Jorge Explosion: «En un mundo políticamente correcto nadie se atreve a expresar una opinión interesante por miedo a ser excluido»

Marcos Gutiérrez ASTURIAS

ASTURIAS

La nueva formación de Doctor Explosion, con Jorge Explosion en primer plano
La nueva formación de Doctor Explosion, con Jorge Explosion en primer plano

Doctor Explosion regresan, tras once años, con «Superioridad Moral». Un disco que cuenta con fans como el mismísimo «Little Steven», guitarrista de Bruce Springsteen. Su líder, demiurgo y alquimista sonoro, Jorge Explosion, habla con la voz acerca de este álbum

03 nov 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

«Superioridad Moral» es el nombre del nuevo trabajo de Doctor Explosion, publicado por el sello norteamericano Slovely Records. El nuevo disco del grupo asturiano llega once años después del anterior. Ha sido grabado y producido en los estudios Circo Perrotti de Gijón y masterizado en los mismísimos Abbey Road Studios por Frank Arkwright (Oasis, New Order, Blur, The Smiths, Arcade Fire, Belle And Sebastian...). Entre los fans incondicionales de este nuevo disco se encuentran Steven Van Zandt (Little Steven), guitarrista de la E Street Band de Springsteen, que desde el principio está pinchando este álbum en su emisora norteamericana Underground Garage, donde no suenan bandas en español habitualmente. Jorge Explosion, líder de la banda, cree que probablemente sea su trabajo «más variado» y «atractivo», pero siempre manteniendo la esencia de los Doctor Explosion clásicos.

-«Superioridad Moral» llega tras once años de su anterior trabajo ¿Por qué ha sido tan larga la espera?

-Mucho trabajo en otros proyectos, te enganchas a la rutina de sacar adelante las grabaciones de otros y cuando te quieres dar cuenta han pasado los años y tu disco está sin hacer. Además monté otro estudio en Austin, Texas, allí estuve viajando desde 2012 a 2019. Estuve de guitarrista en la banda tejana The Ripe, donde compartí gratas experiencias de conciertos, giras y grabaciones con mi amigo Jake García de The Black Angels. Luego hice dos giras por Latinoamérica, en 2018 y 2019, con Doctor Explosion acompañado de músicos que conocí en Argentina. En esas giras me di cuenta que lo que más me gusta es hacer el salvaje en el escenario, viajar y conocer gente y contar mis propias historias en mis canciones y catarlas en español. Al final hay que tomar decisiones y ser selectivo. Desgraciadamente, no hay tiempo para todo en la vida, y el dinero es una prioridad equivocada. Así que por ese motivo Doctor Explosion está de vuelta. El disco ya estaba terminado a finales de 2019 y cuando estaba planeando editarlo vino la pandemia y lo guardé justo dos años en un cajón hasta que fuera un buen momento, y ahora sin duda lo es.

-En «Superioridad Moral» hay punk, garaje, country (como en «Paleto»), guitarras ‘Waynekramerianas’, baterías contundentes, riffs casi protometálicos… ¿Cree que es el disco más variado que ha grabado hasta la fecha?

-Puede ser el álbum más variado si, o el que más registros tiene y esto lo hace atractivo, porque a través de esa variedad se mantiene la esencia de Doctor Explosion. Aunque la banda ha mutado a lo largo de los años, también se ha ido convirtiendo en algo que creo nos hubiera gustado ser desde un principio y que hemos ido descubriendo con el paso de los discos. Lo de la variedad es una manera de verlo, en realidad puedes también no verlo tan variado. Todo es música rock en español mirado con una perspectiva más amplia. Todo depende en que carpeta guardes las cosas y como sea de grande y de genérica esa carpeta. Para alguien menos experto en referencias musicales todo le sonará a guitarras eléctricas y baterías acústicas con letras en español. La música está toda interconectada y cuanta más riqueza y mas fusión el resultado es más genuino. Por contra una misma personalidad en la voz y la forma de hacer las cosas  siempre unifica mucho un disco.

-¿Cómo ha influido su estancia en Austin a su música?

