La posible candidatura del catedrático de Derecho aglutina a los sectores clásicos de la Universidad
06 jun 2019 . Actualizado a las 19:56 h.La cita era a las 4,30 de la tarde, en un aula de la Facultad de Derecho, justo al inicio de la semana. Pretendía ser una reunión discreta pero la asistencia desbordó todas las previsiones y rebasó el círculo privado al que en un primer momento iba dirigido. La oposición al actual rector de la Universidad de Oviedo, Santiago García Granda, se está aglutinando en torno al catedrático de Derecho Constitucional, Ignacio Villaverde, exsecretario del Consejo Social. Ese encuentro consiguió meter en la misma sala a integrantes de los sectores clásicos de la Universidad, adversarios en el pasado y unidos ahora por sus quejas con la gestión de García Granda. Miembros de los bloques de Vicente Gotor, Paz de Andrés, José Muñiz o Pedro Sánchez Lazo parecen decididos a trabajar juntos para montar un proyecto transversal.
Queda menos de un año para las elecciones en la Universidad de Oviedo y los rumores se han ido intensificando con el paso de las semanas. El final de la doble cita política con las urnas ha dado el pistoletazo de salida. Si los sectores descontentos con Granda quieren montar una candidatura alternativa, no tienen tiempo que perder. El rector lleva ya tres años a los mandos y en este tiempo apenas han trascendido conflictos, más allá de algún desencuentro con la Consejería de Educación por los presupuestos o los retrasos en las becas o la dubitativa implantación del grado de Educación Física. El resto ha sido pacífico sin una oposición clara.
Sin embargo, de puertas para adentro no todo es una balsa de aceite. La desbordada reunión del aula de Derecho parece confirmarlo. Asistieron desde decanos a directores de departamento, además de profesionales influyentes y de gran prestigio dentro de la institución y con experiencia en carreras electorales previas. La idea que les inspira es montar candidatura de integración que frene un segundo mandato de Santiago García Granda.
Villaverde -que ya ha ocupado otros cargos de gestión universitaria, como la secretaría de la Universidad en la etapa de Juan Vázquez- será la cabeza visible de este movimiento pero, por el momento, no quiere hacer declaraciones. A la llamada de La Voz, se ha limitado a confirmar la existencia de esa reunión, ha reconocido que le han sugerido que es la persona adecuada para liderar este trabajo y que se siente «muy honrado». El catedrático que ya ha presentado su renuncia como secretario del Consejo Social, cargo que ocupará en funciones hasta que el futuro Gobierno del Principado renueve este organismo, ha optado por un perfil discreto.
Pero en la Universidad es complicado guardarse secretos y más cuando se trata de hablar de unas elecciones al rectorado. El movimiento para propiciar un cambio crece y el ruido preelectoral ya se percibe con intensidad. La clave para saber las opciones de Villaverde radica en esa capacidad para romper los límites de los sectores clásicos y en poder montar un programa.