La consejera Carmen Suárez ha destacado también la importancia de que se declare dual toda la enseñanza de FP porque «la presencia de los alumnos en las empresas es lo más importante»
16 jun 2021 . Actualizado a las 13:08 h.La consejera de Educación, Carmen Suárez, ha confiado en que en el inicio del próximo curso escolar haya «noticias positivas» y ya exista un porcentaje de alumnos que estén vacunados contra el coronavirus. Así lo ha dicho este miércoles durante una visita a Morcín, donde la consejera ha recordado, no obstante, que todo ello dependerá de la planificación de las autoridades sanitarias.
Suárez ha explicado que las nuevas medidas de seguridad que se pondrán en marcha el curso 2021-2022 garantizarán la total presencialidad de los jóvenes en las aulas con la distancia interpersonal necesaria.
La titular de Educación también ha participado este miércoles en la I Feria de Formación Profesional Dual, a la que ha asistido el consejero de Industria, Empleo y Promoción Económica, Enrique Fernández. Allí, la consejera ha valorado que la nueva ley de Formación Profesional (FP) elaborada por el Gobierno de España es «ambiciosa» a la vez que ha destacado la importancia de que se declare dual toda esta enseñanza.
Suárez ha subrayado la necesidad de intensificar la colaboración entre el sector productivo y el sistema educativo, puesto que «la presencia de los alumnos en las empresas es lo más importante».
Por su parte, el consejero de Industria ha indicado que la FP en su conjunto «les una potente palanca para contribuir a la transformación del tejido productivo y la mejora de la competitividad empresarial, y una herramienta imprescindible para combatir la realidad del desempleo juvenil, cuyas cifras no son asumibles».
En su opinión, este objetivo es una de las prioridades del Ejecutivo asturiano «y así viene recogido en la Estrategia Industrial de Asturias 2020, en la que se apuesta claramente por el desarrollo de la FP Dual con contrato o la modificación de los ciclos formativos para adaptarse a los nuevos perfiles profesionales».
A juicio de Fernández, las ventajas de la combinación de trabajo y estudio son «innegables», ya que permite a los estudiantes «adquirir conocimientos, habilidades y experiencias relevantes para la ocupación en un entorno profesional, con equipos y métodos actualizados y, al mismo tiempo, las empresas pueden observar el comportamiento y el progreso de los alumnos durante un periodo más prolongado de tiempo, lo que puede fomentar la contratación de futuros trabajadores cualificados», según informa Efe.