La movida politico jurídica que afecta al Consejo General del Poder Judicial tiene también su derivada asturiana. El CGPJ dio ayer el visto bueno a varios cargos relevantes pero se dejó en el tintero el nombramientos la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Asturias. Al puesto, que se encuentra vacante tras la designación de Jesús Chamorro como presidente del TSJA, optan José Ramón Chaves y David Ordóñez. El CGPJ lo ha retirado de su agenda y se ha justificado porque busca consensos «lo más amplios posibles», lo que da señal que la tormenta arrecia. El CGPJ ha intentado mostrar su unidad frente a las críticas y presiones para que no designara nuevos cargos mientras no se renueve la institución, en funciones desde hace casi dos años. La mayoría del sector progresista ha decidido sumarse al consenso y sólo dos de los veintiún miembros del órgano de gobierno de los jueces han votado en blanco. Uno de ellos es el ovetense Álvaro Cuesta, exdiputado socialista y exconcejal del Ayuntamiento de Oviedo y gran antagonista del exalcalde Gabino de Lorenzo. Cuesta solicitó retirar del orden del día los nombramientos previstos y su petición fue respaldada por Concepción Sáez y Pilar Sepúlveda, también del sector progresista, pero el pleno le ha dado la espalda y ha seguido adelante. La movida amenaza con nuevos capítulos.