La empresa lo achaca al bloqueo de los piquetes a los accedos al centro logístico de la empresa en Llanera
22 dic 2019 . Actualizado a las 11:08 h.Alimerka calcula que puede perder dos millones de euros en alimentos perecederos como consecuencia del bloqueo al que está siendo sometido su centro logístico de Llanera desde primeras horas de la mañana de la primera de las ocho jornadas de huelga que CCOO, UGT y USO han convocado en el comercio minorista de alimentación de Asturias para exigir mejoras salariales.
Un piquete se encuentra instalado de forma permanente en los accesos al centro logístico de Alimerka en Llanera desde primera hora de la madrugada para impedir la entrada y salida de productos para abastecer a los 128 supermercados que tiene en Asturias.
El piquete, integrado por un centenar de personas que se van turnando para garantizar que en ningún momento de los días de huelga programados pueda o entrar o salir mercancía, ha impedido hoy que un centenar de camiones pudiesen abastecer al centro o distribuir sus productos.
Este bloqueo ha sido denunciado ante la Guardia Civil por la dirección de Alimerka que ha detallado que el coste económico de distintos productos perecederos cuyo deterioro será evidente en las próximas horas alcanzará unos dos millones de euros.
Hasta mediodía de hoy los camiones de gran tonelaje que tuvieron que darse la vuelta desde la rotonda de acceso al centro logístico superaban la treintena, mientras que los viajes de la flota propia que suministran a las tiendas, y que se han visto obligados a suspender, superaban los 80.
El paro no ha impedido la apertura de la mayor parte de los supermercados de Asturias aunque, según los sindicatos, muchos de ellos sí que se están viendo afectados por la falta de personal y la escasez de clientes.
La primera de las ocho jornadas de huelga convocadas en la mayor parte de las cadenas de supermercados -Mercadona y El Corte Inglés tienen convenio propio- se ha desarrollado sin incidentes, según las mismas fuentes, que han calificado esta primera jornada de paro de «positiva».
La falta de personal en algunos establecimientos ha provocado que sólo haya una caja de cobro abierta o que se hayan tenido que cerrar las secciones de frutería, carnicería, panadería o pescadería.
Desde primera hora, piquetes informativos están recorriendo los supermercados de Oviedo, Gijón y Avilés, entre otras localidades, para tratar de forzar el cierre de establecimientos e informar a la clientela de la protesta que llevan a cabo y a la que están convocados unos 12.000 empleados de 350 supermercados.
A falta de datos concretos, fuentes de CCOO han señalado que la incidencia del paro está siendo similar en todas las cadenas aunque, por el peso que tiene Alimerka, con unos 6.000 trabajadores, se ha hecho notar más.
Desde Alimerka se ha cifrado el seguimiento de la huelga en un 16,75 por ciento de sus trabajadores y que sólo cinco de las 128 que operan en Asturias no han abierto por carecer de suficiente personal para atender al público.
La cadena de supermercados ha señalado que no se han producido incidentes en la mayoría de sus centros de trabajo, pero que en el centro logístico de Llanera un piquete integrado por una treintena de trabajadores impide desde anoche el acceso de camiones que proveen y distribuyen mercancía.
Para el consejero de Industria, Enrique Fernádnez, es una lástima que no se haya logrado un acuerdo que se trató de alcanzar hasta el último momento y que desde el Principado van a tratar de nuevo, con sus órganos de intermediación y arbitraje, superar esta situación de desencuentro y que las partes celebren un nuevo encuentro que permita recuperar la normalidad en el sector.
Tras dos años de negociación en los que ya hay acuerdo sobre la subida salarial -1,8 % en 2019, 2 % para 2020 y 2,38 % en 2021-, el principal escollo se centra en la regulación de los descansos y en el establecimiento de un sistema de ascensos profesionales que permitiría ir incrementando los salarios a medida que el trabajador cuente con mayor antigüedad en la empresa.
Según Alimerka, aceptar el planteamiento sindical supondría aumentar el coste salarial en un 24,6 por ciento en cuatro años y haría entrar en pérdidas a las empresas, un escenario que niegan los sindicatos, que recuerdan que dicha empresa ganó 9,5 millones en 2018 y que el salario medio del sector se sitúa en 820 euros con una jornada anual de 1.820 horas de lunes a sábado.
Pedir que compute como tiempo efectivo de trabajo la pausa del desayuno y de la de merienda o reconocer la antigüedad en el empleo son otras mejoras planteadas por los trabajadores de estos establecimientos.
La huelga está previsto que continúe los días 23, 24, 28, 29, 30 y 31 y que no afecta a cadenas como Mercadona o El Corte Inglés al tener convenio propio; según recogió EFE.