El imponente palacio que Asturias perdió en Cuba

D. ROIG

ASTURIAS

Una postal del Centro Asturiano de la Habana, erigido por emigrantes y nacionalizado por Fidel Castro tras la revolución
Una postal del Centro Asturiano de la Habana, erigido por emigrantes y nacionalizado por Fidel Castro tras la revolución

Se cumplen este mes 135 años de la fundación del Centro Asturiano de la Habana, cuya monumental sede fue nacionalizada por Fidel Castro

11 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Este año se cumplen 135 de la fundación del Centro Asturiano de la Habana, una institución que daba fe de la fuerza de los emigrantes y que se plasmó en un imponente edificio unos años más tarde. Tres cuartos de siglo después, durante la revolución, Fidel Castro lo nacionalizó y actualmente es una de las sedes del Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba.

Volviendo al origen, a mediados del siglo XIX, la emigración asturiana a la isla había florecido. Una parte de la poderosa clase indiana regresó a Asturias y se asentó como una naciente burguesía industrial. Proliferaron las casas suntuosas con palmeras en la puerta, reflejo de la riqueza al otro lado del Atlántico.

Pero muchos se quedaron. Tenían grandes y pequeños negocios: tabaco, telas, almacenes… el comercio fue su fuerte. Se agrupan en varios colectivos dispersos, pero quieren algo más. Al final, la Sociedad Coral Asturiana, la Sociedad de Festejos La Covadonga y el semanario El Heraldo de Asturias fueron los impulsores.

Según cuenta en un trabajo Martha Elizabeth Laguna (Universidad de Salamanca), todo comenzó en el terruño: «Una tormenta de nieve y granizo, seguida de una epidemia de tifus que provocó numerosas muertes en la zona montañosa de Asturias a finales de 1885». Los asturianos de Cuba, adscritos hasta entonces al Casino Español de La Habana, pidieron ayuda para sus compatriotas y les fue denegada.

Es les indignó, de modo que se produjo la rebelión: «en una tumultuosa reunión», dice Laguna, una parte de ellos decide escindirse. Otra epidemia de cólera y desastres meteorológicos provoca una nueva escisión en la Sociedad Asturiana de Beneficencia, que dará origen más tarde a la fundación del Centro Asturiano de La Habana.

El salón de baile y la impresionante escalinata del Centro Asturiano de la Habana, levantado a principios del siglo XX y actualmente Museo de Bellas Artes
El salón de baile y la impresionante escalinata del Centro Asturiano de la Habana, levantado a principios del siglo XX y actualmente Museo de Bellas Artes

Antonio González Prado preside la comisión gestora en julio de 1886, con la idea de fomentar los lazos entre Asturias y los emigrados. Nace el centro asturiano con la adquisición de un palacete en 1895 en el barrio del Cerro de La Habana para instalar una clínica de salud que se llamó Covadonga (actualmente Hospital Salvador Allende).

Comenzó con apenas medio centenar de afiliados, explica la investigadora, pero «el número de socios se elevó a 2.915 en 1887, creciendo hasta 4.391 entre 1890 y 1891, mientras que dos años más tarde la cifra estaba muy próxima a los 7.500».  Hubo un notable aumento de asociados en fecha posterior a 1898, tras la independencia de Cuba de la metrópoli española. «Cuatro décadas después, en 1927, ya eran unos 60.000 integrantes y contaban con delegaciones en diferentes localidades de la isla, lo que demuestra la importancia del desplazamiento de asturianos hacia la mayor de las Antillas durante ese período».

Un palacio para los indianos

El poderío de la colonia y su crecimiento imponen la necesidad de una nueva sede. Deciden comprar el céntrico Casino Español de La Habana, cuyos inquilinos se resisten a abandonar. Finalmente es ocupado por los asturianos, que lo reforman y construyen a sus espaldas del teatro Campoamor sobre lo que fuera el teatro Albisu.

Pero un incendio destruye la sede y el teatro, el 24 de octubre de 1918. Y como toda gran crisis es una oportunidad, deciden construir uno nuevo y, esta vez, a lo grande. Convocan concurso al que se presentaron seis propuestas.

Finalmente resultó ganador el proyecto del arquitecto Manuel del Busto Delgado, cubano de origen asturiano, junto a José Gómez Salas. El diseño, dicen, es parecido al Palacio de las Comunicaciones de Madrid. Fue inaugurado el 20 de noviembre de 1927.

Aspecto actual del que fuera Centro Asturiano de La Habana, ocupado ahora por el Museo de Bellas Artes cubano
Aspecto actual del que fuera Centro Asturiano de La Habana, ocupado ahora por el Museo de Bellas Artes cubano

«Resultan significativas en la edificación: su majestuosa fachada, con su portal que la circunda por las cuatro esquinas; su gran escalinata, enchapada con mármoles de carrara, y su gran vitral de cristal emplomado, de 150 metros cuadrados, con escenas que muestran el descubrimiento de América por Cristóbal Colón», dice un arquitecto. A todo lujo, vaya.

El Centro Asturiano de La Habana se mantuvo funcionando allí hasta principios de la década de los 60 del siglo anterior. Cuando Fidel Castro toma La Habana, ocupa el inmueble y eso marca el declive del poder de la comunidad asturiana, que aún así lucha por mantenerse unida en otro local. Otros muchos emigrarían.

El Estado cubano lo dedicó a varios usos hasta que, en 1996, aprueba reformar algo el interior con el fin de convertirlo en el Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes. Y así sigue.