Fernando Argüelles, BanksyAstur: «Vivimos una sociedad individualista donde parte de la psiquiatría está con las mafias farmacéuticas»

De «Turón de Suchard» a «Grandas de Salime del grupo de WhattsApp». Así fue el recorrido de la campaña Pola Salú Mental desarrollada por Fernando Argüelles García. Un nombre que, de primeras, puede no sonarle a mucha gente. Pero si nos referimos a su alter ego, BanksyAstur, seguro que a muchas personas les resulta bastante más familiar. El artista es conocido por sus humorísticos juegos de palabras rebautizando de manera descacharrante los nombres de un buen número de localidades asturianas, que se volvieron virales en redes sociales. De hecho, a muchas personas les sacaron una carcajada durante lo peor de la pandemia y el confinamiento, en un momento sombrío en el que la risa era un bien más que escaso. Fernando Argüelles, más conocido como BanksyAstur, es el autor de un buen número de verdaderas obras de arte humorísticas callejeras.

Para su segundo calendario solidario, ha trabajado en el diseño Proyeutu Kraken y se ha colaborado con 16 asociaciones. La realización de un grafiti en Sama ha sido el colofón de una acción que persigue un objetivo muy claro. Visibilizar la salud mental, llevarla a la primera línea de la educación y, sobre todo, quitar el estigma que recae muchas veces sobre las personas que padecen este tipo de problemas.

-¿Usted responde a Fernando Argüelles García o se siente más a gusto como BanksyAstur?

-Yo siempre digo, un poco de cachondeo, que soy un poco el representante en la tierra de ese misterioso personaje que es BanksyAstur.

-¿En qué ha consistido esta segunda campaña Pola Salú Mental?

-Para la segunda campaña he hecho algo parecido que para la anterior, es decir, la metáfora de juntar todas las zonas en una sola por una causa. En 2021 fue Pola Atención Primaria y en 2022 fue Pola Salú Mental. Busqué una causa tan global que abarca la propia atención primaria y la salud mental tan necesaria. Como vi que la campaña anterior tuvo tanto éxito decidí hacerla más a lo grande, con el doble de asociaciones que el año pasado, más plural. En la primavera pasada empecé a elaborarlo. En lo que respecta a los juegos de palabras con la toponimia había pueblos de sobra, hice una página de Facebook y fui publicando ahí temas pedagógicos relacionados con la salud mental, cosas reivindicativas enfocadas a abordar este tema socialmente y, bueno, combinadas con algún tuneo cómico de los pueblos.

-Hace unos días un grafiti en Sama sirvió como colofón a esta iniciativa, ¿verdad?

-El grafiti fue el equivalente a ponerle la guinda a la campaña. Me lo hizo un artista conocido mío que quería colaborar. Tuvo el grandísimo detalle, el cual le agradezco, de realizar esta obra de arte en Sama, donde el Sanatorio Adaro. Justo está en la pared donde se encuentra la gente tratada en salud mental.

-¿Qué busca lograr con la campaña Pola Salú Mental?

-Esta campaña el objetivo que tiene, sobre todo, es llevar a cabo acciones solidarias y ayudar a personas desfavorecidas de diferentes ámbitos. Es algo urgente e importante abastecer de productos de higiene y alimentación; ayudar a asociaciones como Narices Azules: Doctores Payaso, que trabaja con niños y niñas enfermos de cáncer; proporcionar equipación deportiva a asociaciones como Salud Mental Oviedo… fue muy plural y llegamos a muchas entidades de la región, incluso una protectora de animales, una que trabaja con refugiados en Bosnia y Serbia…

-Pero también concienciar, ¿no es así?

-El fin fundamental era reivindicar la necesidad de la Salud Mental en la sanidad pública y la educación. En este último apartado considero que es esencial que se hable de salud mental, pero no solo a modo de charlas de vez en cuando, sino educar en valores, empatía, comunicación emocional… muchas veces si las emociones no se gestionan bien afectan a la salud mental y sufrimos, me incluyo, de forma innecesaria en ocasiones. Hay verdaderos dramas y sufrimientos que se pueden mitigar gestionando bien las emociones.

-¿En qué sentido?

-En ocasiones esos sufrimientos emocionales, depresiones extremas, ansiedades y demás, con educación emocional en colegios e institutos se puede abordar de una manera mucho más efectiva. No hablemos ya del tema de los suicidios. Cuando la gente toma esa decisión, más que dejar de vivir, lo que desea es dejar de sufrir. Ha habido varios casos en Asturias muy recientes y es algo muy importante. Hay que afrontarlo desde la solidaridad, la empatía y el apoyo mutuo. Luchar contra los estigmas y los prejuicios. No minimizar los problemas de las personas porque tú los veas diferente. Esa educación emocional nos hace mucha falta. Parece que se avanza, pero al final es una sociedad individualista donde parte de la psiquiatría está con las mafias farmacéuticas y eso cronifica los problemas.

-¿Tiene pensado en qué va a consistir la campaña del año que viene?

-Igual sigo con el tema de la salud mental. Pero en vez de calendarios, a lo mejor hago otra cosa. Más que nada porque me lleva mucho trabajo y tengo poco tiempo. Sí que es verdad que sin la ayuda de muchísimas personas esto no hubiera sido posible, desde los que lo publicitaron en redes, periodistas que le dieron voz, gente que me llevo calendarios al oriente y occidente de Asturias, otros que me gestionaron puntos de venta o que me lo vendieron a título personal. Solo el pueblo salva al pueblo. No sé si hacer un comic o un juego de mesa. Algo que no me lleve tanto tiempo y me dé más margen, pero tengo que darle una vuelta.

-¿Cree que hay gente que se queda en la anécdota de los juegos de palabras y la toponimia?

-Hay gente que a lo mejor ve el componente cómico de los juegos de palabras, pero no lo asocia a la Campaña Pola Salú Mental. Le hace gracia, pero no lo identifica, y si ve algo como lo de «Turón de Suchard» no lo relaciona como parte de esta iniciativa.

-¿Tiene alguna iniciativa pensada para este año?

-Yo estoy haciendo talleres en una compañía de teatro e improvisación que se llama Trivilorio. La idea es hacer una actuación con público, con el alumnado, en algún sitio de Gijón como el Ateneo de la Calzada o el Centro Municipal de El Llano, en una fecha de junio. Será una actuación cómica y el dinero que se recaude va a ir a la Asociación Abrazos Verdes, una entidad con la que yo trabajé en la campaña. Abrazos Verdes trabaja con supervivientes de personas fallecidas por suicidio y también desarrolla acciones de prevención para gente que pase por estas crisis. También luchan contra el estigma que cae sobre las personas cercanas a aquellos que mueren por un suicidio, madres, padres, hijos, parejas…

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