerio público precisaron que las indagaciones iniciadas hace más de dos años les han llevado a concluir que el sospechoso podría haberse apropiado de algo más de 69.651 euros. Dado que se trata de una cantidad que supera ampliamente los cincuenta mil euros, el fiscal considera que se trata de un delito de apropiación indebida agravado, circunstancia a la que suma el hecho de que hubiera sido continuado en el tiempo, toda vez que los hechos que se le imputan se habrían desarrollado, principalmente, entre los años 2013 y 2015.

El doble asesinato de sus hijas

De igual modo, el hecho de que la apropiación tenga la connotación de agravada explica que la causa vaya a ser juzgada en la Audiencia de Pontevedra, el mismo espacio donde en julio del año pasado le condenaron, por primera vez en España, a prisión permanente revisable. En aquel juicio, David Oubel reconoció haber asesinado a sus dos hijas Amaia y Candela, de 4 y 9 años. Ante el tribunal, aseguró que el día que acabó con las vidas de las pequeñas, el 31 de julio del 2015, vivió «una situación limite. Desconozco el motivo qué originó esa situación y provocó algo de lo que, hoy en día, estoy muy arrepentido. No tengo manera de solucionarlo».

El jurado lo tuvo claro y, por unanimidad, emitió un veredicto de culpabilidad. Acreditaron que, antes de asesinar a las niñas, las drogó haciéndolas ingerir una serie de fármacos para, acto seguido, emplear una amoladora eléctrica y un cuchillo para acabar con la vida de ambas.