Barbón: «Deflactar el IRPF significa bajar impuestos, también, a las rentas más altas»

La Voz

ASTURIAS

El presidente del Principado, Adrián Barbón
El presidente del Principado, Adrián Barbón Jorge Peteiro | EUROPAPRESS

El jefe del Ejecutivo recuerda que la inflación afecta a familias y empresas y también a las administraciones

27 sep 2022 . Actualizado a las 12:49 h.

El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha advertido este martes de que deflactar el IRPF de 2022 de cara a los presupuestos del próximo año, una propuesta planteada por el PP en la negociación presupuestaria y que hoy ha anunciado que aplicará el Gobierno gallego, significa «bajar impuestos, también, a las rentas más altas».

A través de su perfil en las redes sociales, Barbón señala que esa rebaja de impuesto comenzará «por los propios diputados», que pagarían menos por IRPF, una circunstancia que considera injusta por lo que defiende «utilizar la vía de deducciones fiscales» que se limitan por renta familiar o individual (evitando que las rentas altas se vean beneficiadas) y la vía de las ayudas directas a las clases medias y clases trabajadoras, «las que más lo necesitan».

El jefe del Ejecutivo recuerda que la inflación afecta a familias y empresas y también a las administraciones y pone como ejemplo el hecho de que este año en Asturias se licitarán contratos de gas en dos hospitales cuyo coste de calefacción pasa de 1 a 12 millones.

Además, subraya que, con la inflación, se incrementan el precio de las obras públicas como en el caso del proyecto de ampliación del Hospital de Cabueñes que ha pasado de costar algo más de 40 millones a casi 80.

Barbón se refiere además a la supuesta recaudación extra que obtendrá Asturias vía fiscal como consecuencia de la inflación y recuerda que los ingresos que recibirá el Principado en el 2023 ya están definidos «y no cambian, crezca o no la recaudación de este año».

Esos ingresos, advierte, están definidos por las transferencias a cuenta del Estado y otras previsiones como el objetivo de déficit que, al bajar, «supone disponer de menos dinero» e incide en que la recaudación en un territorio, no supone que todo ese dinero vaya para la comunidad autónoma dado que gran parte va al Estado y otra parte a los ayuntamientos informa Efe.