«Si esto no se acaba enseguida, terminaremos solamente con los sectores de alimentacion y el sanitario», señaló el presidente de Asetra
29 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Como la caída de las fichas de dominó. Así define el presidente de la Asociación de Empresarios del Transporte y Aparcamiento de Asturias (Asetra), Ovidio de la Roza el impacto del parón económico general por el confinamiento de la cuarentena en el sector del transporte en la comunidad que ha reducido su actividad en alrededor de un 50% aunque se mantiene activo en dos elementos concretos: la alimentación y los productos sanitarios.
«En principio se estuvo trabajando relativamente bien con casi todos los sectores pero, claro, empezó a cerrar el automóvil, empezaron a cerrar los componentes relacionados con él, como los neumáticos; empezaron a cerrar también otras empresas importantes y otras disminuyeron el trabajo, así que vamos notando cada vez una disminución mayor», destacó De la Roza.
«Si esto no se acaba enseguida, terminaremos solamente con los sectores de alimentacion y el sanitario», insistió el presidente de la patronal del transporte en Asturias.
A mediados de esta semana, en el balance de la Consejería de Industria se recogía que hasta la segunda quincena de marzo se habían recogido en Asturias 6.850 solicitudes de expedientes de regulación temporal. De acuerdo con los datos facilitados entonces por el Servicio de Relaciones Laborales de la Dirección General de Empleo y Formación, ya se han tramitado un total de 1.036 que afectan a 3.565 personas. Hostelería y hotelería, servicios de restauración y catering a instituciones; peluquerías y otros tratamientos de belleza, y empresas de pequeño comercio son los sectores con más expedientes tramitados y se estima que también del total de los presentados.
En todo caso, la industria también ha sentido un fuerte impacto aunque sea de forma indirecta. Saint-Gobain anunció a comienzos de la cuarentena su intención de detener la actividad en Avilés y Arcelor paró uno de sus hornos en Gijón. En ambos casos la explicación aducida por las empresas fue el cese de actividad en el sector automovilístico.
«Ahora estamos bajando a un 50%, salvo en lo que respecta a productos de alimentación, que en eso se sigue trabajando incluso por encima de lo normal y en el sector de componentes sanitarios», destacó el presidente de Asetra que apuntó que están especialmente bajas actividades como la construcción o el metal y que, en terminos generales, «se están perdiendo pedidos».
No es posible calcular todavía con datos precisos el impacto de confinamiento en la economía regional, sin embargo el pasado lunes el Centro de Predicción Económica (Ceprede) publicó un informe que prevé que la crisis sanitaria por el coronavirus tendrá en Asturias un impacto equivalente al 1,36 por ciento del producto interior bruto (PIB). El último dato oficial del PIB regional asturiano corresponde al año 2018, y arroja una cifra de 23.340 millones de euros. Una mengua porcental como la que augura CEPREDE representaría una pérdida de alrededor de 317 millones de euros para la economía asturiana. En todo caso, ese informe señala también que el descenso del PIB en Asturias sería el segundo más bajo del país tras extremadura (para quien prevé una caída del 1,3 por ciento).
