El epidemiólogo Pedro Arcos señala que la población no debe tomar ninguna medida específica y que lo que procede es reforzar la vigilancia epidemiológica
24 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.La aparición del virus conocido como la viruela del mono cuando la población se está recuperando de los estragos y restricciones de la pandemia ocasionada por la Covid-19 está provocando una gran expectación y también cierta preocupación por los efectos que puede tener esta enfermedad que, sin embargo, lo único que tiene en común con el SARS-CoV 2 es que se trata de un virus. El caso es que sus síntomas específicos, la aparición de vesículas cutáneas, hacen que sea una enfermedad fácil de identificar y de diagnosticar y contra la que el epidemiólogo Pedro Arcos no recomienda adoptar ninguna medida general concreta más allá de que los sistemas de salud refuercen la vigilancia epidemiológica para controlar los casos y determinar los contactos estrechos.
¿Qué es la viruela del mono?
Pedro Arcos explica que la viruela del mono es «una enfermedad viral benigna» que se ha transmitido de animales a humanos (zoonosis) que pertenece al mismo grupo que la viruela pero que «no es el virus de la viruela». Según señala, «no se trata de un virus nuevo ni tampoco de una mutación», sino de un virus que «existe en los monos y en diferentes tipos de animales roedores».
Orígenes de la enfermedad
La viruela del mono se identificó en monos en el año 1958 y en 1970 se detectaron los primeros casos en humanos en lo que ahora es la República Democrática del Congo. Posteriormente aparecieron grupo de casos en países como Israel, Singapur o Reino Unido.
Mecanismo de transmisión
El epidemiólogo y director de la Unidad de Investigación de Emergencias de la Universidad de Oviedo aclara que el mecanismo de transmisión es por contacto muy estrecho de piel con piel o secreciones de una persona contagiada. También señala que puede darse el caso de que se contagie por el contacto con prendas que hayan estado en contacto con el exudado de la vesículas, como sábanas o toallas. «Podría transmitirse por el aire, pero tendría que ser en una distancia muy muy corta», precisa Pedro Arcos.
¿Hay vacuna para la viruela del mono?
Arcos manifiesta que lo que existe es «una vacuna para otro virus», que es el de la viruela, y que «al ser parecidos, se genera inmunidad cruzada», por lo que las personas que están vacunadas de la viruela «están protegidas frente a este virus». En este sentido, pone de relieve que «hace bastantes años que se dejó de vacunar contra la viruela» y que, por tanto, es la gente de una determinada edad la que está vacunada.
¿Es necesaria una vacunación masiva?
Aunque la viruela del mono, como el SARS-CoV 2, es un virus, «al tener un mecanismo de transmisión específico, no es necesario hacer una vacunación masiva a la población», comenta Pedro Arcos, que concreta que, a lo sumo, la vacunación estaría indicada «para los contactos estrechos» de las personas diagnosticadas con el virus.
¿Cuál es el periodo de incubación de la enfermedad?
El profesor Arcos precisa que el periodo de incubación suele oscilar entre los 6 y los 16 días, aunque puede prolongarse en algunos casos hasta los 21 días.
¿Qué síntomas presenta?
Arcos expone que al tratarse de una enfermedad viral puede ocasionar unos síntomas generales similares a los que provocan otros virus, como fiebre, inflamación de los ganglios o cansancio. En cuanto a los síntomas específicos, apunta que produce vesículas en la piel, «un cuadro cutáneo que desaparece». Así, el mismo añade que es una enfermedad que en términos de gravedad «se asimilaría más a una enfermedad de las que afectan a la piel, como puede ser la varicela».
¿Qué deben hacer las personas con síntomas?
«Si hay una personas con síntomas, lo correcto es evitar los contactos estrechos», recomienda el epidemiólogo, que dice que como sucede puede se está afectado por otras enfermedades, como la varicela, debe regir la lógica y disminuir las interacciones sociales.
¿Cuánto duran las vesículas en la piel?
El experto señala que las vesículas «evolucionan en seis o siete días», tiempo en el que se hacen costra y desaparecen. Además, comenta que si bien la enfermedad de la viruela «deja marcas en la piel, la viruela del mono no deja marcas».
¿Se debe restringir la actividad de la población?
Pedro Arcos traslada que no deben darse mensajes de alarma porque «desde el punto de vista de la población no hay que hacer anda». Según dice, «lo único que procede es reforzar la vigilancia epidemiológica para saber si hay aumento de casos». En este sentido, recuerda que lo único que se ha hecho por el momento en Asturias ha sido «remitir una nota de advertencia a los servicios de dermatología por si apareciera algún caso».
¿Puede llegar a ser una enfermedad endémica?
«El hecho de ser una enfermedad muy visible facilita mucho su identificación, diagnóstico y control», explica Pedro Arcos, que matiza que eso «impide que sea un proceso endémico».
¿Cuántas zoonosis están detectadas’
El epidemiólogo y director de la Unidad de Investigación de Emergencias de la Universidad de Oviedo concreta que hay unas 200 zoonosis (enfermedades que pasan de los animales a los humanos) que tienen interés en salud pública. «La mayoría son enfermedades raras y se dan en zonas geográficas concretas, como pueden ser los países centro africanos», indica Arcos.