¿Cuándo dejará Asturias de ser la Siberia del sur de Europa?

Juan M. Arribas / X. Fonseca

ASTURIAS

Un paraguas abandonado en un banco de un parque de Oviedo, en pleno temporal
Un paraguas abandonado en un banco de un parque de Oviedo, en pleno temporal J.L.Cereijido

El lunes llegará una nueva borrasca

12 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

A falta de diez días para que arranque oficialmente el verano, el tiempo ha cambiado de forma radical. El calor ha desaparecido de Asturias durante toda la semana hasta nuevo aviso. Hoy y mañana la configuración atmosférica es más propia del mes de marzo que de junio. Un sistema de bajas presiones procedente de Islandia se sitúa en Asturias y deja vientos fuertes de componente norte y lluvias intensas durante las próximas 36 horas. Su presión mínima central ha caído bruscamente y no se trata finalmente de una ciclogénesis explosiva. Para ello la presión mínima central debería caer al menos 20 milibares en 24 horas, algo que no ha ocurrido. 

Pero aunque no se trata de un ciclón explosivo es lo bastante profundo como para que la Agencia de Meteorología haya activado varios avisos amarillos por acumulaciones de agua. En Asturias, registramos las temperaturas más bajas de Europa, con máximas cercanas a los 16 grados que contrastan con los 32 de Kiev, los o los 26 de Berlín. .

El fin de semana habrá una circulación del aire del suroeste, que se traducirá en un ascenso de las temperaturas, tanto mínimas como máximas, pero sin calor. El valor más alto se espera en Oviedo y Mieres con temperaturas próximas a los 21 grados. En el resto de localidades rozarán los 20 grados. El sábado, domingo y en las primeras horas del lunes volverá el sol con intervalos, combinado con nubosidad. No se esperan precipitaciones, salvo en la zona occidental de Asturias.  

Pero la semana que viene asomará una nueva borrasca por el oeste. La presencia de este sistema de bajas presiones en el Atlántico provocará que las nubes bajas cubran de nuevo Asturias. Al final del lunes llegará un frente que dejará más precipitación. Y a partir del miércoles, los modelos meteorológicos muestran ya que el anticiclón de las Azores comienza a moverse, una buena noticia si se tiene en cuenta que las altas presiones son sinónimos de sol y calor en la comunidad. El problema es que como las borrascas andan cerca se va a formar un corredor de vientos del norte que si bien no dejará demasiada precipitación seguirá manteniendo a raya el termómetro, especialmente en lo referente a los registros más altos, que seguirán siendo muy discretos.

Si las previsiones se cumplen las temperaturas no se van a recuperar hasta finales de la semana que viene, casi coincidiendo con la llegada del verano. Esta situación no es solo exclusiva de Asturias, sino que se extiende a toda la Península. No se descarta que pueda nevar en las zonas más elevadas, como el Pirineo.  El calor ausente en el sur de Europa sigue concentrándose en el extremo norte, en el Círculo Polar Ártico, donde la situación sigue siendo extremadamente anómala, con cifras que superan los 30 grados. El sol y el calor regresarán cuando la atmósfera ponga todo en su sitio.