La subida del IRPF a las rentas altas afectará a 1.700 asturianos

G.L / L.F. REDACCIÓN

ASTURIAS

Los que ganen más de 130.000 euros al año tributarán 208 euros más al mes de media

08 may 2019 . Actualizado a las 19:33 h.

El programa fiscal de Pedro Sánchez para la próxima legislatura, recogido en el Programa de Estabilidad remitido a Bruselas la semana pasada, y que no es sino el mismo que figuraba en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para este año (que fue rechazado por el Congreso), incluye una subida del impuesto de la renta. Un incremento que afectará solo a 1.750 contribuyentes en Asturias, que son los que tienen rentas anuales superiores a los 130.000 euros. 

Frente al escenario actual, en el que se aplica el tipo máximo del IRPF a partir de los 60.000 euros de ingresos, el acuerdo alcanzado entre PSOE y Podemos pasa por establecer dos nuevos tramos de tributación, incrementa en dos puntos el marginal para las rentas entre 130.000 y 300.000 euros, y en cuatro puntos a partir de esa última cifra.

Los Técnicos del Ministerio de Hacienda, Gestha, estiman que la subida del IRPF a las rentas superiores a los 130.000 euros apenas afectará al 0,37% de los contribuyentes en Asturias. En este sentido, Gestha calcula que el aumento recaudatorio anual de incrementar dos puntos los tipos impositivos sobre la base general del IRPF para los contribuyentes que tengan rentas superiores a 130.000 euros y cuatro puntos para la parte que exceda de 300.000 euros será de 4 millones de euros. Por otra parte, los técnicos sostienen que cada uno de los 1.750 contribuyentes en Asturias con rentas que oscilan en esta horquilla tendrá que pagar, de media, unos 2.500 euros más al año por este impuesto.

¿Y cuánto pagarían de más al mes? Las cifras varían en función de quién haga los cálculos. El Gobierno estima, en el documento remitido a Bruselas, que la medida aumentará la recaudación en 348 millones de euros (apenas la mitad de los 670 millones que reportará el castigo fiscal al diésel, que sí tiene un impacto masivo y en todos los estratos salariales). Una cifra que, repartida entre el total de afectados, supondrían un aumento de la tributación de 2.700 euros al año por cabeza (unos 208 al mes). Sin embargo, en Gestha calcula que tendrían que abonar una media de 2.500 euros más al año (208 al mes).

Además de incrementarse los tipos generales del IRPF, también se elevarán los que se aplican al ahorro, del 23 al 27 %, a partir de 140.000 euros. Y como muchas grandes fortunas escapan del impuesto de la renta, el acuerdo entre PSOE y Podemos incluye también una subida de un punto del impuesto de patrimonio para aquellos con más de diez millones de euros en bienes.

A partir del 2020

Eso, claro, siempre que haya acuerdo parlamentario para aplicar las medidas. De momento, el Gobierno ya descarta que se puedan aplicar este año (porque no se presentará proyecto presupuestario) y aplaza la entrada en vigor al 2020. En el caso del IRPF esto implica que se notará en la declaración que se presente en la primavera del 2021, aunque el aumento de las retenciones recortaría la nómina de los afectados ya el próximo enero. Eso, siempre que el Ejecutivo consiga una mayoría parlamentaria para sacar adelante la subida, y que esta no se vea modificada por la necesidad de lograr apoyos.

El Gobierno prevé 1.339 millones más para la Seguridad Social con el alza del salario mínimo

El Gobierno prevé que la Seguridad Social ingrese 1.339 millones de euros más este año gracias al incremento del 22,3 % del salario mínimo interprofesional (SMI) hasta los 900 euros mensuales. Según la actualización del Programa de Estabilidad remitido por el Gobierno a Bruselas, este aumento procede del alza de las cuotas, así como de las bases mínimas de cotización, que aumentaron al mismo ritmo que el SMI hasta situarse en 1.050 euros mensuales. Esta aportación extra, junto a las derivadas de cambios normativos aprobados por el Ejecutivo recientemente, generarán unos ingresos extra de 3.786 millones de euros este año.

Entre estas modificaciones, destaca el incremento del 7% de las bases máximas (850 millones), el alza al 1,5 % del tipo mínimo por contingencias profesionales (425 millones), las cotizaciones para cuidadoras no profesionales (296 millones) o las de policías para acceder a la jubilación anticipada (254 millones).

También tendrá un impacto en los ingresos del sistema la cobertura total obligatoria para los trabajadores autónomos por contingencias profesionales (205 millones) y el incremento de las cotizaciones tras la ampliación del subsidio para mayores de 52 años (193 millones). Las proyecciones presupuestarias del Gobierno arrojan un déficit de la Seguridad Social del 1,2 % del PIB, dos décimas menos del registrado en el 2018, cuando las cuentas de esta administración cerraron con un desfase de 17.088 millones de euros.

Esta tendencia se mantendrá durante los próximos años. El Gobierno prevé que la Seguridad Social cierre 2020 con un déficit del 0,9 %, que se reducirá al 0,4 % en el 2021, para quedarse en equilibrio presupuestario en el 2022.