La normativa define estas áreas como aquellas en las que los arrendamientos superan en cinco puntos el crecimiento del IPC provincial y en las que el coste medio de la vivienda supera el 30% de los ingresos
28 abr 2023 . Actualizado a las 09:46 h.De la mano de la nueva Ley de Vivienda, una de las medidas que más polvareda previa ha levantado es la que tiene que ver con la definición de zonas tensionadas y, por tanto, la consiguiente intervención en el mercado de alquiler de dichas localidades. En virtud de esa intervención se aplicaría un tope del 3% en la renovación anual de los contratos de alquiler. A día de hoy en España hablamos de algo más de un millar de municipios a los que esta iniciativa legislativa tocaría de lleno. Trece de ellos estarían en el Principado.
En resumen, las zonas tensionadas son aquellas donde el precio del alquiler de las viviendas está disparado. En esas poblaciones el precio del alquiler o de la compra ha aumentado tres puntos por encima del IPC en los cinco años previos a su declaración.
Otra de las condiciones es que el coste medio de la vivienda supere el 30% de los ingresos medios de los inquilinos. Asimismo, no es necesario que, para la declaración, las dos condiciones se den a la vez. La vigencia de esta definición es de tres años, aunque la norma da la opción de extenderla en el tiempo si el escenario se mantiene. Las Comunidades Autónomas y los ayuntamientos son los organismos con competencia para declarar una zona como tensionada.
Dentro de las alrededor de 1.010 localidades que actualmente entrarían en España dentro de esta definición, en Asturias habría 13. De acuerdo con los datos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, así como del Instituto Nacional de Estadística, en Tapia de Casariego el precio medio del alquiler mediano se sitúa en 300 euros en 2018, con un incremento del IPC de 3 puntos y una variación del alquiler entre 2015 y 2018 de 8 puntos (cifras oficiales más actualizadas publicadas hasta la fecha).
El resto de concejos en este particular listado serían Valdés, con 361 euros el alquiler mediano, 3 puntos de incremento del IPC y 12 puntos de repunte del alquiler; Cudillero, con 300 euros, 3 puntos de incremento del IPC y 15 de repunte del alquiler; Pravia (348 euros, 3 puntos de incremento del IPC, 7 de los alquileres); Muros de Nalón (403 euros, 3 puntos de incremento del IPC, 12 de los arrendamientos); Castrillón (450 euros el alquiler mediano, 3 puntos de incremento del IPC, 7 puntos de subida media de los alquileres); Villaviciosa (400 euros, 3 puntos de incremento del IPC, 7 de los alquileres); Cangas de Onís (360 euros, 3 puntos de incremento del IPC, 8 de los arrendamientos de media entre 2015 y 2018); Laviana (325 euros el alquiler mediano, 3 puntos de incremento del IPC, 8 puntos de subida media de los arrendamientos); San Martín del Rey Aurelio (290 euros, 3 puntos de incremento del IPC, 16 de los alquileres en el periodo considerado); Langreo (340 euros, 3 puntos de incremento del IPC, 9 puntos de subida media de los alquileres); Morcín (350 euros, 3 puntos de subida del IPC, 19 de los alquileres) y Cangas del Narcea (357 euros los alquileres medianos, 3 puntos de incremento del IPC y 7 de variación del alquiler entre 2015 y 2018).
Con diferencia, Barcelona, Madrid, Valencia y las Baleares son las tres comunidades que acaparan un mayor número de zonas tensionadas en el conjunto de España.