Barbón arranca ya la reforma del Estatuto y la oficialidad del asturiano

La Voz

ASTURIAS

En su mensaje institucional del Día de Asturias el presidente llama a la «esperanza» para la modernización de la comunidad

08 sep 2021 . Actualizado a las 13:27 h.

El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, ha querido transmitir «esperanza» para doblegar la crisis sanitaria del coronavirus y afrontar la modernización de la comunidad autónoma en su discurso institucional con motivo del Día de Asturias. En su mensaje institucional el presidente ha indicado que comenzá en días las primeras negociaciones para afrontar la reforma del Estatuto y negociar un acuerdo con el consenso parlamentario necesario para aprobar la oficialidad de la lengua asturiana.

El jefe del Ejecutivo autonómico, que ha tenido palabras en recuerdo de los fallecidos, enfermos y afectados por la pandemia, así como a quienes están lejos y también a las personas afganas refugiadas en Asturias, ha realizado su intervención desde la Casa Natal de Jovellanos, en Gijón, al cumplirse el cincuenta aniversario de la inauguración del museo, destacando su «ejemplo permanente de liderazgo, nobles ideales y pasión» por Asturias.

Barbón ha señalado que «gracias a la alta tasa de vacunación», de las más destacadas de Europa, se ha conseguido «reducir los daños de la enfermedad». «Aunque no debamos confiarnos ni, mucho menos, darnos por satisfechos, nunca como ahora hemos estado tan cerca de doblegar la crisis sanitaria», ha apuntado, mostrando confianza en la calidad de la enseñanza en el nuevo curso escolar que comienza esta semana.

No obstante, considera necesario aguantar el esfuerzo y respetar las normas «para reducir el riesgo de rebrotes», apelando a la colaboración ciudadana, especialmente de la juventud.

Al respecto, ha incidido en que «cada paso» que se camina para paliar las consecuencias de la pandemia es un trecho que se avanza «hacia la supresión de las limitaciones». «Hemos defendido desde el primer momento que salud y economía van juntas y la campaña turística de este verano ha vuelto a probarlo: la normalidad será la mejor base para impulsar la reanimación que con tanta fuerza se está haciendo notar desde hace unos meses en la creación de empleo, la reducción del paro y los indicadores económicos», remarca.

Razones para la esperanza

Adrián Barbón reconoce que «la tarea pendiente es ingente». «Encaramos gravísimos problemas, como el desempleo juvenil, y desafíos enormes, como el reto demográfico. Hay empresas con dificultades, miles de personas sin empleo, otras que, como recordé al inicio, se han tenido que ir de Asturias para encontrar un puesto de trabajo y hoy no pueden acompañarnos en esta celebración. Cualquier complacencia sobra, resultaría inaceptable. Sin duda, queda muchísimo por hacer, pero también es verdad que llegamos a este 8 de septiembre cargados de razones para la esperanza».

Según el presidente, entre los motivos para alumbrar esperanzas están los buenos datos sanitarios, el regreso completo a las aulas, desde las de la universidad hasta la más pequeña escuela rural, y la reactivación de la economía. «Son hitos que anticipan una nueva etapa», asegura, añadiendo que la modernización de la industria de la mano de la transición ecológica y digital «también alimenta la esperanza».

En ese sentido, admite que «sigue habiendo inquietudes y serios problemas», pero también se está constatando «la capacidad de reacción empresarial para superar este inmenso reto de adaptación tecnológica, con un despliegue de proyectos de inversión impensable hace unos años, como el presentado para la reducción de emisiones de Arcelor, un parteaguas en la historia de nuestra siderurgia».

«Hemos comprendido que, junto con los desafíos, estamos ante una gran oportunidad. Asturias está situándose a la vanguardia para liderar la nueva revolución industrial, sin quedarse rezagada, empeñada en mirar hacia atrás o en renegar de un futuro imparable», dice.

El presidente, que intervino en castellano, asturiano y gallego-asturiano, hizo una defensa de la unidad y el entendimiento político y social. Por ello, apostó por un nuevo pacto social que tenga continuidad en un acuerdo presupuestario para 2022, destacando entre sus objetivos la creación de empleo.

Además, señaló que se precisa que el Gobierno central asegure el cumplimiento del calendario de ejecución de las comunicaciones de Asturias e incorpore mejoras que ahorren situaciones discriminatorias en el uso de las infraestructuras.

Los fondos europeos, según Barbón, están también en la lista de deberes inmediatos para los que, sostiene, se requiere «de cooperación, de inteligencia y de la implicación a fondo de la iniciativa privada». «Tenemos la obligación colectiva de acertar», apuntilla.

Y es que para el presidente, la modernización de Asturias está en marcha y no se puede parar. En ese sentido, remarca su compromiso con la reforma de la Administración para hacerla «más rápida y efectiva», así como la apuesta de su gobierno por la ciencia y la investigación.

La reforma del Estatuto

Igualmente, Adrián Barbón ha confirmado que este mismo año se va a abordar la reforma del Estatuto de Autonomía, que en diciembre hace 40 años. Así, argumenta que debe adaptarse a la realidad de Asturias y mejorar la protección de las lenguas de la comunidad, que califica de «riquísimo patrimonio cultural que merece respeto y aprecio».

En ese sentido, ha avanzado que en pocos días va a empezar los contactos con los grupos parlamentarios de la Junta General que creen en el Estado autonómico.