Pablo Martínez, vocalista de Desakato: «El punk continúa siendo combativo y así debe ser»

Marcos Gutiérrez ASTURIAS

ASTURIAS

Pablo Martínez, guitarrista y voz de Desakato
Pablo Martínez, guitarrista y voz de Desakato Ángel Delgado

La banda llanerense actuará el viernes en el festival Tsunami Xixón, que se celebra en el parque de los Hermanos Castro del 28 al 30 de julio

26 jul 2022 . Actualizado a las 11:15 h.

Pocas bandas asturianas han tenido en los últimos años el impacto nacional que Desakato ha logrado. Los llanerenses forman parte del cartel del Tsunami Xixón, que se celebrará en el parque de los Hermanos Castro del 28 al 30 de julio. En concreto, se subirán a las tablas el viernes 29 de julio para presentar su trabajo de 2020 «La miel de las flores muertas» (El Garaje Producciones), disco publicado en 2020 al que el parón que la pandemia ha convertido prácticamente en un nuevo álbum. Pablo Martínez, vocalista y guitarrista del grupo, cree que después de la «ostia económica y anímica» de la pandemia recuperar los directos es «motivo de alegría».

-¿Hay ya ganas de Tsunami?

-Sí, muchas. Es el festival más grande o de los más grandes de Asturias y, la verdad, para nosotros tocar ahí es muy importante. La última vez que lo hicimos lo pasamos genial. Hay mucha gente que se coge vacaciones solamente para poder ir al Tsunami y sabemos que vamos a reencontrarnos con muchos amigos.

¿Qué aliciente supone tocar en casa y, además, ante tanta gente?

-Nos gusta siempre tocar en festivales. La verdad es que al principio se hacía más difícil, porque una banda que está acostumbrada al trato más cercano en salas con el público cuando se sube a un gran escenario normalmente siente esa distancia. Pero nosotros logramos romper en cierta manera esa barrera y en un festival somos capaces de comunicarnos con la gente, trasmitir nuestra energía y recibirla del público  de una forma mucho más directa y sincera, que es al final lo que buscamos. Tanto si es un club pequeño como si es un escenario gigante a nosotros nos encanta el directo.

-¿Qué supone para la banda la vuelta a la normalidad de los festivales y conciertos?

-Imagínate que para nosotros, aparte de la ostia económica que supuso la pandemia, también tuvo un efecto psicológico y anímico tremendo, con un disco recién sacado, habiendo terminado 2019 en La Riviera con dos llenos… la banda en ese momento estaba en su momento más dulce y nos llegó esta situación. No solo afectó económicamente, sino emocionalmente. El hecho de que ahora volvamos a poder tocar y recuperar esa actividad es motivo de alegría. Estamos muy contentos y con ganas de que siga mucho tiempo.

-Este año Desakato no solo actuó en Exconxuraos, sino que la banda fue pregonera de las fiestas ¿Qué representa esa responsabilidad para unos llanerenses?

-La verdad es que es un verdadero orgullo que hayan contado con nosotros. El hecho de que se te quiera en tu casa es increíble. Estamos muy agradecidos y lo cierto es que fue un día muy especial que, además, pasamos en familia, con nuestros padres, madres y abuelas, que estaban todos muy orgullosos. Lo vamos a recordar, sin duda.

-«Creemos en la obligación moral del punk con la política, la lucha contra las injusticias sociales y contra el odio» es una de las frases de ese pregón ¿Sigue siendo el punk un arma reivindicativa como antaño?

-Creo que el punk sigue siendo combativo y así debe ser. No sé si las nuevas generaciones tienen la misma percepción de lo que significa para los que somos un poco más viejos esa música. Yo quiero ser positivo y creo que hay esperanza. Hay chavales haciendo cosas muy interesantes con esa perspectiva de contar cosas sociales y políticas en las canciones.

-El año que viene Desakato cumple dos décadas ¿Hay algo pensado para celebrarlo?

-Algo hay. La verdad es que tenemos algunas cosas pensadas, pero de momento no podemos adelantar nada. Cuando terminemos la serie de conciertos de este verano seguramente ya estaremos en disposición de poder adelantar algo.

-El último trabajo de Desakato, «La miel de las flores muertas», salió en 2020 ¿Qué supone presentarlo en directo, ya sin las restricciones de la pandemia, dos años después de haberlo publicado?¿Lo siente la banda casi como un disco nuevo?

-Es un poco extraño porque las canciones ya tienen un tiempo, pero la verdad es que la gente las está asimilando muy bien. Las que tocamos en directo de ese disco el público las está cantando y estamos muy contentos. Todavía le queda cuerda, vamos a girar con él. Enseguida tendremos que pensar en proyectos nuevos, pero de momento estamos centrados en «La miel de las flores muertas».

-¿Eso quiere decir que habrá próximamente continuación a «La miel de las flores muertas»?

-Es como si hubiésemos empezado a girar este año con el disco, o sea que primero vamos a darle recorrido, que es lo que merece.