Los asturianos, a la cola de la emancipación juvenil

La Voz REDACCIÓN

ASTURIAS

Vivienda en alquiler en Gijón
Vivienda en alquiler en Gijón

Solo 14,7 % de los menores de 29 años viven solos en el Principado, mientras que la media nacional se sitúa en 15,6 %, según el Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España

12 ago 2022 . Actualizado a las 11:55 h.

Asturias sigue siendo una de las comunidades donde a los jóvenes les cuesta más emanciparse. El Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España (CJE) ha presentado este jueves su informe sobre el análisis de la emancipación juvenil en España con datos del segundo semestre de 2021 y, mientras la media del país se sitúa sobre los 15,6 % de jóvenes emancipados, en Asturias los números se reducen hasta el 14,7 %. La situación de los jóvenes asturianos es peor que en el resto del país debido a la escasa incorporación laboral debido a que, a pesar de tener ingresos salariales propios, en estos no son con los que poder afrontar el pago continuado de una vivienda de compra o alquiler. Por esa razón, explica el estudio, Asturias cuenta con unos precios de mercado inmobiliario por debajo de la mayoría de las comunidades autónomas.

El informe señala que  cuando una persona joven asturiana lograba encontrar un empleo lo hacía en condiciones de subocupación y temporalidad en mayor medida que en el conjunto de España. Mientras que la situación se ha mantenido estable en el Principado, la media española aumentó un 0,7 respecto al primer semestre de 2021

El documento, publicado en la víspera del Día Internacional de la Juventud, pone de manifiesto que «la precaria» recuperación del empleo no ha ido acompañado de un aumento de los sueldos de los jóvenes trabajadores que consiga reducir «la brecha» entre los altos precios de la oferta de vivienda y la poca renta disponible de quienes la demandan.

De reducir esta brecha, apunta el informe -presentado por la presidenta del CJE, Elena Ruiz Cebrián, y el coautor, el sociólogo Joffre López- mejoraría la tasa de emancipación juvenil.

Además, el perfil del joven emancipado es una persona de 29 años, con un salario un 28 % superior al resto, contrato indefinido y estudios superiores terminados, según los datos del Observatorio.

Empleo precario

El informe apunta a que esta leve mejora de la emancipación juvenil se ha apoyado «en una intensa recuperación» del empleo destruido por la pandemia, de forma que la tasa de paro joven cayó 5,2 puntos hasta situarse en el 23,6 %, por debajo de la tasa marcada al final de 2019 (23,8 %).

Y el cierre del pasado año, la creación de empleo se dio además de entre la juventud asalariada, entre los que trabajan de manera autónoma(6 % frente al 4,5 % de 2019).

Sin embargo, especifica el informe, la recuperación de puestos de trabajo «se ha cimentado en la precariedad laboral de la juventud» debido a la temporalidad y la parcialidad.

La presidenta de la CJE ha señalado sobre esta ligera subida de la emancipación que «cuando se toca fondo», como se hizo en el primer semestre, lo previsible es que se produzca un crecimiento, que, no obstante, ha recibido «con cautela».

Con esta situación, los jóvenes que pueden emanciparse lo hacen compartiendo vivienda con otros ya que sufragar el alquiler en solitario supondría dedicar el 79,2 % de su sueldo, cantidad que se reduce al 25 % si se opta por convivir con más personas.

Ante esta «sustancial» diferencia, el 34,5 % de la juventud emancipada comparte piso con otras personas con las que no tienen relación de parentesco.

Gran brecha de género

Los datos de 2021 muestran «una gran brecha de género», ha dicho Ruiz Cebrián, en términos socioeconómicos y si la emancipación residencial es mayor entre las jóvenes (18,5 %) que entre hombres (12,7 %), la forma de hacerlo es diferente: las mujeres que se emancipaban en solitario suponían solo el 13,8 %, la mitad que los hombres que vivían en hogares unipersonales (26,7 %).

La menor emancipación en solitario puede deberse, según el informe, a la mayor precariedad laboral de las mujeres ya que, por ejemplo, la tasa de paro es inferior entre las mujeres (23,1 % frente a 24,0 %), la tasa de temporalidad es superior (58,6 % frente al 52,3 %), la parcialidad es casi el doble (33,7 % ante 17,8 %) y la subocupación era cinco puntos superior entre las mujeres (17,6 %).

Pequeño porcentaje de «Ninis» y elevado de  «Sísis»

El informe también revela que la población joven inactiva en la segunda mitad de 2021 era el 47,6 % de la juventud, de los que el 89,7 % lo era por encontrarse estudiando, la cifra más alta de la serie histórica.

Solo el 2,4 % de la juventud inactiva se encontraba, a su vez, sin estudiar y «frente a este pequeño porcentaje de ninis» destaca el «elevado de sísis», aquellos que trabajan y estudian, quienes suponen el 32,5 % de los jóvenes con empleo, seis puntos más que en el último trimestre de 2019.

El CJE ha insistido en sus reivindicaciones de priorizar a la juventud en la agenda pública, poniendo en marcha políticas a medio y largo plazo hacia este colectivo que cambien «de verdad» la situación.