«Antes sobrábamos y ahora vemos lo necesario que es que Asturias no dependa de lo que llega de fuera»

Elena G. Bandera
Elena G. Bandera REDACCION

ASTURIAS

Mercedes Cruzado, secretaria general de COAG
Mercedes Cruzado, secretaria general de COAG

Mercedes Cruzado, secretaria general de COAG-Asturias, reivindica que se reconozca al sector productor de alimentos como estratégico ante las crisis futuras que pudieran venir como la actual «de un día para otro»

04 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

«Esta situación nos tendría que servir de ejemplo para que todo el mundo se diera cuenta de lo estratégico que es tener un sector productor de alimentos que sea capaz de abastecer el mercado. De lo necesario que es que Asturias produzca sus alimentos y no tengamos que esperar a que lleguen de fuera». La secretaria general de COAG-Asturias, Mercedes Cruzado, reivindica que, en el actual contexto de crisis sanitaria sin precedentes en la historia moderna, la producción y el consumo locales son fundamentales.

«Hasta los tratados de libre comercio eran la panacea y todos los de aquí -dice, en referencia al sector primario de Asturias- sobrábamos. Estábamos estorbando y lo que se quería era acabar con todos nosotros. Éramos moneda de cambio para que otras empresas pudieran entrar en los países en los que se hacían esos tratados y todo llegaba baratísimo».

Y ahora, añade, cuando esta tremenda crisis sanitaria provocada por la pandemia de coronavirus se presentó de un día para otro, «vimos cómo se cerraron fronteras y cada uno miraba a ver si tenía comida, a ver si no había desabastecimiento y las estanterías estaban llenas». En las primeras semanas del confinamiento domiciliario decretado durante el estado de alarma hubo temor en algunos hogares a que la cadena agroalimentaria sufriera interrupciones y, prueba de ello, fueron las estanterías que se quedaron vacías en tiendas y supermercados.

«De un día para otro»

«Igual que se presentó esta crisis sanitaria pueden llegar otras de distinto tipo y también de un día para otro, y, ante ello, tener la capacidad de alimentar a la población de un territorio como Asturias es lo más estratégico que puede haber y en Europa tienen que verlo así», considera.

Menciona a la Unión Europea porque recuerda que estaba previsto que se recortaran fondos de la PAC, las ayudas europeas para ganaderos y agricultores, «porque eran necesarios para no sé qué cuantas cosas y, viendo lo que tenemos encima ahora mismo y lo que se puede avecinar, Europa no puede de ninguna manera renunciar a la soberanía alimentaria, a que los territorios tengan la capacidad de alimentar a su población».

Es más, considera que ahora precisamente es cuando la financiación de la PAC tiene que reforzarse y más teniendo en cuenta que «con los precios que estamos cobrando no somos capaces de cubrir costes». De hecho, el sector espera por esas ayudas para poder pagar a sus proveedores y los servicios veterinarios que se requieren en las ganaderías.

«Cuando se retrasan las ayudas la gente empieza a ponerse loca porque tiene todos los días encima a los proveedores porque quedaste en pagarles hace meses y no puedes hacerlo hasta que no nos lleguen las ayudas», explica. Independientemente del coronavirus, estos problemas ya estaban ahí sin resolver de manera eficiente, pero con la pandemia el sector primario se ha señalado como esencial. Como siempre que hubo otras crisis a lo largo de la historia no tan reciente y, gracias al sector primario que aporta alimentos, se salió adelante y se pudo prosperar.

Apoyo de los consumidores asturianos

«La salida que a todos nos gustaría es que se nos reconociera como sector estratégico. Que todos los consumidores apoyaran nuestras producciones y confiaran en ellas. Saben que es la mejor calidad, pueden ver cómo se producen porque lo tienen al lado de casa. Cómo se cría un ternero, cómo ordeña la leche, cómo están pastando las vacas fuera, algo que no pasa en ningún lado, y así tienen la capacidad de tener las mejores calidades, porque tenemos la mejor raza, el mejor clima, los prados, lo tenemos todo. Solo nos falta que la gente confíe y apueste por esto», insiste Cruzado.

Más cuando, como bien recuerda, «le vimos las orejas al lobo porque hubo gente que tuvo miedo que el mercado se quedara desabastecido. Para que nunca pase, los que estamos aquí produciendo alimentos y para que los que puedan incorporarse a partir de ahora puedan seguir haciéndolo, tenemos que contar con la ayuda de los consumidores». Comprar lo de Asturias, lo cercano, como se viene reclamando desde que comenzó esta crisis sanitaria y por supuesto antes de que el coronavirus lo trastocara todo por completo.

Cruzado también recuerda que, entre las muchas razones para apoyar la producción y el consumo de proximidad, hay una genera un círculo positivo para la economía local y el pequeño y mediano comercio: «Aparte de la calidad que tiene los alimentos de Asturias, al final va a volver a repercutir en ellos porque si a mí me compran los terneros y al de al lado le compran la leche, vamos a tener dinero para poder comprar algo que a lo mejor que están fabricando ellos, donde trabajen. Una pieza del tractor, una nevera, unas bombillas o lo que sea porque tengo dinero y sigo trabajando en Asturias y voy a gastar lo que gano en cosas que voy a comprar en Asturias y acaba llegando a todos y, entre todos, es una pescadilla que se muerde la cola pero en positivo».

No obstante, hoy por hoy, hay incertidumbre en el sector. Como en el resto. «Por desgracia también puede haber otro horizonte y, viendo cómo está todo, puede quedar mucha más gente en el paro, que haya poco dinero y que las personas lo tengan difícil para poder pagar unos céntimos más por unos productos de tanta calidad como los que tenemos en Asturias. Ese horizonte también puede estar ahí y la incertidumbre es enorme. Podemos salir reforzados o podemos ir a peor y no quiero ni pensar en ese escenario», dice Cruzado que no pasa por alto que, en Asturias, las explotaciones ganaderas tienen a muchas personas trabajando a su alrededor.

«Son muchos profesionales los que están viviendo de nosotros y, si no estamos, se quedan sin trabajo. Si nos caemos nosotros también se caen ellos y es mucho lo que nos jugamos porque en Asturias ya perdimos mil cosas», recuerda, enumerando la siderurgia, la minería o «las empresas que se asientan aquí con una subvención y mañana levantan el vuelo y se largan». Quienes forman parte del sector agrícola y ganadero, por contra, «no podemos marcharnos ni nos vamos a marchar porque lo tenemos todo aquí y vamos a seguir en Asturias».