Mercedes Alperi, reumatóloga en el HUCA: «Fumar es el principal factor asociado al desarrollo de la artritis reumatoide»

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

Mercedes Alperi López, reumatóloga
Mercedes Alperi López, reumatóloga

La médico especialista hace hincapié en la importancia de hacer un diagnóstico precoz de la enfermedad para aplicar tratamientos que, si bien no llegan a curarla, hacen que remita y el paciente no presente síntomas

29 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) es uno de los centros españoles que son referencia nacional en el tratamiento de la artritis reumatoide, con una Consulta de Artritis de Reciente Comienzo desde hace dos décadas. Al frente de la misma está la doctora Mercedes Alperi López, licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Oviedo y médico especialista en Reumatología, quien además es la jefa del Servicio de Reumatología del HUCA desde hace tres años. El próximo viernes 4 de noviembre participará en el XXIII Congreso de la Sociedad Asturiana de Reumatología, un congreso en el que se seguirá profundizando en el estudio, las causas y los tratamientos para las enfermedades reumatoides, y es que algo que asevera de forma tajante la doctora Alperi es que enfermedades como la artritis no son enfermedades de gente mayor, si no que afectan a personas de cualquier edad, y que si no se tratan a tiempo pueden llegar a deducir la esperanza de vida hasta en 10 años. Sin embargo, añade en la entrevista concedida a La Voz de Asturias que, con un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado, las enfermedades reumatoides pueden remitir y hacer que el paciente no presente síntomas.

-La artritis reumatoide ¿es una enfermedad de gente mayor?

-Definitivamente la respuesta es no. La artritis reumatoide puede afectar a personas de cualquier edad y sexo, aunque preferentemente se da en mujeres de 30 a 50 años.

-¿Cuáles son las causas que desencadenan esta enfermedad?

-La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune. En condiciones normales, el sistema inmune nos defiende de la posible agresión de agentes externos (generalmente de microbios), pero en esta enfermedad el sistema inmunitario deja de reconocer como propios algunos componentes del organismo, articulaciones y otros órganos, los lesiona y los hace enfermar. Su causa es desconocida y probablemente es debida a múltiples factores y secundaria a la acción de uno o más agentes desencadenantes sobre una población predispuesta genéticamente.

-¿Es lo mismo la artritis que la artrosis? ¿En qué se diferencian estas enfermedades dicho en palabras que todo el mundo entienda?

-Aunque mucha gente las confunde, estas patologías tienen características bastante diferenciadas. La artritis es la inflamación articular, es más frecuente en personas jóvenes y característicamente, produce dolor nocturno y en reposo. La artrosis es un proceso degenerativo por el paso del tiempo, en el que se desgasta el cartílago, se acentúa con la sobrecarga y el sobrepeso, suele aparecer en mayores y produce dolor desencadenado por el movimiento.

-La artritis reumatoide suele ser muy visible en las articulaciones de las manos ¿hasta que punto tiene vinculación la enfermedad con hábitos o desempeños que realizamos cada día?

-La artritis reumatoide es producida por una inflamación crónica de la membrana sinovial que envuelve a la articulación; es por eso que afecta a las articulaciones que poseen esta membrana. Puede afectar a cualquier articulación, excepto a la columna vertebral, y tiene especial preferencia por las manos y los pies. Pero no hay una conexión entre el inicio de la enfermedad ni en la evolución de la misma con la sobrecarga manual.

-Fumar, por ejemplo, ¿puede influir o no en que se desarrollen enfermedades reumatológicas?

-El factor ambiental más importante asociado con el desarrollo de artritis reumatoide es el tabaco, que también se ha relacionado con otro tipo de artritis crónicas como la artritis psoriásica. Este hecho podría estar relacionado con la mayor frecuencia de infecciones bronquiales y de la boca de los fumadores.

-¿Hasta qué punto influye la alimentación en que se tenga o no artritis reumatoide? ¿Hay comidas que pueden mejorar o empeorar la enfermedad?

-No parece existir una clara relación de la enfermedad con ningún alimento en particular. Algunos estudios han demostrado que  los ácidos grasos poliinsaturados omega 3, que se encuentran en pescados azules como el atún, el salmón y la sardina, disminuyen la inflamación y el dolor en la artritis reumatoide. No obstante, las recomendaciones actuales para los pacientes son las mismas que para la población general: evitar la obesidad, que supone una carga adicional para las articulaciones y hacer una dieta variada, rica en frutas y verduras.

-Lo que se comenta de que los grandes comedores de pipas tienen más riesgo de padecer enfermedades reumáticas ¿es mito o realidad?

-Es un mito sin ninguna evidencia científica.                                                                            

-Las enfermedades reumáticas ¿afectan sólo a las articulaciones o también pueden afectar a órganos internos?

