Sindicatos policiales promueven el modelo de cárceles masivas de Bukele en Oviedo

ASTURIAS

Miembros de la Mara Salvatrucha esperan a ser escoltados a su llegada a la cárcel de máxima seguridad en Zacatecoluca (El Salvador).
Miembros de la Mara Salvatrucha esperan a ser escoltados a su llegada a la cárcel de máxima seguridad en Zacatecoluca (El Salvador). JOSE CABEZAS | Reuters

El encuentro de celebrará en Oviedo organizado por un grupo vinculado a Vox y con la participación de Macarena Olona

27 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Una asociación vinculada a Vox de Baleares, con la colaboración de dos representantes de sindicatos policiales en Asturias, ha organizado una mesa redonda titulada ¿Quién cuida a quien nos cuida? Modelo Bukele de seguridad. El sistema de Nayib Armando Bukele, presidente del Salvador, basado en cárceles masivas donde se hacina a los presos ha provocado numerosas denuncias de organizaciones defensoras de los derechos humanos, no sólo por las condiciones miserables del encierro de los presos sino por la arbitrariedad de las detenciones, en muchas ocasiones sin cargos ni respaldo judicial. De forma más reciente, el modelo Bukele ha estado especialmente de actualidad debido al acuerdo firmado con la administración Trump para la deportación de inmigrantes, de nuevo con numerosas denuncias sobre arrestos de personas simplemente por llevar un tatuaje o pasar por el lugar donde se desarrollaba una redada.

La mesa redonda tendrá lugar el próximo 7 de junio en el hotel Nap de Oviedo y contará con la participación de la exdiputada de Vox, Macarena Olona, y también con la de José Luis González, secretario general de SUP Asturias y además de la de Ildefonso Rodríguez, secretario general de SIPLA-CSLA Asturias. En la mesa también estará una representante de la organización Avanza en Libertad y de Nuestro Corazón por bandera, de Asturias.

Avanza en Libertad fue fundada, según explica en su página web, en las Islas Baleares (su presidenta es también diputada y portavoz de Vox en el archipiélago) y, de hecho, en su propia descripción asegura que «cuyo ámbito de actuación se circunscribe a las Islas Baleares» con el objetivo de «impulsar a la sociedad civil en la defensa activa de la libertad, la democracia, la unidad y la identidad cultural española». 

Sin embargo el «modelo Bukele de seguridad» tiene poca relación con la libertad o la democracia, o la identidad cultural española. Siendo el Salvador un país atravesado por gravísimos problemas de seguridad, con bandas, las 'maras', de extrema violencia, Bukele formó un sistema de detenciones masivas en macrocárceles que ha sido posible, en buena medida, porque la nación vive en una estado de excepción permanente desde hace años que el Ejecutivo prorroga una y otra vez. 

En una entrevista reciente realizada por la BBC al ministro de Seguridad de El Salvador, Gustavo Villatoro, asegura que el gobierno ni siquiera se plantea un final del estado de excepción en el horizonte: « Mantener el régimen de excepción a la fecha es justamente por el mismo respeto y seriedad que hay que tenerle al fenómeno de las maras, porque no son una organización criminal cualquiera. Esto es como que una religión negra y mantener el régimen va en el sentido de mantener siempre esa guerra permanente» y añade que «es cierto que se ha dicho que acabará cuando agarremos al último homeboy en territorio salvadoreño, pero como ministerio tenemos que estar preparados para cualquier decisión del presidente». Porque es así, el sistema de Bukele se basa en las decisiones personales de Bukele.

En los relatos de las detenciones se han dado casos de arrestos de personas pertenecientes a grupos de defensa de los derechos civiles y también de personas completamente inocentes que son recogidas por soldados sin ningún tipo de mandato judicial. En estas cárceles los presos reciben una comida mínima, golpes de forma continua y también viven hacinados en las celdas, en ocasiones con 250 personas en una única celda, con un único servicio, en las que ni siquiera es posible estirarse y las personas tratan de dormir, sin mucho éxito, acumuladas. 

El pasado mes de febrero, el grupo ultra Núcleo Nacional anunció que celebraría un encuentro en Gijón en un restaurante que, tras conocerse el detalle de la cita, con llamadas a que «la democracia se tiene que acabar ya», canceló el acto. Posteriormente trasladaron su encuentro a un lugar de Oviedo que no hicieron público.