Malestar en Asturias y Cantabria por unos trenes que iban a llegar pero que no caben por los túneles

El Gobierno de Cantabria ha exigido explicaciones al Ministerio de Transporte sobre el retraso en la entrega de los trenes de cercanías que iban a llegar a Cantabria y Asturias, por un error en su diseño que les impide entrar en los túneles según han publicado varios medios de las dos comunidades.

Según recoge este jueves «El Diario Montañés», Renfe aportó mal los datos de gálibo a la empresa adjudicataria del contrato, que se firmó en 2020, y la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera, anunció en una visita a Asturias que la entrega se iba a retrasar al menos dos años debido a ese error.

Preguntado por este asunto, el vicepresidente de Cantabria y portavoz del Ejecutivo, Pablo Zuloaga, ha dicho que el Consejo de Gobierno ha abordado este asunto en su reunión semanal, después de que ayer conociera también la noticia por algunos medios asturianos.

«Desde el Gobierno de Cantabria hay unanimidad en la búsqueda de soluciones y en exigir al Gobierno de España una urgente resolución de este asunto para garantizar que los trenes van a llegar a Cantabria lo antes posible», ha subrayado.

Zuloaga ha recordado que Cantabria tiene trenes circulando en Cercanías con más de 40 años de uso que «generan graves perjuicios de forma habitual a los miles de personas que los utilizan para llegar a su centros de trabajo o a su vida cotidiana».

El Gobierno de Cantabria está en contacto, ha dicho, con la Delegación del Gobierno, con el Ministerio de Transporte, con Adif y con Renfe para buscar explicaciones y para «agilizar al máximo la llegada de estos trenes».

Les ha pedido que aclaren «los hechos que ya adelantó la secretaria de Estado en Asturias y que comprometen la llegada en los tiempos previstos de esta nuevas unidades que iban a solventar con su llegada inmediata los problemas de unos trenes tan viejos y con tantas averías».

CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN

También la oposición ha pedido explicaciones tras la publicación de estas informaciones. La presidenta del PP, María José Sáenz de Buruaga, ha afirmado que «el Gobierno de Revilla y Pedro Sánchez va de ridículo en ridículo con las infraestructuras ferroviarias, pero sobre todo en materia de cercanías, y está conduciendo a Cantabria a una decadencia cada vez más irreversible».

«Estamos en manos de Pepe Gotera y Otilio», ha lamentado en rueda de prensa Buruaga, que se ha mostrado «perpleja» ante esta «nueva chapuza».

La dirigente popular ha acusado al Gobierno de Cantabria de «dedicarse a cualquier cosa menos a preocuparse los proyectos importantes que necesitamos los cántabros» tras afirmar que «esta es la consecuencia de El Hormiguero».

«Tres años esperando 21 trenes que nos quitaron para llevar a Cataluña y ahora nos dicen que hicieron mal su trabajo, que no siguieron el asunto como debían y que tenemos que seguir esperando otros tres», ha criticado.

Según el portavoz de Cs, Félix Álvarez, las explicaciones del Gobierno de España para retrasar la entrega de los trenes «no son creíbles». «Necesita una excusa para no fabricar esos trenes porque, sencillamente, no hay dinero, y el que hay, va para los de siempre, porque Cantabria nunca ha sido la prioridad de Pedro Sánchez», ha opinado en un comunicado.

Ha recriminado además al Ejecutivo que enviase a Cataluña «los trenes que estaban en mejor estado para contentar a sus socios independentistas, a cambio de unas diligencias obsoletas y antiguas, que se averían cada dos por tres».

A juicio de Vox «la primera cabeza que debe rodar tras este despropósito» es la del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, porque «es el principal valedor» de la política ferroviaria que se ha llevado a cabo en Cantabria durante décadas.

«Cantabria tiene unas infraestructuras ferroviarias tercermundistas gracias a la complicidad del regionalismo”, afirma en un comunicado el portavoz parlamentario de Vox, Cristóbal Palacio

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