Las escuelas de idiomas de Asturias encaran su inicio de curso más complejo

Marcos Gutiérrez ASTURIAS

ASTURIAS

La Escuela Oficial de Idiomas de Gijón
La Escuela Oficial de Idiomas de Gijón EOI GIJÓN

Los centros habilitarán más espacios para la realización de las pruebas de certificación, que tendrán lugar el lunes, y reducirán las ratios y la duración de las clases

09 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El comienzo de curso se presenta complejo y difícil de gestionar para las Escuelas Oficiales de Idiomas (EOI) de la región, que se encuentran ya inmersas en la organización de las pruebas de certificación del próximo lunes. La vuelta a las aulas más complicada que se recuerda en estos centros estará definida por una reducción drástica de las ratios de alumnos por clase, medidas de distanciamiento social y fomento de los trámites telemáticos.

María Álvarez Paz, directora de la EOI de Oviedo, explica que las pruebas de certificación se llevarán a cabo «durante todo el mes. Primero las escritas y luego las orales». En este sentido, «los exámenes de certificación comenzarán el día 7, si no sucede nada».

Este año habrá «un par de convocatorias más masivas, con 300 personas un día y más de 600 otro». Además de señalar debidamente los espacios y sitios habilitados, «para respetar las distancias, vamos a hacer las pruebas en la escuela y otras sedes, como el IES Doctor Fleming y el Centro de Profesorado de Julián Cañedo. Nos va a ayudar la Policía y Protección Civil para ordenar el acceso y guiar a los aspirantes».

Pese a lo dicho, en un momento como el actual de convivencia con la COVID 19, el escenario «se presenta complicado» para unas pruebas con «2.000 aspirantes en total». «En la web tenemos una aplicación para que los alumnos comprueben dónde y cuándo les toca», destaca María Álvarez Paz.

Solo una convocatoria

Uno de los inconvenientes de la pandemia para los estudiantes de las escuelas de idiomas de la región tuvo que ver con el traslado de los exámenes de certificación de junio a septiembre, desapareciendo por tanto este año una de las dos convocatorias a las que los alumnos pueden presentarse. Esta circustancia provocó, en su momento, quejas entre el alumnado. De hecho, a finales de mayo, una plataforma de alumnos de la EOI de Avilés presentó ante la Consejería de Educación una queja por este motivo.

La directora de la Escuela Oficial de Idiomas de Oviedo cree que «es una pena para los aspirantes, pero se trata de motivos de fuerza mayor». En este sentido, reconoce que «es complicado de gestionar, pero se hace obedeciendo las instrucciones de la Administración». No obstante, recuerda que «por ley no es obligatorio ofertar más que una convocatoria ordinaria de certificación. En Asturias la extraordinaria de septiembre es una concesión de Educación». Asimismo, indica que «una de estas pruebas cuesta 30 euros y en otras comunidades autónomas, 180. Por eso, entre otras cosas, viene gente de fuera».

En lo que respecta a la vuelta a las clases, comenta que el protocolo se está diseñando para favorecer la distancia social y que la mayor parte de las gestiones puedan realizarse de manera telemática. «En el inicio del curso trataremos de distribuir los alumnos en cada aula de la manera más equilibrada y baja posible», explica.

Adelanta que otros años «generalmente las clases duraban unos 110 minutos. Ese tiempo se va a rebajar ahora a 90, y se complementará con atención online para que nos dé tiempo a realizar entradas y salidas, higienizar las aulas…». En las escuelas «se contemplan tres escenarios para el comienzo de las clases, también en caso de que vuelva a haber un confinamiento».

La directora indica que, en circunstancias normales, el centro tiene una ratio de «25 alumnos por aula, pero si bajan las matriculaciones vamos a intentar que la mayoría de los grupos estén en torno a los 15 ó 16». Añade, en este sentido, que «tradicionalmente hay mucho absentismo y es probable que, de forma natural, haya ratios manejables» cuando comience el curso el 5 de octubre. Para ese retorno a las aulas se le harán «pruebas PCR a todo el personal». «También estamos desarrollando aplicaciones que permitan a los alumnos solicitar cita previa para las gestiones, porque queremos evitar al máximo la posibilidad de contagio», concluye.

Complemento online

Por su parte, María Dolores Fernández Gavela, directora de la EOI de Gijón, explica que para las pruebas de certificación que empezarán el lunes, además de los espacios de la escuela, se emplearán «unas instalaciones del Fernández Vallín, especialmente para las pruebas del B2, que son las más numerosas». Además, se contará «con ayuda policial para la gestión de las entradas y las salidas de las pruebas».

Sobre la excepcionalidad acaecida este año, relativa a la supresión de una de las dos convocatorias habituales a los exámenes de certificación, reconoce que «hubo personas que intentaron que se les devolvieran las tasas, pero al mantenerse la convocatoria de septiembre en realidad se está cumpliendo la normativa». Así, «lo que hace la consejería es posponer la convocatoria de junio a septiembre».

«Personalmente creo que es necesaria esa convocatoria. Las de junio son fechas bastante estrictas y, a lo mejor, los aspirantes no pueden hacer todas las pruebas y para los que les queda pendiente pueden tener esa segunda posibilidad, también para aquellos que suspendan», subraya, si bien resalta que «este año no se pudo y está más que justificado».

De cara a la vuelta a las aulas de la EOI de Gijón comenta que «las clases pasan a ser de hora y media. Esos treinta minutos entre una clase y otra se dedicarán a ventilar y realizar salidas escalonadas». María Dolores Fernández Gavela pone de manifiesto que ese tiempo que se recorta de las clases los docentes lo dedicarán «a preparar materiales digitalizados para un posible confinamiento».

En esta línea, explica que los profesores piensan que la formación online da resultados, pero lo ven como «un plan ‘B’. Por ejemplo, el programa That’s English funciona muy bien para personas sin disponibilidad horaria y nosotros notamos que, durante el confinamiento, los alumnos seguían las clases online». Pese a lo dicho, la directora de la EOI de Gijón apunta que «muchos alumnos nos comentan que necesitan el contacto con el profesorado y con los alumnos». Y es que un centro como una escuela de idiomas es un lugar que se emplea para «aprender idiomas y, a la vez, socializar».