-En Austin me empapé bien de toda la escena underground y de todo lo que allí pasa. Este disco es un reflejo en parte de mis experiencia vital y musical en ese periplo, y readaptado a mis coordenadas de siempre, así que en el disco podemos identificar influencias claras de los Kinks, Garage, Psicodelia, Punk, Beat, Country, riffs más pesados, riffs mas veraniegos y ligeros, con una perspectiva actual en la producción pero descarnada, no edulcorada, que refleja cierta crudeza y riesgo. Toda idea interesante la fui incorporando al disco. También durante mi experiencia tejana aprendí a desprejuiciarme musicalmente un poco más. En el pasado he tenido la sensación de que aquí estamos siempre preocupados de etiquetar los estilos minuciosamente y compartimentar que es cada cosa para encontrar una explicación a la música, y puede que eso sea una forma de verlo. Pero también uno puede encontrar una explicación a la música al margen de las etiquetas, poniéndole una más amplia y simplemente disfrutándola como «Música». Cuando buscas tu propia forma de contar las cosas es difícil encajar en una etiqueta.

-Parece que, por ejemplo, Little Steven (ndr: guitarrista de la E Street Band de Bruce Springsteen) está encantado con el disco ¿Está satisfecho con la respuesta hasta ahora?

-Muy satisfecho, más aun si tienes en cuenta que en su emisora no programan música en español, así que es todo un honor habernos colado dentro y estamos muy agradecidos a Bill Kelly y Little Steven por tenernos a bordo. La semana pasada otra canción del disco, «La gente no sabe Gastar», estaba en el número 1 del top 10 de Mike Rogers, en la emisora de New Jersey WMFU. Mike hace el programa desde Japón. El disco está teniendo muy buena acogida en medios internacionales anglosajones, como la revista Shinding en Inglaterra o la web God is in the TV, o Louder Than War Radio, y eso que en una de las canciones digo: «De todos los folclores solo hay uno que yo amo y no es el rock anglosajón, es el folclore asturiano». También estamos manteniéndonos en el puesto número 2 desde hace meses en la playlist NeoPsychedelic Rock de Spotify con «Vestir de Mujer».

-Dicen que «La superioridad moral es un ejercicio de soberbia en sí mismo, y ya que el rock también lo es, arrebatémosle esa superioridad por un momento a los que siempre juzgan, a los que cuestionan nuestro modo de vida y de diversión. Seamos irreverentes con la estupidez humana que nos iguala a todos como víctimas y verdugos» ¿Sigue siendo el rock un arma contra la estupidez o, más bien, se ha convertido en una herramienta para averiguar quiénes son estúpidos y quiénes no lo son?

-La cultura y el conocimiento son siempre un arma contra la estupidez, el problema viene cuando un artista concreto es estúpido, entonces su arte es un mensajero de la estupidez. El público siempre está sometido a todo tipo de propuestas artísticas. Las identifica y acepta cada uno bajo su criterio, esto es como todo en la vida, hay talento y hay estupidez y hay mezcla de ambas en todos los posibles porcentajes. La vida está llena de talento y estupidez en todas sus facetas y en todas sus disciplinas artísticas. Deberíamos como sociedad tener más espacios culturales libres e independientes y también más espacio para la cultura en los medios de comunicación públicos para evitar la estupidez, pero… ¿quién va a juzgar que es estúpido y que no lo es?: el criterio, el talento para intuir la belleza, los prejuicios,… todos podemos ser muy inteligentes y a la vez podemos ser muy estúpidos. Y en un mundo tan desinformado como este por el exceso de información, cada vez es más difícil tener acceso a cosas que merezcan la pena, porque antes de llegar a ellas estamos abrumados por mil mierdas que no merecen la pena. El Rock and Roll debería ser algo divertido si está bien hecho y si además nos deja una idea, un texto para reflexionar en forma de consigna para corear, mejor que mejor. El indie rock debería ser un medio de expresión sincero y arriesgado y verdaderamente independiente. El problema puede venir de que tras tantos años de promover basura como Operación Triunfo en la población, nos hayan alejado del criterio necesario para discernir. Es mejor vivir idiotizados por los programas de cocina, las series y los concursos. Por eso hace años que rompí la Televisión.

