El presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, presidió la renovación de la dirección del órgano tomando el relevo a Ignacio Vidau
20 dic 2019 . Actualizado a las 16:50 h.El nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA), Jesús María Chamorro, se ha comprometido a defender con «nitidez y contundencia» la independencia del Poder Judicial, su imparcialidad social, neutralidad política y profesionalidad, así como a desempeñar su cargo con «transparencia, diálogo y lealtad institucional».
Chamorro ha asumido las riendas del TSJA en un acto celebrado este viernes en el palacio de Valdecarzana que ha estado presidido por el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, y que ha contado con la presidente del Principado, Adrián Barbón, entre otras autoridades.
El CGPJ designó el pasado 30 de octubre a Chamorro para relevar a Ignacio Vidau durante los próximos cinco años al frente del TSJA, nombramiento que fue ratificado recientemente por el rey Felipe.
Ante sus homólogos de Castilla y León, Cantabria, La Rioja y Galicia, y decenas de representantes del mundo de la judicatura y la abogacía, Chamorro ha asegurado que no escatimará esfuerzos en el cumplimiento de sus funciones y que espera no defraudar las expectativas puestas en él por sus compañeros o por el CGPJ .
Tras señalar las carencias de medios que sigue habiendo en la administración de Justicia, Chamorro ha asegurado que es preciso materializar «una imagen de la administración de justicia moderna y eficaz» y relanzar la comisión mixta con el Gobierno del Principado, al que ha pedido que haga una apuesta decidida por la Justicia y que planifique soluciones con un plan director a medio y largo plazo.
El ya presidente del TSJA ha apostado también por impulsar la creación y actividad de las oficinas de apoyo a las víctimas de delitos, especialmente de los de violencia de género, y por desplegar «de forma racional y eficaz» equipos psicosociales.
También ha abogado por analizar «de manera ponderada» la actual distribución de los órganos judiciales y por plantear la centralización de servicios sin olvidar la necesaria cercanía que la justicia debe tener al ciudadano.
Tras ratificar su compromiso con la Carta Magna y con la ley, que le han acompañado en los últimos 30 años de carrera, Chamorro ha afirmado que servir al Estado y al Poder Judicial y a los ciudadanos es algo consustancial en el ADN de los jueces y magistrados y constituye el pilar básico del ejercicio de su función.
Chamorro González tomó posesión en su primer destino, en el juzgado de primera instancia e instrucción número 1 de Pravia, en 1990, año de su ingreso en la Carrera Judicial, y desde entonces pasó por distintos destinos en Cádiz, el País Vasco y Oviedo hasta que en 2004 pasó a presidir la Sala de lo Contencioso- Administrativo del TSJA, cargo en el que ha permanecido hasta la actualidad.
«Independencia, unidad, responsabilidad, neutralidad y sobre todo sometimiento exclusivo al imperio de la ley no son solo grandes palabras, son principios y fundamentos del día a día de jueces y magistrados», ha señalado Chamorro, que también ha tenido palabras de reconocimiento y agradecimiento para su antecesor en el cargo.
Académico de número de la Real Academia Asturiana de Jurisprudencia, Chamorro ha advertido que a veces se pretende trasladar a la ciudadanía de forma interesada que hay falta de independencia de los órganos judiciales pero que él, en todos los años de ejercicio, jamas ha visto que jueces o magistrados tomaran decisiones sin otro condicionante que el de impartir imparcial justicia.
Chamorro, que ha reivindicado la unidad del Poder Judicial como principio básico, ha asegurado que los jueces españoles están en estos últimos tiempos «a la altura de las exigencias en unas circunstancias muy lamentables que están en la mente de todos».
Lesmes, por su parte, se ha mostrado convencido de que esta nueva etapa se a va a caracterizar , como hasta ahora, por los principios de lealtad y de estrecha colaboración.
Ante Barbón y otras autoridades ha reconocido, además, el «gran esfuerzo que se realiza desde la administración autonómica para la mejora de la de Justicia, dotándola de medios adecuados y suficientes, elemento determinante para el eficaz cumplimiento de su cometido constitucional»; según informó EFE.
Por otra parte, el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) Carlos Lesmes Serrano, ha advertido este viernes de que, si bien «la fortaleza del Poder judicial siempre ha sido pilar fundamental para la convivencia en democracia, hoy lo es más que nunca».
«Nuestro papel como garantes del Estado de Derecho y del cumplimiento de la Ley por parte de todos, sin excepción, es en este momento absolutamente imprescindible», ha añadido antes de incidir en que para ello cuentan con el «firme compromiso» de cuantos integran la carrera judicial, con el apoyo del resto instituciones.
Lesmes ha presidido hoy en Oviedo la toma de posesión Chamorro como nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA), allí ha reconocido «la gran labor que desempeñan» estos órganos en toda España y las Audiencias Provinciales, y ha destacado la «extraordinaria importancia» de contar con un «Poder Judicial independiente, como máxima garantía de la existencia real y efectiva del Estado de Derecho en su definición constitucional».
«Es en la independencia judicial y en el sometimiento exclusivo al imperio de la ley en donde reside la autentica excelencia en el ejercicio de la función jurisdiccional», ha añadido el presidente del CGPJ, para quien esa excelencia consagrará la garantía plena de derechos y aumentará la confianza del ciudadano en la justicia.
Lesmes ha incidido en su intervención en el compromiso que les une «en la defensa de esos valores fundamentales del Estado de Derecho» y en el orgullo «hacia los jueces del territorio de España y de Asturias» por su vocación de servicio público con la que dejan patente cada día que «impartir justicia no es un privilegio personal, sino una garantía para la convivencia en sociedad».
Y es así porque la Justicia, en su opinión, no es sólo un valor abstracto, sino también un instrumento efectivo al servicio de los ciudadanos como garante de sus derechos y exigencia de sus obligaciones.