Alsa ayuda al Ejército con 35 autobuses para luchar contra el COVID-19

La Voz REDACCIÓN

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Dos de los vehículos cedidos por la empresa irán destinados al Regimiento Príncipe número 3 de la Brigada de Infantería Ligera Autotransportable (BRILAT) en Asturias

18 abr 2020 . Actualizado a las 17:50 h.

La empresa Alsa ha puesto a disposición del Ejército de Tierra un total de 35 autobuses para apoyar la «Operación Balmis» en la lucha contra el coronavirus, de los que dos autocares han sido cedidos al Regimiento Príncipe número 3 de la Brigada de Infantería Ligera Autotransportable (BRILAT) en Asturias. Alsa es socio mayoritario de la Unión Temporal de Empresas (UTE) adjudicataria del acuerdo marco de transporte de personal por carretera y trabaja a diario con las direcciones del Mando de Apoyo Logístico del Ejército de Tierra (MALE) para cubrir sus necesidades de transporte.

La empresa ha entregado 26 autocares sin conductor, de los que 7 serán destinados a Córdoba, 5 a Valladolid, Barcelona y Madrid, 4 a Badajoz, 3 para la Comandancia General de Baleares (Mallorca, Menorca e Ibiza), 4 para el Mando de Ingenieros (2 en Salamanca, Zaragoza y Burgos) y 1 para el Regimiento de Defensa de Paterna. Estos 26 vehículos se suman a las siete unidades cedidas con anterioridad a la Unidad Militar de Emergencia (UME) para la realización de tareas de traslado de afectados por la Covid-19 en Madrid, León, Sevilla y los dos que han sido cedidos la semana pasada al Regimiento Príncipe número 3 de la BRILAT en Asturias. La «Operación Balmis» cuenta con más de 2.500 efectivos desplegados pertenecientes a los tres Ejércitos, UME y Guardia Real en 172 localidades de toda España para hacer frente al COVID-19. La operación, que comenzó el día 15 de marzo, está dirigida por el Jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD) y conducida desde el Mando de Operaciones.

Las actuaciones que se están ejecutando están relacionadas, principalmente, con la desinfección de infraestructuras críticas (puertos, aeropuertos y estaciones), instalaciones sanitarias y de dependencias de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como de servicios públicos esenciales además de apoyo en la instalación de hospitales de campaña. La misión de las Fuerzas Armadas en esta crisis sanitaria ha sido bautizada con el nombre de «Operación Balmis» como homenaje a la expedición humanitaria que lideró Francisco Javier Balmis entre 1803 y 1806, un médico militar que llevó la vacuna de la viruela a los territorios del imperio español en América y Filipinas.