El precio de la tierra agrícola se desploma en Asturias

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

Alumnos de un colegio de Oviedo aprenden a cultivar
Alumnos de un colegio de Oviedo aprenden a cultivar Ayuntamiento de Oviedo

El cierre de explotaciones, el abandono del medio rural y el matorral que invade los pastos provocan que el valor de los terrenos haya caído un 16,6% en un año

07 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Los problemas del sector agrícola y ganadero, el abandono del medio rural y el mal estado de los terrenos de aprovechamiento está repercutiendo en el precio de las tierras agrícolas asturianas. Según la Encuesta de Precios de la Tierra 2018, publicada recientemente por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el valor de la superficie agrícola en la región era el pasado año un 16,6% más bajo que en 2017. Esto hace que Asturias no sólo que lidere la caída del precio de las tierras agrícolas, sino que el descenso sea estrepitoso en tanto que ninguna otra comunidad autónoma presenta una variación negativa tan acusada.

En concreto, el precio de la hectárea en Asturias ha pasado de los 11.680 euros que costaba en 2017 a los 9.742 euros de 2018. Esto es 1.938 euros menos en tan sólo un año, un descenso que no se da en ninguna otra de las comunidades en las que según el citado estudio bajó el valor de la tierra. Además de en la región asturiana, se ha producido en Madrid (-6,5%), en la Comunidad Valenciana (-1,0%), en Castilla La Mancha (0,7%) y en Cataluña (-0,6%).

Sin embargo, el ascenso del precio medio en 13 de las 21 tipologías de cultivos consideradas por la encuesta conduce a una evolución positiva en los cultivos (+1,5%), por lo que el precio medio de la tierra para uso agrario en España ha aumentado 126 euros por hectárea. No así en los aprovechamientos, los más abundantes en la comunidad asturiana, donde la evolución ha sido ligeramente negativa en el conjunto del país.

Pero ¿a qué se debe que el precio de la tierra agrícola haya sufrido tal descenso en nuestra región? El cierre de las explotaciones y el abandono del medio rural son las primeras razones que considera José Ramón García Alba Pachón, secretario general del sindicato UPA Asturias, que apostilla que la bajada del precio de los terrenos de aprovechamiento tiene también que ver con otras con el mal estado de las zonas de aprovechamiento y pastos.

«En el medio rural va muriendo todo. La gente no planta porque se está convirtiendo todo en un matorral y eso es objeto de las llamas, así que la gente no invierte porque es como quemar billetes», manifiesta Pachón, que añade que para la gente que como él vive en la zona rural, tener una finca sin mantener al lado «es como tener gasolina pegado a lo tuyo», además de que influye en la rentabilidad de la explotación al tener que destinar más medios para el mantenimiento.

Él mismo no se sorprende, por tanto, de que en Asturias sea donde más haya bajado el valor de los prados y otras superficies para pastos, ya que tiene en cuenta también la orografía del terreno, con mucha pendiente y zonas de difícil acceso para trabajarlas con medios mecánicos de más capacidad, como puede ser un tractor. Así, el representante de UPA Asturias entiende que hay muchos factores entrelazados por los que se puede producir en la región ese descenso tan acusado en el precio de los aprovechamientos.

El valor de este tipo de terrenos también cae en Madrid (-9,7%), Castilla La Mancha (-3,6%), Murcia (-3,2%) y País Vasco (-1,1%), aunque estas comunidades no presentan una variación tan importante en el precio medio porque lo compensan con las subidas del precio de las tierras que se produce en otros tipos de tierras, como pueden ser las de cultivo de secano, de regadío, las de frutales, viñedos u olivares.

El abandono de la actividad y que cada vez haya menos demanda de tierras es en opinión de Mercedes Cruzado, la secretaria general de COAG-Asturias, el motivo por el que desde 2017 a 2018 ha bajado tanto el precio de la tierra agraria en la región. Además alude a que la baja rentabilidad que tienen hoy en día las explotaciones agrícolas y ganaderas no permiten invertir en terreno, y eso que apostilla que Asturias ha sido «históricamente una región deficitaria en superficie» porque «hay mucho terreno que no vale para nada». En este sentido, coincide con el representante de UPA Asturias en la compleja orografía de los pastos de nuestra región y en que el crecimiento del matorral dificulta el aprovechamiento de mucho terreno.