Argüelles dimite como coordinador de IU

s.d.m.

ASTURIAS

El coordinador federal de IU, Alberto Garzón (i), y el coordinador de IU de Asturias, Ramón Argüelles (i) durante la inauguración de los Jardines de los Abogados de Atocha, en Gijón
El coordinador federal de IU, Alberto Garzón (i), y el coordinador de IU de Asturias, Ramón Argüelles (i) durante la inauguración de los Jardines de los Abogados de Atocha, en Gijón Juan González

Espera que su renuncia sea un toque de atención a la organización y a su sustituto para conseguir la unidad

12 mar 2019 . Actualizado a las 20:52 h.

Ramón Argüelles lo califica como «un paso atrás no una espantada». El coordinador de Izquierda Unida de Asturias, Ramón Argüelles, ha comunicado al coordinador federal, Alberto Garzón, su decisión de dimitir después de haber perdido las primarias frente a Ángela Vallina. Ha explicado que sigue queriendo una organización unida y comprometida en la que todos «se pongan la camiseta del equipo». Espera que su marcha sea un toque de atención para que su sustituto consiga el objetivo que a él se le ha resistido: la unidad. 

Argüelles ha comparecido en la sede de IU arropado por una ampliación representación del equipo que le ha acompañado durante gran parte de su viaje al frente de la coalición, desde su llegada a la coordinación hasta su candidatura en estas primarias, espoleado por agrupaciones como la de Gijón, Mieres o Langreo. De hecho los alcaldes de Mieres y Langreo, Anibal Vázquez y Jesús Sánchez, han estado a su lado durante el anuncio de su renuncia. El tono de su mensaje ha sonado a despedida desde el primer momento, ya que ha realizado un repaso de toda su trayectoria. Se va con la espina clavada de no haber conseguido negociar una lista única a las primarias y también con el hecho de haber perdido frente a Vallina.

Se va pero queda a disposición de su sustituto. El proceso marcado por los estatutos de IU Asturias establece que un organismo interno, una coordinadora, tiene que recibir la dimisión de Argüelles y designar un coordinador temporal. Hasta entonces, Argüelles seguirá en funciones. Ese coordinador temporal pasará un máximo de un año, hasta que una asamblea extraordinaria establezca un calendario de primarias. Aunque todavía es un poco pronto para hablar de fechas concretas, Argüelles cree que todo el proceso de elección no se podrá en marcha hasta después de las elecciones autonómicas y municipales del mes de mayo.

Su mayor pesar, ha explicado, es no haberse presentado ante los electores como una organización unida. Está convencido, y lo ha vuelto a reiterar, que lo mejor para la organización hubiera sido pactar una lista conjunta para confeccionar la lista. Ha comentado que con esa intención contactó con Ángela Vallina. Lo que ella entendió como una imposición, Argüelles ha matizado que fue un intento de negociación. De hecho, su intención era volver a intentar consensuar una candidatura si él hubiera ganado el proceso. Como no ha sido así y todos sus llamamiento a la unidad han fracasado, prefiere dar un paso atrás. 

El proyecto en el que sigue creyendo y por el que seguirá trabajando es el de una Izquierda Unida federal, con una personalidad propia de los diferentes territorios, «que no tengan que vivir en el enfrentamiento permanente con Madrid». A su juicio, «Madrid tiene que entender que nosotros tenemos una personalidad propia». Propone un diálogo «con referencia federal» pero sin un horizonte de ruptura.

En su despedida, ha tenido unas palabras para Gaspar Llamazares. Ha reconocido que una gran parte de la organización esperaba que Llamazares repitiera como candidato. Ha explicado que había cierto consenso en torno a su figura, tanto por su trayectoria como por su trabajo. Su marcha abrió un escenario muy diferente, que no esperaban. En ese intento de debate es donde Argüelles ha admitido que fracasó.