33 centros y 50 personas investigadas en Asturias por la emisión de gases contaminantes a la atmósfera

La Voz REDACCION

ASTURIAS

Operación Xielu en Asturias
Operación Xielu en Asturias Ministerio del Interior

La Guardia Civil, durante los 18 meses de investigación, llevó a cabo el control de más de 65.000 vehículos tras detectar numerosas irregularidades de los gases fluorados usados para el aire acondicionado

23 jul 2022 . Actualizado a las 12:01 h.

La Guardia Civil ha investigado a un total de 50 personas y 30 centros autorizados de tratamiento de vehículos de Asturias por emisiones de gases contaminantes a la atmósfera. Según ha informado el Instituto Armado, las investigaciones de la operación, denominada «Xielu», han durado 18 meses en los que se llevó a cabo el control de más de 65.000 vehículos dados de baja desde 2017 en el Principado.

Los Efectivos de la Unidad de Protección de la Naturaleza de la Comandancia de Gijón iniciaron las investigaciones a raíz de una inspección de vehículos al final de su vida útil en un centro autorizado de tratamiento (CAT) de Asturias, en la que se detectaron numerosas irregularidades, tanto en la gestión física como documental, de los gases fluorados utilizados en los vehículos a motor para el funcionamiento del aire acondicionado.

A la vista de las deficiencias que fueron observadas durante esta inspección, se inició una investigación más exhaustiva, llevando a cabo inspecciones en todos los centros CAT de la comunidad, con el fin de determinar si estas irregularidades eran un hecho aislado o, por el contrario, una práctica habitual de este tipo de centros.

Fruto de las gestiones se ha determinado que estos equipamientos no estaban gestionando correctamente los gases de los circuitos de aire acondicionado de los vehículos dedicados a desguace.

Así, al final de la vida útil de un vehículo, estos deben ser recuperados y acumulados en unas bombonas específicas para su almacenaje, comunicándose este hecho a la autoridad competente en materia de residuos de la comunidad, tanto la cantidad recuperada como el destino y gestión que se le dan a dichos residuos.

Las investigaciones llevadas a cabo han permitido determinar que existía un desfase entre la cantidad declarada y la que debería de haberlo sido.

Estos tipos de gases, CFCs, HCFCs, HFC, PFC y el SF6, por su tipología y composición, pueden afectar gravemente a la capa de ozono o aumentar la cantidad de CO2 emitida a la atmósfera, lo que favorece el calentamiento global, asegura el Instituto Armado, que explica que estas sustancias permanecen «hasta cientos de años sin degradarse».

Al finalizar la vida útil de los vehículos equipados con sistemas de aire acondicionado que emplean, los fluidos refrigerantes contenidos en el interior de sus circuitos deben de ser recuperados y gestionados correctamente según la legislación vigente, siendo el CAT el encargado de entregarlos a un gestor de residuos autorizado, en un plazo no superior a seis meses.

La normativa actual promueve la reutilización de este tipo de gases siempre que sea viable, debiendo de ser extraídos de forma controlada e independiente, empleando equipos específicos y almacenándolos en botellas homologadas y cumpliendo con el etiquetado pertinente.

Según la Guardia Civil, el volumen de gases emitidos a la atmósfera por los circuitos de aire acondicionado de estos vehículos equivaldría a 42.000 toneladas de CO2, con una valoración económica por emisiones que asciende a un millón de euros.

El operativo ha culminado con la detección de 33 centros de tratamiento autorizado que no cumplían con las normas establecidas, lo que ha dado lugar a la toma de declaración como investigadas de 50 personas como supuestas autoras de un delito contra el medio ambiente. Además, se han denunciado 231 infracciones administrativas en diferentes conceptos y normativa, informa Efe.