El alto tribunal establece la validez de su registro como marca de la Asociación de la Sidra Asturiana
21 jul 2023 . Actualizado a las 21:44 h.El Tribunal Supremo ha establecido la validez del registro de la botella «molde de hierro» como marca de la Asociación de la Sidra Asturiana (Assa), de forma que sólo podrá ser utilizada para comercializar sidra natural elaborada en Asturias.
El Supremo ha estimado el recurso de casación interpuesto por la Asociación de la Sidra Asturiana contra una sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Cantabria en septiembre de 2019 que ratificaba a su vez un fallo previo del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Santander, que permitía a un lagarero cántabro utilizar la botella «molde de hierro» para envasar productos diferentes a la bebida autóctona asturiana.
Aquel fallo suponía la cancelación de la patente que formalizaron, en el año 2000, los lagareros asturianos para impedir que se utilizara la botella «molde de hierro» para envasar productos diferentes a la sidra asturiana.
Sin embargo, el Supremo establece que la comercialización de la Sidra Natural Somarroza, de Cantabria, en un botella «molde de hierro» ha infringido la marca nacional titularidad de la demandante.
Por ello, condena al propietario «a cesar en los actos infractores y a abstenerse de volver a realizarlos», y a retirar del mercado las botellas de sidra Somarroza comercializadas con el envase «molde de hierro».
Además, establece una indemnización a favor de la Asociación de la Sidra Asturiana del 1 % de la cifra de negocio alcanzada por el demandado con el producto infractor (sidra natural Somarroza comercializada con el envase molde de hierro) durante los cinco años anteriores al ejercicio de la acción, y a publicar, a su costa, «una simple reseña del contenido de la sentencia en un diario de difusión nacional, en su página web sidrasomarroza.es y en sus perfiles de Facebook y de Twitter».
Según la Asociación Sidra Asturiana, la botella de sidra asturiana, conocida como botella «molde de hierro», se lleva usando desde 1880 para embotellar sidra natural en Asturias. Más de un siglo después, «cuando la botella había dejado de ser una simple botella para convertirse en un signo identificativo de la sidra natural asturiana», Assa, que representa a sus productores, la registró como marca tridimensional.
En su sentencia, el Supremo reconoce que el uso de la botella por los asociados de la titular de la marca, lagareros de Asturias, «ha dado lugar a que un consumidor medio de sidra natural al ver este envase pueda distinguir el origen empresarial, en cuanto que se trata de sidra que proviene de lagareros asturianos», informa Efe.