Circulaba drogado, en sentido contrario y con dos niños pequeños en el asiento trasero

La Voz

ASTURIAS

Marcos Míguez

Un hombre ha sido detenido en El Entrego tras provocar momentos de tensión con los vehículos que se encontraba a su paso

13 jun 2019 . Actualizado a las 16:21 h.

La Policía Nacional ha detenido a un hombre por conducir, bajo los efectos de las drogas, durante veinte kilómetros en sentido contrario y por el arcén con dos niños, de unos tres años, en el asiento trasero del vehículo.

La Jefatura Superior de Policía ha explicado que el detenido, vecino de El Entrego, es un conocido delincuente, al que le constan numerosos antecedentes penales, que provocó momentos de gran tensión al obligar a varios vehículos, con los que se cruzó cuando circulaba en sentido contrario, a esquivar su coche e incluso a los peatones que se encontraban cerca de la calzada.

Los hechos ocurrieron a las 19:00 horas de ayer, cuando un coche patrulla de la Comisaría de Langreo se cruzó en la avenida de La libertad de Blimea con un vehículo que circulaba de forma anómala, percatándose a continuación que era conducido por un conocido delincuente de la zona, que carece además de permiso de conducir.

Los agentes trataron de detenerle, haciendo uso de las luces y sirena del vehículo policial, pero el conductor huyó durante veinte kilómetros y circuló en sentido contrario en dirección a la localidad de Tudela Veguín.

La Policía relata, en un comunicado, que era tal la temeridad del detenido que, ya en el corredor del Nalón, adelantaba a los vehículos que le antecedían sin hacer caso a la línea continua, obligando a los conductores que circulaban en sentido contrario a esquivarle para no colisionar de frente.

Finalmente, tras conducir algunos tramos en dirección contraria y en ocasiones por el arcén, colisionó en una peligrosa maniobra con el coche policial, cuando trataba de continuar su marcha, quedando el vehículo medio inmovilizado en la cuneta.

En ese momento, una mujer que acompañaba al detenido, salió apresuradamente del vehículo, mientras que el conductor volvió a ponerse en circulación, lo que no fue posible ante la rápida actuación de los agentes que salieron del coche patrulla y lograron reducir al conductor.

Lejos de deponer su actitud, el conductor se resistió para evitar su detención y, según el relato policial, golpeó a los agentes «violentamente», si bien éstos lograron inmovilizarle y proceder a su arresto.

Sin embargo, la «sorpresa» llegó a continuación, explican fuentes policiales, cuando los agentes comprobaron que en el asiento trasero del vehículo se hallaban dos niños, de unos tres años, que resultaron ser hijos de la mujer que viajaba con el detenido.

Tras someter al conductor a varias pruebas, se constató que había consumido cocaína, heroína y hachís.

Después de la instrucción de las diligencias policiales, este jueves ha sido puesto a disposición del juzgado de guardia de Pola de Laviana, acusado de un delito contra la seguridad del tráfico y otro de atentado a agentes de la autoridad. EFE