No a la educación semipresencial: el agravio que vulnera los derechos de miles de alumnos llega a Change.org

Carmen Liedo

ASTURIAS

Alumnos del IES Jovellanos de Gijón a su llegada a las aulas
Alumnos del IES Jovellanos de Gijón a su llegada a las aulas J.L. Cereijido

«En Asturias nos encontramos son alumnos recibiendo clase todos los días y otros solamente un día sí y otro no. Vulnera el derecho a la educación en igualdad de condiciones»

10 nov 2020 . Actualizado a las 20:20 h.

Los padres de hijos en tercero y cuarto de la ESO y primero de Bachillerato que este año están recibiendo clases semipresenciales no cesan en su lucha por lograr una educación presencial en Asturias «sin discriminación» para la totalidad del alumnado que cursa la etapa de secundaria. La última iniciativa, puesta en marcha por el colectivo Educación Presencial, ha sido una campaña en la plataforma Change.org reclamando al Gobierno del Principado una enseñanza en igualdad de condiciones para todos los estudiantes que están en esos cursos y que debido a la pandemia de la COVID-19 y a la obligación de guardar una distancia de 1,5 metros entre alumnos no pueden acudir a clase todos los días por superar su grupo la ratio fijada por la Consejería de Educación. La campaña con el título «Asturias por una educación presencial, segura y de calidad sin discriminación» lleva activa apenas 48 horas y va camino del medio millar de firmas recogidas.

En el texto en el que se explican los motivos por los que se inicia la recogida de apoyos se expone el primer lugar el agravio que ya ha supuesto para el alumnado que el curso escolar 2019-2020 se suspendiera con tres meses de antelación «sin posibilidad de avanzar materias, es decir sin terminar». En tanto que entre un curso y otro hubo periodo de seis meses, el promotor de la iniciativa entiende que hubo «tiempo suficiente para actuar de forma planificada para la vuelta al cole» y reprocha que el Gobierno regional haya actuado «de una manera improvisada» decidiendo establecer la semipresencialidad para los alumnos de tercero y cuarto de la ESO y primero de Bachillerato como medida preventiva en aquellos institutos y colegios donde no se pueda garantizar una distancia mínima de 1,5 metros entre alumno, mientras las clases son cien por cien presenciales en aquellos institutos donde se pueda establecer esa distancia.

«En Asturias nos encontramos con alumnos recibiendo clases todos los días y otros solamente un día sí y otro no, es decir, la mitad de los días lectivos. Mientras que una parte de los alumnos asisten todos los días a clase, otros de 3º, 4º de la ESO y 1º de Bachillerato, se enfrentan a este curso con la mitad de días lectivos y la otra mitad de días solos y desatendidos en casa», se explica en el texto en el que se solicita el apoyo para demandar al Principado una educación presencial para todo el alumnado de secundaria.

Según se expone en dicho escrito, la situación actual «vulnera el derecho a la educación en igualdad de condiciones» y se alude a que esta modalidad está favoreciendo también «la precarización de muchos (alumnos) porque no todas las familias tienen los mismos medios para ayudar a sus hijos en la formación virtual».

«No abordar con responsabilidad esta situación también tiene graves consecuencias para la salud y el bienestar de las familias, por el estrés al que se les están sometiendo, dificultad para planificar el día a día y esperar que plan hay para esos días a los que los niños les ha tocado quedarse en casa», se indica en la iniciativa.

Crítica a los políticos regionales

La propuesta para reclamar la educación presencial para todos los alumnos de secundaria supone también una crítica para el Gobierno del Principado ya se señala que «esta situación demuestra también claramente que la educación no era ni es una prioridad para los políticos de nuestra comunidad», a los que reprochan que no estén buscando alternativas dirigidas a lograr el cien por cien de la presencialidad.  Así, se añade en el texto que «es lamentable que no se esté haciendo nada (inversiones para buscar espacios suficientes en los institutos y colegios o lugares cercanos, contratación de más profesores...), para paliar este problema y garantizar la presencialidad de todos los alumnos, sin discriminación». 

Para terminar se lanza una pregunta que se contesta en la misma iniciativa: «¿Acaso no es responsabilidad del Gobierno del Principado de Asturias poner todos los medios necesarios para que esto no ocurra? Es obligación del Gobierno del Principado de Asturias garantizar una educación presencial al 100%, segura y sin discriminación. Todo ello supondría una sociedad más preparada, más consciente, libre, más justa, en equilibrio democrático y con futuro», concluye la propuesta.