Patronal y sindicatos piden ayudas ante los nubarrones que se ciernen sobre la economía regional
03 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Los primeros datos sobre el impacto del coronavirus en la economía asturiana eran previsibles, pero aún así son demoledores. La destrucción de de 11.578 puestos de trabajo se unen al brutal incremento de las insolvencias. Son datos además que no contemplan ni la anulación turística de la Semana Santa ni el aluvión de ERTES que están aprobados o pendientes de aprobar. El Principado mientras tanto acelera las ayudas con el salario social como colchón para evitar la quiebra social, y los sindicatos y la patronal piden ayudas: no es tiempo de austericidio, como sucedió en 2008. Estas son algunas claves de la tormenta sanitaria que se cierne sobre la economía asturiana.
Fin a seis años de crecimiento
La crisis del coronavirus ha supuesto la destrucción en Asturias de 11.578 puestos de trabajo en las últimas tres semanas de marzo y el incremento de 4.511 parados. Y eso que el Gobierno ha precisado que el dato medio de la afiliación mensual no refleja el impacto de la crisis del COVID-19, puesto que el desplome de la ocupación, al igual que en el resto de España, se produjo entre los días 12 y 31 de marzo. Con ello, se ha roto una tendencia de más de seis años de crecimiento ininterrumpido. La racha se inició en octubre de 2013, el inicio del fin de la Gran Recesión, aunque muchos analistas alertan de que Asturias no se acabó de recuperar por completo de la crisis financiera de 2008.
La agricultura, un sector más que esencial
La caída del paro en marzo se produjo de manera generalizada en todos los sectores a excepción de la agricultura, uno de los sectores declarados esenciales durante la crisis sanitaria y que el mes pasado redujo el desempleo en solo 30 personas, hasta 1.395. Es decir, que el depauperado sector agrícola, abandonado desde hace décadas, es ahora más que esencial. Comparen: en el sector servicios, la lista del paro subió en 3.270 personas, hasta 55.864, especialmente en las ramas más afectadas por las medidas de confinamiento, el comercio y la hostelería. Además, subió en 789 en la construcción, hasta 6.829, y en 390 en la industria, hasta 6.573.
Y falta el aluvión de ERTES por contabilizar
El director general de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Alberto González, ha vaticinado «crecimientos muy importantes» del paro porque los datos de Trabajo no recogen los ERTES que se han presentado en los últimos días y que superan los 9.000 en Asturias. La patronal ha exigido poner todas las ayudas posibles para que se pierda el menor tejido empresarial y de empleo en Asturias. «Esto no va a ser una cifra de llegada, sino una cifra suelo a partir de la cual vamos a empezar a ver crecimientos del paro en los próximos meses muy importantes».
Y la Semana Santa
Tanto patronal como sindicatos han puesto también el foco en la Semana Santa, que habría arrancado la próxima semana y que era un estímulo tradicional para romper con las dinámicas de paro a principios de primavera. El coronavirus ha supuesto un mazazo temible para el sector turístico, que ahora mira con incertidumbre a la temporada de verano. La esperanza es poder salvar el verano, pero para ello la vuelta a la normalidad y al fin del confinamiento debería arrancar en mayo, a no más tardar. La caída en la curva de la pandemia en Asturias es una buena noticia que habrá que ir confirmando. El futuro pasaría porque la región pudiese salir antes que otras regiones del periodo de confinamiento. Pero todo ello es ahora solo una conjetura.
Las insolvencias se suceden
Los procedimientos de concursos de acreedores empresariales registrados en marzo en Asturias se incrementaron un 400 por ciento al pasar de los dos registrados el pasado año a los diez contabilizado en el mismo mes del presente ejercicio. Es la punta de iceberg de un fenómeno que puede ser inevitable en los meses de abril y mayo. Y eso pese a que mientras esté vigente el estado de alarma la declaración de insolvencia no es obligatoria.
Muerte al austericidio...
Los sindicatos han abogado por no apostar en esta ocasión, frente a la recesión de 2008, por los recortes sociales. La responsable de Empleo de CCOO, Úrsula Szalata, cree que hay que «acabar con las políticas de austeridad» que se pusieron en marcha en la anterior crisis económica y ha apostado por centrar las ayudas en los parados de larga duración, las familias con todos sus miembros en situación de desempleo o aquellos que no cobran prestación alguna. La secretaria de Política Sindical de UGT de Asturias, Mar Celemín, también ha incidido en la necesidad de adoptar medidas de protección de la actividad productiva, las empresas, el empleo y las personas más vulnerables. «Sin salud no habrá recuperación económica y laboral».
...Y larga vida a las ayudas sociales
La consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Melania Álvarez, ha recordado que el Principado cuenta con un presupuesto de 116 millones de euros para financiar el salario social, una cantidad que podría ser ampliada. Asturias es la comunidad autónoma de régimen común con mayor cobertura, al llegar a 22.000 familias.
Y una espada de Damocles ancestral
Lo recordaba ayer la portavoz de Ciudadanos, Laura Pérez Macho: Asturias ha entrado en esta crisis con una tasa de actividad de apenas el 50%, la más baja de España y de las más bajas de Europa. El acceso a la financiación de las empresas pasa a ser vital en los próximos meses, tanto la línea del Gobierno central como el regional.