Hacienda hace caja en Asturias con su batalla contra el gasoil

L.F. / F.F. OVIEDO

ASTURIAS

Los conductores de la región pagan 1,3 millones extra al fisco al consumir un 5,5% más de gasolina

23 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«El diésel tiene los días contados». Esa fue la carta de presentación de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, cuando tomó posesión, hace un año. Y la sola amenaza surtió su efecto, pues los españoles empezaron a comprar más coches de gasolina que de gasoil, asustados también por los planes -aún no ejecutados- del ahora Gobierno en funciones de equiparar los impuestos de uno y otro combustible, lo que supondría un encarecimiento importante del segundo carburante. Ahora hay unos diez céntimos por litro de diferencia entre uno y otro solo en tributos.

Bien, pues esta especie de persecución al diésel por cuestiones medioambientales explica que el consumo de gasolina en Asturias haya repuntado un 5,5% entre enero y junio de este año (y un 6 % a nivel nacional). Según datos de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores), durante ese primer semestre se sirvieron 2.350 toneladas más en la comunidad. Teniendo en cuenta que el impuesto de hidrocarburos se lleva 47,2 céntimos por litro, resulta que el gran ganador de esta batalla contra el gasoil es -junto a las grandes petroleras- la Agencia Tributaria, pues en seis meses se ha embolsado 1,1 millones extras en Asturias, y unos 65 más en toda España. Pero hay que tener en cuenta que sobre esas cantidades hay que aplicar el 21 % de IVA, con lo cual, resulta que la recaudación adicional alcanza los 1,3 millones en la comunidad y unos 80 a nivel nacional.

Pese a ese repunte del consumo de gasolina, este combustible todavía no es capaz de hacerle sombra a su gran competidor. El gasoil se mantiene primero, y con gran diferencia, pues su consumo casi cuadruplica a la sin plomo. Y eso a pesar de la caída sufrida en el último año, periodo en el que el consumo de diésel bajó un 3,2%. A nivel nacional ha bajado un 0,8 %.

En el primer semestre del 2018, antes de que el Gobierno, ahora en funciones, le declarara la guerra al diésel, no ocurrió lo mismo que ahora. Entonces, el consumo de gasolina descendió levemente; mientras que el de gasoil creció a un ritmo cercano al 2%.

Este cambio de tendencia en el negocio de los carburantes se explica por los datos de ventas de coches en los últimos meses. Así, según la patronal Foconauto, entre enero y julio se registró un cambio radical respecto a lo que ocurría antes de que el Gobierno iniciase su batalla. En esos meses, se vendieron en Asturias 6.920s vehículo de gasolina, cifras que suponen un incremento anual del 7%. El 66% de todos los coches vendidos en la región en ese periodo fueron de gasolina.

Esto tiene un efecto contrario en las ventas de coches de gasoil, que descendieron en Asturias entre enero y julio casi un 40%. Se vendieron en la región en ese periodo 2.523 coches que usan ese conmbustible, el 24% del total. Por último, y aunque las cfras son mucho más modestas, también han aumentado los incluidos en la categoria de «Resto». Ahí se incluyen, por ejemplo, los eléctricos y los híbridos. Los concesionarios vendieron en esos siete meses 1.044 vehículos de este tipo, casi el 10% del total.