Sorpresa en Cangas del Narcea: nacen tres crías de lince boreal tras un siglo de extinción

Nel Oliveira REDACCIÓN

ASTURIAS

Dos ejemplares jóvenes de lince boreal, que una vez recorrió los bosques asturianos

Para costear el caro proceso de alimentación han lanzado una campaña de crowdfunding en la que ya van recaudados 462 euros

10 may 2021 . Actualizado a las 19:55 h.

Tras más de un siglo en extinción, Asturias recupera al lince boreal con el nacimiento de tres crías en Cangas del Narcea, hace una semana. Según ha podido conocer Informativos Telecinco, el responsable directo se llamada Luis Freijales, un autobusero y apasionado de los linces europeos que decidió probar suerte trayendo al Principado una pareja desde Alemania.

El resultado ha sido todo un éxito. Zar y Shasha han sido los papás de estos tres cachorros, dos de ellos apartados nada más nacer por el ataque del macho. En cuanto al tercero, se dejó con la madre. Ahora el objetivo es cuidar de ellos para en un futuro reintroducirlos en libertad en los montes de Asturias, como es habitual con otras especies de animales.

Crowdfunding para costear la alimentación

Sin embargo, no todo son celebraciones. Ahora estas crías, que apenas pueden mantenerse todavía en pie, necesitan alimentarse. Se trata de un procedimiento con un alto coste, ya que «tenemos que utilizar leche en polvo para gatitos, y comen mucha cantidad», aseguran desde la asociación asturiana de Defensa de Especies Autóctonas.

Dos de las crías de lince nacidas en Cangas del Narcea linceborealasturias

Para financiar estos cuidados han lanzado una campaña de crowdfunding con la que ya han recaudado 462 euros gracias a, de momento, doce donaciones. «Es algo con lo que no habíamos contado ya que esperábamos que su madre pudiera ocuparse de ellos. Nos sería de gran ayuda cualquier pequeña donación que podáis proporcionarnos», agradecen desde la asociación.

Desde lince boreal Asturias han querido destacar las ventajas de poder reintroducir a esta especie en la región. «Una de las principales es que el ecosistema se enriquezca muchísimo, ya que estos individuos formaban parte del mismo hace algo más de un siglo». Además apuntan que «resultaría un competidor para el lobo», lo que ayudaría a equilibrar la sobrepoblación de esta especie. «Por último, hemos de aclarar que estos individuos no atacan a las personas», afirman.