La detención ha permitido escalecer el secuestro de un joven de Mali en Langreo y de un senegalés en Mieres
02 dic 2022 . Actualizado a las 13:06 h.La Guardia Civil de Asturias ha detenido en el Caudal a cuatro personas e imputado a otras dos por los delitos de secuestro, detención ilegal, lesiones, tenencia ilícita de armas y delincuencia organizada, según ha informado este viernes la Comandancia de Oviedo.
La operación, denominada Somoza-Enlevement, ha permitido esclarecer el secuestro de un joven de Mali que fue localizado con lesiones en la localidad de Bimenes (Langreo) y el secuestro en grado de tentativa de un ciudadano senegalés en Turón (Mieres). La operación policial se inició el pasado mes de mayo, cuando a plena luz del día tres hombres intentaron secuestrar a punta de pistola a un joven de origen senegalés que había viajado desde Valencia ese mismo día, en La Plaza de la Madera de la localidad de Turón, si bien no lograron su propósito gracias a la intervención de dos personas que se encontraban en el lugar.
Dos días después del intento de secuestro, la Comandancia de la Guardia Civil de Gijón recibió la llamada de una vecina que alertaba de que en la localidad de Rosuaria, en Bimenes, había un hombre de origen maliense que presentaba graves lesiones y pedía ayuda porque relataba que llevaba secuestrado varios días.
Las primeras indagaciones constataron que el hombre, que también había llegado desde Valencia, había sido secuestrado dos días antes en Langreo por cuatro hombres armados con pistolas, que reclamaban a un familiar 50.000 euros por su puesta en libertad.
Según el relato policial, estas dos coincidencias hizo posible que la investigación permitiera ubicar a la víctima del secuestro en la localidad de Turón en la mañana del 7 de mayo, el mismo día y lugar donde había tenido lugar el intento frustrado de detención ilegal. Las investigaciones permitieron además conocer el momento e itinerario del viaje realizado para llevar a cabo la liberación de la víctima, que se había producido a las 22:20 horas del 9 de mayo en Rosuaria, en Bimenes. Los agentes comprobaron que el desencadenante del secuestro había sido una reunión frustrada entre víctima y autores que derivó en su rapto.
La Guardia Civil llevó a cabo una ardua investigación que se vio dificultada por las medidas de seguridad adoptadas por los secuestradores y por el hecho de que el vehículo utilizado en el secuestro había sido enajenado por una empresa de compraventa a nombre de una identidad falsa, sin que existiera en su documentación ningún tipo de trazabilidad que pudiera determinar quién era su usuario real y además se encontraba en un garaje privado tras la liberación de la víctima.
Tras seis meses de investigaciones , la Guardia Civil logró la detención de los integrantes de este grupo criminal afincado en la cuenca del Caudal el 31 de octubre y el 1 de noviembre. Los agentes realizaron cuatro registros domiciliarios en los que hallaron el turismo utilizado en el secuestro, un arma de fuego con dos cajas de munición del calibre 9 milímetros y sustancias estupefacientes.
El pasado 2 de noviembre, los detenidos pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Mieres, cuyo titular decretó el ingreso en prisión provisional para tres de ellos. Otras dos personas han sido investigadas por su presunta implicación en estos hechos en esta operación policial con la que se ha desarticulado al grupo criminal, informa Efe.