Antidisturbios asturianos en Cataluña: «Apenas tenemos trabajo y hay una absoluta falta de organización»

E. G. B. REDACCION

ASTURIAS

Manifestantes ante antidisturbios en Via Laietana
Manifestantes ante antidisturbios en Via Laietana Enric Fontcuberta | EFE

Unos 50 efectivos de la UIP de Oviedo forman parte, desde el 30 de octubre, del operativo desplegado por Interior tras la sentencia del procés: «La gente está muy descontenta con las condiciones laborales»

10 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«Apenas tenemos trabajo porque no está pasando absolutamente nada. Fuimos cuando vinieron los Reyes y poco más. Estamos a la expectativa. Lo que sí hay es una falta de organización absoluta. La gente está muy descontenta y muy quemada con las condiciones laborales, pero es la tónica de los últimos años. Creíamos haber tocado fondo cuando lo del Piolín y todo aquello, pero ya se ve que no, es susceptible de ser peor aún». Hablan antidisturbios asturianos desplazados dentro del operativo desplegado por el Ministerio del Interior en Cataluña tras las sentencia del «procés» para apoyar a los Mossos d’Esquadra.

Alrededor de medio centenar pertenecen a la UIP de Oviedo, que llevan desde el pasado 30 de octubre en Cataluña, en donde los agentes desplazados de otras comunidades se alojan en hoteles de Salou y La Junquera, los únicos municipios en los que pueden hacerlo. «En los demás no nos quieren, la presión que ejerce la sociedad lo impide», explican, mostrando en todo caso, y pese a que ya no están repartidos por cuarteles y otros lugares, su descontento con sus condiciones laborales.

«Nosotros llevamos desde el día 30 porque el tema gordo coincidió con los Premios Princesa y es cita ineludible nuestra, pero nos desplazan por toda España. Como Oviedo tiene poca conflictividad, somos de las unidades que más viajamos». A Cataluña, en esta ocasión, solo han ido entre 45 y 50 porque eran los que estaban disponibles. «En Oviedo, redondeando, vendremos a ser un centenar, pero es una de las unidades con más bajas por el estrés que provocan las condiciones laborales. En la base debieron quedar unos 15 y otros 30 están de baja. Como es una unidad veterana, se está yendo mucha gente. Los que entran nuevos, como no conocían las condiciones de antes, se acostumbran a lo malo mejor, por decirlo de alguna manera, pero se está mal a gusto».

En Cataluña, estos días, también. «No como cuando los barcos, ahora estamos en hoteles, pero por ejemplo estamos cobrando menos de lo normal y en las dietas laborales no entra la lavandería». Dietas, añaden, que responden a la llamada disposición décima, «una historia que se inventaron a partir de lo del 1 de octubre (el 1O) con el problema de que no podíamos ir a hoteles. Como nos tenían que meter en cuarteles y otros sitios, en vez de darnos la dieta normal y corriente, por esa disposición, nos daban una dieta que computaba en Hacienda. Una locura y una chapuza porque ahora resulta que nos tienen que devolver un montón de dinero». En algunos casos, hasta mil euros.

Ahora, aunque están en hoteles, perciben las dietas también a través de esa disposición décima pero sin incluir la lavandería. «Nos han prometido, pero sin firmar nada y todo en plan muy chapucero, un dinero extra por cada día trabajado. No sabemos cuánto, no sabemos cuándo y no sabemos si será verdad. Está todo organizado de cualquier manera. La jornada laboral que tenemos es pésima y, a la hora de pagar, cuentan lo que a ellos les interesa que son jornadas de ocho horas».

Estos días en Cataluña, a donde los agentes destinados en Oviedo llegaron cuando ya quedaban muy atrás las primeras jornadas tras el fallo judicial, no tienen gran cosa que hacer. «El otro día porque vinieron los Reyes, pero de momento no hemos hecho nada. Los mossos son los que están además en la primera línea de choque. Si estuviéramos nosotros en primera línea habría lío, porque la gente está como jaurías humanas. Con nosotros es un odio irracional», indican.

Hoy, jornada electoral, desconocen qué ocurrirá. «Hay muchos focos reducidos y depende de por dónde salten o de lo que maneje la gente de arriba que los maneja», dicen, recordando que en todo caso se ha publicado que Tsunami Democràtic pretende paralizar Cataluña de nuevo durante tres días a partir del lunes. Pero también recuerdan lo duras que son las penas y sanciones por delitos electorales. «La gente no es tonta. En el fútbol, cuando se hizo la ley del deporte en la que la multa mas pequeña son 3.001 euros y si eres reincidente a partir de 6.000, no se volvió a intervenir».

Vuelven a insistir en la pérdida de derechos laborales de estos últimos años, sobre todo a partir de 2012. «Ha cambiado todo y de mal en peor. La jornada labora se aprobó mediante una especie de engaños con los pseudosindicatos que había. Hay libertad sindical, ya, pero tiene que ser en los sindicatos amarillos que son una tomadura de pelo en general. Ni puedes reivindicar ni tienes ningún derecho ni nada», lamentan, enumerando algunas de las condiciones que van en contra de los estatutos de los trabajadores, como que una hora nocturna equivalga a una diurna o «cosas extrañas» como que un día de vacaciones cuente como 0,64 días: «Si te vas de vacaciones cinco días, en el cuadrante te cuenta como que has estado tres, con lo cual tienes que recuperarlos porque los cuadrantes son de 18 días trabajados sobre 28 pase lo que pase. O, estando aquí ahora, si tienes tres días libres, deberías poder marchar a casa o a donde quisieras, pero te dicen que no, que no puedes». Antes, añaden, las condiciones laborales eran buenas: «La gente aguanta porque la mayoría no tenemos la plantilla en nuestra ciudad. Haces puntos para marcharte cuando antiguamente no se marchaba nadie».