El comercio en shock: pide a Barbón que rectifique porque el cierre «es la puntilla»

Carmen Liedo

ASTURIAS

Comercio minorista en Oviedo
Comercio minorista en Oviedo

El colectivo que engloba al sector en la región considera que se podrían haber tomado otras medidas restrictivas antes de parar la actividad y poner en jaque la campaña de Navidad

04 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando a Magdalena Huelga, secretaria de la Federación Asturiana de Comercio, se le pregunta por cómo afronta el sector el cierre de la actividad no esencial que impondrá a partir de esta noche el Gobierno del Principado como medida para tratar de frenar la incidencia del covid-19, su voz delata el estado de shock en el que se encuentra el comercio. Tras unos segundos, trata de verbalizar el sentir del sector: «es tal el nerviosismo… Todo el mundo está con incertidumbre, miedo, descontento y enfado», comenta la misma, que reconoce la «dificultad de ordenar ideas» por lo «dramático y horroroso de la situación». De una situación y unas medidas que considera «de una desproporción abismal», por lo que antes de reclamar una batería de ayudas centra todos sus esfuerzos en pedir al presidente regional, Adrián Barbón, «que rectifique» teniendo en cuenta que el cierre anunciado para los próximos 15 días «es la puntilla» para muchos negocios que no van a poder resistir «porque ya no hay donde agarrarse».

«No se pueden tomar medidas de este calado sin sentarse a escucharnos», reprocha Magdalena Huelga, quien a través de la FADE a pedido «una reunión monográfica» con el Principado para tener «la necesaria interlocución» ante unas decisiones que, precisa, «pueden resultar una catástrofe en 15 días y una debacle si se prolongan un mes. El sector se va a la ruina», advierte la representante del comercio de Asturias.

En su opinión, del confinamiento y de las fases de desescalada se ha tenido que aprender algo y, por lo tanto, considera que «hay medidas restrictivas que se pueden tomar» antes de imponer «un cerrojazo en seco» para la actividad comercial, un cierre que ha generado «un desconcierto absoluto» y que va a resultar «letal» para muchos establecimientos que ya han hecho todo el esfuerzo financiero posible. «No se pueden tomar medidas y después ver cómo parcheamos», señala Huelga, que duda de que las ayudas a estas alturas les vayan a servir. «Hay una desconfianza generalizada a que las ayudas directas o indirectas vayan a ser efectivas», añade la secretaria de la Federación Asturiana de Comercio, que insiste en que el Gobierno del Principado debe rectificar.

En caso de que no haya marcha atrás para el cierre de la actividad no esencial, Magdalena Huelga dice que «una duración menor minimiza los daños», pero no pierde de vista que perderán eficacia las campañas puestas en marcha por distintos ayuntamientos para impulsar el comercio de proximidad. Y este cierre les llega cuando la campaña de Navidad ya está en marcha, una campaña que no tiene la certeza de que vayan a poder salvar porque «es difícil de recuperar todo lo que se va a perder».

En este sentido es clara: «cada día que esté la mercancía parada, es dinero que se pierde, así que si el sector cierra, pérdidas va a haber».

A esto suma que hay propietarios de negocios a los que ahora les vencen las cadencias de los créditos, además de tener que pagar los impuestos, los aplazamientos de la seguridad social, la campaña de IBIs, etc. Así, con el cierre anunciado ahora cree que se da «la tormenta perfecta» para que muchos no aguanten la situación. «Ya es difícil encontrar el colchón para aguantar, ya no hay donde agarrarse porque la gente ha buscado el límite», apostilla Magdalena Huelga, que añade que, pese a todo, «la resistencia al cierre del comercio es altísima, aunque se vence por agotamiento de recursos».

La venta online es una de las opciones que tiene el comercio ante el cierre de las tiendas físicas, pero la secretaria de la Federación Asturiana de Comercio asegura que por este medio siempre baja el consumo porque «no es nuestra naturaleza». «El fuerte está en la calle, si no, no tendría sentido tener un local abierto y pagar una renta». Además, entiende que en esos canales «se desvía el consumo a grandes plataformas, porque perdemos competencias».

Así, Magdalena Huelga concluye que para que el sector perviva necesita resistencia financiera pero también contar con el apoyo del consumidor, al que «más concienciado» con la situación y con cómo le puede afectar el cierre de comercios del entorno de su domicilio: «los cierres no afectan sólo al comerciante. También al valor de la propiedad de cada uno de nosotros y a la seguridad de la zona y, afortunadamente, cada vez cala más esa idea», señala.

No obstante, la secretaria de la Federación Asturiana de Comercio insiste en que el Principado debe rectificar del cierre del comercio y mantener una reunión monográfica con el sector porque «en 15 días pueden acabar con muchos negocios»