-Estas enfermedades son sistémicas, lo que quiere decir que, además de a las articulaciones, pueden afectar a otros órganos como pulmón, corazón, riñón..

-¿Ante qué síntomas se debe acudir a un médico especialista?

-Lo más frecuente es que la artritis comience con dolor e hinchazón en las articulaciones acompañados de rigidez que es más intensa por la mañana al levantarse y puede durar hasta varias horas. Es característico que el dolor sea de máxima intensidad en reposo y durante la noche y que alivie con el movimiento y lo largo del día. Las articulaciones dañadas con más frecuencia son las muñecas y los dedos de las manos y de los pies, aunque puede afectar a cualquier articulación del organismo.

El paciente debe acudir a su médico de Atención Primaria para que lo derive a su reumatólogo en cuanto sienta los primeros síntomas, con el fin de realizar un diagnóstico y un tratamiento adecuado lo antes posible, ya que los primeros meses de la evolución de la enfermedad son claves para mejorar el pronóstico de los pacientes en el futuro y evitar secuelas irreversibles de la enfermedad.

-¿Cuáles pueden ser las consecuencias de no tratar a tiempo enfermedades como la artritis reumatoide?

-Si no se tratan adecuadamente, las artritis crónicas, es decir, aquellas que persisten durante largos periodos de tiempo e incluso durante toda la vida, tienen en general un mal pronóstico. La inflamación mantenida y no controlada puede acabar dañando los huesos, ligamentos y tendones, lo cual conduce a una deformidad progresiva de las articulaciones, a la pérdida de la capacidad para realizar las tareas de la vida cotidiana y a un deterioro de la calidad de vida.

-La enfermedad reumatoide ¿pueden acortar la esperanza de vida de una persona?

-Sí. Los pacientes pueden tener una reducción de la esperanza de vida de hasta 10 años.  La primera causa de mortalidad son los eventos cardiovasculares, por lo que es muy importante que se controlen rigurosamente los factores de riesgo como la hipertensión, la hipercolesterolemia y la diabetes.

-¿De qué tratamientos se dispone hoy en día para hacer frente a enfermedades de este tipo?

El tratamiento de la artritis reumatoide se basa en la utilización de medicamentos con efectos diferentes sobre la enfermedad. Hay dos tipos: los tratamientos sintomáticos y los tratamientos modificadores de la enfermedad. Los tratamientos sintomáticos, como los analgésicos, los antiinflamatorios y los corticoides, son útiles para aliviar el dolor y la inflamación. Su acción es rápida, pero su efecto desaparece también rápidamente al cabo de unas horas y no sirven para modificar  la evolución de la enfermedad a largo plazo. Los tratamientos modificadores de la enfermedad son la base fundamental de la terapia frente a la artritis. Estos tratamientos actúan frenando los mecanismos inmunológicos que dan lugar a la enfermedad y por tanto, sus consecuencias de inflamación y destrucción articular. Podemos distinguir entre  los tradicionales (como metrotrexato y leflunomida) los agentes biológicos y la pequeñas moléculas. En este punto es importante mencionar que el tratamiento de la artritis es individualizado y que se ajusta según las características de cada paciente.

-¿Pueden llegar a curarse las enfermedades reumatoides?

-Afortunadamente, los nuevos tratamientos disponibles para la artritis están cambiando la evolución natural de estas enfermedades. Un gran número de pacientes puede llevar una vida prácticamente normal y, aunque no se llegue a curar la enfermedad, se consiguen remisiones en muchos casos, lo que hace que el paciente no presente síntomas. Esto va a depender fundamentalmente de que reciban el tratamiento correcto lo antes posible. Por ello, es fundamental la derivación preferente de estos pacientes desde Atención Primaria al reumatólogo, que es el médico especialista de referencia para los pacientes con artritis.

Trayectoria de Mercedes Alperi López

Mercedes Alperi López es licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Oviedo y médico especialista en Reumatología por vía MIR.  Fue médico adjunto del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario Central de Asturias y responsable de la Consulta de Artritis de Reciente Comienzo desde 2002. Jefa del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario Central de Asturias desde 2019. Previamente, Tutora acreditada en el programa de formación de residentes desde el año 2007 hasta 2019.

Participa como investigadora en diversos proyectos de investigación clínica y básica en el ámbito de la artritis reumatoide. Forma parte del grupo de investigación básica y traslacional en enfermedades inflamatorias de la Universidad de Oviedo (Departamento de Biología Funcional) y de la estructura del Instituto de Investigacio?n Sanitaria del Principado de Asturias (ISPA). Además, es autora de numerosas comunicaciones en congresos y capítulos de libros de la especialidad y autora y coautora de más de 70 artículos indexados en Pubmed.