-¿De dónde surge, pues, el título del disco?

Sobre el título, todo alarde o exceso oculta una debilidad, así que la superioridad moral es en sí misma un síntoma de debilidad. Siempre la ejercen aquellos que creen que su modelo de conducta es el acertado y que el resto está equivocado y, por tanto, debe ser reconducido por el buen camino. Algunos de los que suelen otorgarse esa visión, acostumbran a ser los mismos que juzgan a la gente por ser diferente o incluso, por ejemplo, prejuzgan a la gente del rock por ser una especie de marginales antiestéticos bajo su criterio. Por eso me gustó jugar con esta foto y este título. Siempre ha habido gente que desaprueba nuestra forma de diversión. Gente conservadora. Aunque hoy en día también la izquierda ha caído en esa trampa moralista. Todos las opciones políticas de un signo u otro pretenden estar en posesión de la verdad y explicarnos cómo vivir y que es lo moralmente correcto. Y en un mundo políticamente correcto ya nadie se atreve a expresar una opinión interesante por miedo a ser censurado y excluido. La gente busca demasiado agradar, los followers, encajar. En nuestra generación buscábamos lo contrario. No queríamos encajar y muchos seguimos orgullosos de no querer encajar.

-Miguel Portela utiliza el término «garaje de autor» para referirse a este último trabajo ¿Le convence esta definición?

-Digamos que me hace gracia, pero es acertada, porque yo estoy utilizando el estilo musical del garage rock para contar mis propias historias, historias personales e introspectivas desde mi propia perspectiva y experiencia. Intento escapar del cliché del género en los textos como sería hablar de zombies y las típicas historias de amores resentidos tan típicos del pop y del rock. Intento huir de cosas generales y me sumerjo en mi propio mundo y voy a lo concreto, a datos concretos desde donde intento contar mis historias con sinceridad y resolver las canciones buscando una explicación a todo aquello que me genera dudas o llama mi atención. El garage es un estilo muy potente, lleno de energía y sinceridad cortada a machetazos. Desde esa elección estética es interesante hilvanar las historias que intento sean sinceras para implicarme más al cantarlas, en un resultado que intento sea siempre genuino e inesperado para mi sorpresa.

-El disco se grabó en los estudios Circo Perrotti analógicamente ¿Se logra un sonido más crudo y directo de esta manera?

-Sin duda y, de una forma más rápida, esas máquinas dan una calidez especial que facilita mucho el trabajo, pero hay muchas maneras de hacer las cosas. No nos engañemos, parte del sonido está en la mente del que lo busca, las máquinas son un medio para lograrlo pero la visión del artista es más importante que las máquinas. Porque es el concepto bajo el cual se hacen las cosas. Luego puedes utilizar una máquina u otra y, según qué estés buscando, te permitirá llegar a eso con mayor o menor facilidad. Obviamente si quieres hacer rock and roll no agarres una bandurria….A no ser que le pongas fuzz.

-Hábleme de la banda que le acompaña para defender estos nuevos temas en directo.

-Está Cesar Crespo a la guitarra. Es un gran guitarrista con un conocimiento muy amplio. Empezó tocando en bandas de punk rock como Vice and Vanity a principios de los 2000 y luego se metió de lleno en el mundo del blues, donde se ha labrado una sólida reputación con sus discos en solitario y acompañando a otros artistas como el bluesman Lazy Lester, autor del hit «I am a lover not a fighter» del sello Excello, versioneado por The Kinks en su primer álbum. Al bajo está Dani Montero y a la batería Conrado Martín, el más joven. Ambos tocaban juntos en Cooper, la banda de Alex de Los Flechazos. Todos son gente muy competente, con muy buen oficio y que se divierten tocando. Lo pasamos muy bien los 4 sobre el escenario y cada vez estamos más compenetrados y somos capaces de generar locura controlada, excitación salvaje y buena energía.