De León a Gijón, a diario, por una media jornada: precariedad en las aulas

Carmen Fernández REDACCIÓN

ASTURIAS

Largas colas de profesores interinos en la Consejería de Educación para firmar su contrato
Largas colas de profesores interinos en la Consejería de Educación para firmar su contrato

Los interinos docentes firman este nuevo curso esperando largas colas y con quejas por las condiciones que, en muchos casos, ni cubren gastos. «Yo no como medio plato, lo quiero entero», reivindican

07 sep 2019 . Actualizado a las 11:35 h.

Los profesores docentes interinos del Principado han protagonizado una imagen que ya es tradicional. Como cada septiembre en la Plaza de España de Oviedo, frente a la Consejería de Educación a lo largo de toda la mañana los profesores han tenido que sufrir largas colas para poder fimar su contrato y formalizar así su incorporación al trabajo en este curso que comienza. Este año, el sistema educativo asturiano contará con más de 3.000, según confirmaba la consejería de Educación, Carmen Suárez y publicaba el Principado el viernes 30 de agosto. Muchas son medias jornadas.  Estos docentes denuncian las condiciones. Explican que no han tenido más remedio que aceptarlas ante la necesidad de trabajar o para sumar puntos de cara a las oposiciones, pero que normalmente no compensan debido a las distancias que tienen que recorrer para acudir a los distintos centros asignados. 

De esas distancias kilométricas sabe mucho Fátima de la Varga, profesora interina en el Colegio Público Laviada en Gijón. Esta leonesa sigue residiendo en su ciudad de nacimiento ya que, como ella explica ha sido, «una de los muchos afectados por las medias jornadas». Con el salario que percibirá ppuede cubrir el coste de los desplazamientos pero no puede permitirse un piso en Asturias: «Los alquileres de Gijón están carísimos, al final he aceptado estas condiciones para hacer puntos en las oposiciones». Lleva tres años como interina y es la segunda vez que se presenta a estos exámenes, una vez en Castilla León y otra en el Principado, Ha aprobado aprobado estas últimas pero sin plaza. «Aprobé pero no tengo plaza, así que vuelta a empezar», cuenta. También es conocedora de la rueda, una especie de Blablacar inventado por los profesores para turnarse para llevar el coche entre compañeros y ayudarse con los gastos de la gasolina, aunque de momento no ha coincidido con nadie. 

Tanto De la Varga como otros de los que como ella han formado cola para firmar su contrato coinciden en que todos los años pasa lo mismo. Aunque parece que poco a poco han mejorado la organización», reconoce Joaquina Suárez, docente en el Colegio Público de Educación Especial Latores de Oviedo. Incluso ha habido voluntarios de sindicatos como  ANPE presentes en cada turno de firma, ofreciendo ayuda, información y repartiendo calendarios escolares. Suárez, por su parte, lleva 16 años siendo interina y viviendo cada septiembre la misma situación. «Por suerte tengo jornada completa, pero me parece muy injusto para los que no la tienen porque cuesta mucho desplazarse si te toca un centro lejano a donde vives», denuncia y propone que los colegios podrían agruparse para hacer jornadas completas. También se sabe todos los trucos para ahorrar un poco. «Conozco a gente que trabaja en Cangas que sí que utiliza la rueda porque sino no pueden cubrir gastos», cuenta.

Su opinión es respaldada por otra veterana eventual, J.F.S. de 63 años y natural de Laviana.  Prefiere no dar su nombre porque afirma estar a punto de jubilarse, aunque como profesora de asturiano en Primaria no pierde la ilusión de la lucha porque los que le sustituyan tengan mejores condiciones. «Llevo casi 12 años como interina y la situación va a peor, yo ganaba más en el 2000 que ahora, así que ya no me voy a presentar a las próximas oposiciones», explica. Por eso espera que los nuevos consejeros de Educación y Política Llingüística tengan en cuenta el asturiano y su cultura. «No soy extremista pero quiero oficialidá, para eso tengo la especialidad de castellano, inglés francés y asturiano» afirma. Añaden que para ella están rompiendo los puestos de los trabajo de los maestros a los que se les está dando medias jornadas. «Yo no como medio plato, lo quiero entero y para jubilarme necesito estar tres años a jornada completa», concluye.