Varias asignaturas amplían el número de opciones entre los que podrán elegir los estudiantes
07 feb 2020 . Actualizado a las 10:45 h.«El examen se presentará en cinco preguntas referidas a los estándares de aprendizaje evaluables. Cada una de las preguntas está asociada a cada uno de los agrupamientos de bloques que constan en la precipitada orden ministerial que regula la prueba. Cada una de esas cinco preguntas tendrá dos opciones, A y B, entre las que el alumno o la alumna deberá elegir una de esas dos alumnas». Este extracto del acta de una reunión del grupo de trabajo que prepara el examen de la EBAU para este año resume el camino que sigue el Principado. No reducirá los contenidos de la materia, pese a las presiones de los estudiantes, que dicen que es el temario más amplio del país, lo que dificulta la prueba. Sin embargo, les concede alguna facilidad más, al incluir dos opciones en cada bloque para que puedan elegir. Además, incluye una pequeña pulla a la forma en la que el propio Ministerio de Educación está organizando la prueba de acceso a la Universidad.
Los cambios no se centran en exclusiva en Historia. También se ampliarán a otras materias, como por ejemplo a Lengua Castellana y Literatura II. En todos los casos, no se toca la estructura que sostiene el examen ni se reducen los contenidos. Lo que se hace es ampliar el abanico de posibilidades al dar dos opciones para que el estudiante pueda elegir aquel tema que controla mejor. Así en Geología, otras de las que cambia este año, el acta reconoce que se modifica la estructura de la prueba respecto a años anteriores y que este curso no se realizarán dos exámenes independientes -Opción A y B- sino que en un único modelo de examen se propondrá una opción A y B en cada una de las preguntas, para que el alumnado opte por una de las dos opciones en cada una de las preguntas. Geología no es una de las materias obligatorias y su repercusión es menor. El curso pasado, por ejemplo, solo la eligieron 17.
La razón
Las novedades responden a las quejas estudiantiles, sin embargo, los resultados de los exámenes no parecen avalar esa dificultad extra. Los docentes que forman parte del grupo de trabajo de Historia han observado cómo el porcentaje de aprobados entre los años 2017, 2018 y 2019 ha ido creciendo de manera paulatina al pasar del 66,6% al 69,32% y al 75,62%, en la convocatoria del mes de junio. La extraordinaria de julio presenta peores datos pero también una evolución positiva.
Estos cambios fueron apuntados ayer en una reunión mantenida por la Consejería de Educación con representantes del Sindicato de Estudiantes. La queja de los alumnos se centra en Historia. No obstante, esta organización es partidaria de la abolición de la prueba, es decir, anular por completo la selectividad.
