Leo Harlem: «Asturias es un espacio único y espectacular para rodar»

Marcos Gutiérrez GIJÓN

ASTURIAS

Leo Harlem
Leo Harlem Carlos Diaz | EFE

El cómico leonés coprotagoniza «¡A todo tren! Destino Asturias», la última película de Santiago Segura, rodada en el Principado. En su opinión, la cinta es un ejemplo perfecto del «valor terapéutico de la comedia»

11 jul 2021 . Actualizado a las 10:12 h.

En los últimos años Asturias ha ido ganando enteros como escenario para el rodaje de películas y series de televisión. Uno de los últimos ejemplos es el de ¡A todo tren! Destino Asturias. La cinta está dirigida y protagonizada por Santiago Segura, con Leo Harlem (León, 1962) interpretando a su suegro y compañero de fatigas en su cómica búsqueda de unos niños que viajan solos y creando el caos en un vagón rumbo al Principado. Harlem es uno de los cómicos y monologuistas más apreciados por el gran público en nuestro país. Podría decirse que es lo que los anglosajones llaman un late bloomer, pues su vocación no floreció hasta pasados los cuarenta, cuando unos amigos le animaron a enviar un vídeo que, a la postre, le sirvió para alcanzar en 2002 la final del Tercer Certamen de Monólogos del Club de la Comedia. Desde entonces no ha parado de participar en proyectos de éxito en televisión, radio, cine, teatro y publicidad. Cree que las cifras en taquilla de ¡A todo tren! Destino Asturias «se van a igualar, por lo menos» con las cosechadas por la última entrega de Padre no hay más que uno,  su última colaboración con Segura.

-¿Qué retos planteó rodar ¡A todo tren! Destino Asturias en plena pandemia?

-El primero que había que someterse a todos los controles sanitarios constantemente, lo cual era un factor importante de tiempo. Además nos cogió el temporal ‘Filomena’ en Madrid, con una nevada, por lo que tuvimos que aplazar el rodaje una semana, si bien luego con los controles en el área todo fue bastante seguro. El problema es que tuvimos que acortar los plazos al máximo para exponernos lo menos posible. En seis semanas ventilamos la película. Fue un trabajo muy duro y complicado en cuanto a la organización.

-En los últimos años muchas producciones de cine o TV se han animado a venir a Asturias ¿Qué ofrece nuestra región como escenario para una película?

-Pues que es muy variada. Tienes playa, montaña, prados, interiores… aunque el tiempo cambia de una hora para otra, lo que ofrece una cierta complejidad para los directores de fotografía. Pero es un entorno muy bonito y cualquier cosa que salga de fondo en las imágenes es espectacular. Además, la gente nos trató de maravilla. Y luego que andábamos un poco pillados de tiempo y nos cogió la pandemia, pero Asturias es un sitio ideal para tomar una sidrina, darte una vuelta o ir a ver algo. Hay mucha variedad. Es un espacio único y espectacular para rodar.

-¿Es tan complejo, como decía Hitchcock, trabajar con niños?

-Bueno, es que los niños de la época de Hitchcock no tienen que ver con los de ahora. Hoy en día están todos con el móvil y se comportan delante de las cámaras con una naturalidad tremenda y no se asustan de nada. Es otra infancia. En nuestro caso no ha habido ningún problema y los chavales se han portado de maravilla, ¿no ves que están todo el día grabándose sus tik toks y sus cosas? No se ponen nerviosos ni se alteran, porque lo dominan. En el terreno audiovisual están a un nivel que nosotros no llegamos a alcanzar hasta que tuvimos treinta años.

-Santiago Segura y usted son casi una pareja de hecho cinematográfica ¿Qué tal ha sido este reencuentro?

-La verdad es que todas las colaboraciones que he tenido con Santiago siempre han ido muy bien, tanto a nivel de taquilla como en lo personal. Con él se trabaja muy cómodo, disfrutamos y lo pasamos bien, por eso cuando me llama ahí estoy. En los rodajes al final hay mucho tiempo de ocio, porque hay que esperar mucho. Al trabajar con una persona como Santiago también logras que en esos momentos libres puedas estar más entretenido. Con él estoy encantado y aquí me tiene para lo que necesite.

-¿En un momento como el actual cree que una comedia como esta es más necesaria que nunca?

-La comedia siempre es algo que tienes ahí y que te alivia. En momentos de especial tensión como este que estamos pasando entra mucho mejor, pero es un género que siempre viene bien. Ahora mismo, por supuesto, estamos todos con la cabeza como un bombo y de malas noticias hasta las narices. Pues irte al cine con la familia y los amigos ya te supone un plan distinto, que te limpia un poco la cabeza. Ese es el valor terapéutico de la comedia. Hay que reírse.

-Usted, David Broncano, Ignatius Farray, Yolanda Ramos, Berto Romero, Valeria Ros, Goyo Jiménez, Pantomima full… muchos cómicos españoles, de estilos y generaciones muy diversas, están triunfando en la actualidad en teatro, cine, televisión, radio e Internet ¿Estamos viviendo una edad dorada de la comedia española?

-Lo que sucede es que ahora hay muchos más medios de comunicación. Siempre ha habido comedia, lo que pasa es que hoy las plataformas de comunicación son más variadas. Hay más soportes, capacidad y el mundo digital ha ayudado en ese sentido, pero si recuerdas antes estaban haciendo películas Pajares y Esteso, que eran famosos por sus espectáculos de humor, Cassen, Tony Leblanc… muchas de esas personas hacían cine porque eran humoristas acostumbrados a realizar muchos tipos diferentes de espectáculos. Hasta Tip y Coll hicieron películas. Ahora lo que sucede es que tenemos televisión, YouTube, Twich, radio… y entonces hay más posibilidades de que el público te conozca. Antiguamente solo estaban la tele, fundamentalmente, y la radio. Estamos en un momento de gran comercialización y difusión, pero talento y gente muy buena siempre ha habido. Lo que sucede es que ahora hay más opciones de crear cosas y que tengan repercusión. Antes, aunque tuvieras ideas muy buenas, si vivías en un pueblecito de provincias no te conocía ni el Tato. Hoy hay cómicos que los conoce todo el mundo que están trabajando y crean contenidos con un móvil, prácticamente. Estamos en un momento de gran calidad, como siempre ha habido, pero más posibilidades de visualización.

-El estreno de la segunda parte de Padre no hay más que uno el año pasado fue una apuesta valiente y una verdadera tabla de salvación para la industria y los cines en España ¿Cree que se superará este éxito con ¡A todo tren! Destino Asturias?

-Yo lo que creo es que la gente se ha fidelizado a este tipo de películas. El que ha visto las otras que mencionabas sacará una entrada para ¡A todo tren! Destino Asturias, seguro. Es como la canción del verano de Georgie Dann. La gente ya parece que la está esperando y yo creo que las cifras se van a igualar, por lo menos, porque las condiciones son mejores, los cines están cuidadísimos y todo está a favor de obra. Si eso, además, sirve de soporte para que nuevas películas vuelvan a arrancar y los cines cojan de nuevo el ritmo, fenomenal. De hecho, nosotros estrenamos Superagente Makey, fue la primera película que lo hizo en plena pandemia y, además, funcionó muy bien.