Alerta: vuelven las carabelas portuguesas a las aguas del Cantábrico

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

Carabela portuguesa, na praia de Razo, en Carballo.
Carabela portuguesa, na praia de Razo, en Carballo. Basilio Bello

Los primeros ejemplares de estos organismos, mal llamados medusas, se han avistado en la costa oriental de Galicia y occidental de Asturias causando algunos incidentes en playas de estas zonas

22 jul 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Con el verano y el aumento de la temperatura del mar Cantábrico, la costa asturiana vuelve a ser refugio para un visitante que para nada es bienvenido pero que desde el verano de 2023 es asiduo en las playas asturianas. Se trata de las carabelas portuguesas, un organismo marino que, aunque a menudo se confunde con una medusa, en realidad es un cnidario compuesto por varios organismos que se desplaza con la ayuda de una vela inflada llena de gas, resultando muy llamativo a la vista. Sin embargo, su picadura puede ser muy dolorosa y potencialmente peligrosa, ya que puede causar problemas respiratorios e incluso parada cardíaca en casos graves.  

Pues bien, según el aviso que ha lanzado a través de las redes sociales el naturalista y fundador de la Coordinadora para el Estudio y Protección de las Especies Marinas (CEPESMA), Luis Laria, en los últimos días se habrían empezado a avistar en la costa oriental de Galicia y occidental de Asturias causando algunos incidentes en varias playas de estas zonas. En concreto, Laria ha alertado de la presencia de ejemplares de carabelas portuguesas en playas de Foz, Tapia de Casariego, Muros de Nalón y Castrillón.

Así, a través de un post publicado en Facebook y que ha iniciado con la frase «muy recomendable leer esto», el mismo ha informado de que «esta semana son muchos los incidentes en varias playas del oriente de Galicia y Asturias con la carabela portuguesa (Physalia physalis), añadiendo como explicación que la «mal llamada medusa, es un Cnidario compuesto de tres organismos básicos, entre los que destacan los largos cilios, tentáculos donde se encuentran los nematocistos, altamente urticantes por su neurotóxico y que, en casos extremos, pueden ocasionar paradas cardíacas, aunque lo más habitual solo es hinchazón y dolor fuerte».

¿Qué se debe hacer en caso de picadura?

El fundador de CEPESMA también indica que su publicación qué se debe hacer «en caso de contacto dérmico» con las carabelas portuguesas para aliviar el picor que ocasiona el contacto de sus tentáculos. Luis Laria señala que es «imprescindible la limpieza durante unos minutos con la propia agua de mar» y destaca que esa limpieza «nunca» se debe realizar con agua dulce. Es más, apunta que, si hay opción de calentar el agua del mar para la limpieza de la zona cutánea afectada, el calor «faculta la dilatación y la eliminación de las posibles púas incrustadas». También recomienda, «si es posible, (aplicar) alguna pomada con cortisona». No obstante, advierte que «en caso de reacción más adversa» se debe requerir «atención médica».

El aumento de la presencia de las carabelas portuguesas en las aguas del mar Cantábrico, incluyendo Asturias, se ha relacionado con los cambios en las corrientes marinas y el aumento de la temperatura del agua, que favorece la proliferación de especies que antes eran menos frecuentes en estas latitudes. Tal es así que el pasado verano se avistaron numerosos ejemplares de estos organismos en playas hasta del oriente de Asturias, que en algunas jornadas conllevó el cierre de las mismas y la prohibición del baño para evitar la picadura de esta especie de invertebrado.