Nuevo proyecto para la mina de oro de Salave: 100 millones de inversión y 200 empleos directos

L.F. REDACCIÓN

ASTURIAS

Lagos de Salave
Lagos de Salave

La explotación se prolongaría durante 16 años y la deposición en el mar sería exclusivamente de agua limpia a través de un emisario submarino a 800 metros de la costa y 17 metros de profundidad

28 jul 2021 . Actualizado a las 13:06 h.

La compañía española Exploraciones Mineras del Cantábrico (EMC), tras haber analizado el Documento de Alcance remitido por la administración ambiental del Principado de Asturias, ha presentado el Proyecto de Explotación y Restauración de Salave junto a su Evaluación de Impacto Ambiental para su valoración y eventual autorización por la administración. La empresa plantea una inversión inicial de 100 millones en Tapia de Casariego y el suroccidente de Asturias y la creación de 200 empleos directos y 1.000 indirectos. Los proyectos anteriores causaron una fuerte división en la zona entre partidarios y detractores de la mina.

EMC contempla un proyecto nuevo y singular de minería subterránea en el que, según defiende, prima el «respeto medioambiental y la eliminación de los impactos, especialmente el visual». La nueva propuesta plantea una operación concebida con la tecnología «más moderna, contrastada y un fuerte compromiso con el entorno, que garantice la sostenibilidad medioambiental, de acuerdo con los propios compromisos de la compañía y con la exigente legislación regional, española y europea», asegura la empresa. 

El proyecto

La singularidad de la propuesta se desarrolla bajo «el compromiso de alcanzar el nivel de riesgo cero para el medioambiente a largo plazo», explican desde EMC. El proyecto, que incorpora tecnologías «modernas y contrastadas internacionalmente», propone «la separación de un concentrado de sulfuros de la mina de Salave como producto final. De este modo se excluye y elimina la necesidad de utilizar productos cianurados en el proceso, como ocurre habitualmente en las minas de oro del mundo». Desde la compañía sostiene que la extracción subterránea y su relleno total minimiza los residuos mineros y la superficie necesaria para gestionarlos y aseguran que la actividad regular se desarrollará ajena al entorno al estar las infraestructuras exteriores completamente cerradas dentro de edificios industriales. 

Respecto a otro de los aspectos más polémicos de este tipo de explotaciones, la empresa defiende que su proyecto «no generará ningún vertido a cauce terrestre y propone medidas para una protección máxima de las aguas subterráneas, que incluyen la deposición en el mar exclusivamente de agua limpia a través de un emisario submarino a 800 metros de la costa y 17 metros de profundidad, funcionando de manera similar a los emisarios ya existente en la zona, cumpliendo con la normativa requerida por la legislación autonómica, nacional y europea y sin afección al medio marino, la costa y playas de la zona». Por otro lado, el plan de la empresa contempla una recuperación de los usos actuales del suelo al final de la vida útil de la mina. Al término del proyecto, «se eliminan todas las edificaciones y construcciones en superficie, reintegrando la morfología de la zona a su apariencia actual y rellenando los huecos generados en el interior de la explotación en su totalidad, asegurando una recuperación completa e integral», afirma EMC

200 empleos directos y 1.000 indirectos

El Proyecto de Salave, situado en el municipio asturiano de Tapia de Casariego, se desarrolla sobre un yacimiento aurífero de «un tamaño y potencial económico significativos», explica la empresa, que defiende que «es viable desarrollar la operación minera con todas las garantías medioambientales, eliminando el impacto visual e impulsando el desarrollo de la comarca más allá de los 16 años de vida estimada del proyecto». De acuerdo con este análisis, la puesta en marcha y explotación del yacimiento supondrá la creación de entre 150 y 200 puestos de trabajo directos y más de 1.000 indirectos, y una inversión inicial de más de 100 millones de euros en la comarca de Tapia y en el occidente asturiano.