La denuncia de tres asesinatos franquistas en Muros se suma a la querella argentina

La Voz

ASTURIAS

Adelina Pulido
Adelina Pulido

Adelina Pulido, nieta y sobrina de las víctimas, presenta la desaparición de su padre y dos hermanos en 1937 ante el cónsul de Argentina en España

13 mar 2023 . Actualizado a las 13:30 h.

Un grupo de falangistas se llevó de su casa en el barrio de El Puntíu (Muros de Nalón) a Ramón Varela Carreño y a sus hijos Jesús y Filiberto Varela Suárez un 24 de octubre de 1937, tres días después de caer Asturias en manos de los sublevados. Venían a por los dos hijos. Jesús, de 29 años, era jornalero y secretario en Muros de Juventudes Socialistas. Filiberto, de 28 años, era panadero y afiliado al PSOE. Ramón Varela, labrador de 57 años, quiso acompañarlos y le dijeron que volviese para su casa, que ellos no volverían. Pero no quiso dejar solos a sus hijos y ninguno de los tres volvería jamás a su casa. 

La esposa de Ramón, María Suárez Gutiérrez, quedó destrozada tras la desaparición de su marido y dos de sus hijos. Cayó enferma y falleció al poco tiempo. Los otros cuatro hermanos (Nicanor, Palmira, Aurora y Adelina) nunca supieron con seguridad dónde enterraron los cadáveres de Ramón, Jesús y Filiberto. Se habla del puente de La Portiella, en la carretera antigua de Sotu a Muros. Nicanor, uno de los hermanos, también estuvo internado en el campo de concentración de Candás.

El Tribunal Especial para la represión de la masonería y el comunismo abrió sumarios en los años 50 tanto contra una de las hermanas, Aurora, como contra los dos hermanos desaparecidos, Filiberto y Jesús. En ellos se hace mención a que «por la actuación delictiva durante la dominación roja fueron ejecutados el padre y dos hermanos de la referida sujeta», además de que «los tres desaparecieron en circunstancias especiales, por lo que se supone que les fue aplicado el bando de guerra», «sin que conste se celebrara Consejo de Guerra ni aparezca inscrita su defunción en el Registro Civil correspondiente». En resumen, «se trató de una desaparición forzada», indican desde La Comuna d'Asturies, el colectivo asturiano que forma parte de la Coordinadora Estatal de Apoyo a la Querella Argentina (CeAQUA).

A sus 81 años, Adelina Pulido Varela, nieta de Ramón y sobrina de Filiberto y Jesús, se decidió a denunciar el caso al conocer la querella argentina, la única causa judicial abierta en el mundo para investigar los crímenes del franquismo. Viajó a Vigo el pasado viernes 10 de marzo para poder presentar denuncia ante el cónsul argentino. Su carta a la jueza acaba con esta frase: «En la confianza de que la justicia argentina pueda llevar a cabo lo que la española niega sistemáticamente». De esta forma, la denuncia de Adelina se suma a la treintena ya presentadas desde Asturias.

Desde La Comuna d'Asturies recuerdan que la dictadura franquista investigó en la conocida como Causa General todos los delitos cometidos en territorio republicano, un proceso de investigación que duró décadas, con todos los medios del Estado, bajo la dirección de la Fiscalía del Tribunal Supremo, con fiscales delegados en todas las provincias, para reconocer a las víctimas del bando vencedor. «Después de más de 45 años de democracia, el Estado español no ha llevado a cabo ese proceso con las víctimas republicanas sino que se lo han negado, por lo que los familiares de las víctimas han tenido que acudir a Argentina, estado más avanzado en términos de memoria, verdad y justicia», señalan.