Balance de la descarbonización: Asturias sigue siendo la más contaminada

ASTURIAS

Algunas de las compañías e instalaciones con mayores emisiones a la atmósfera se encuentran en el Principado

03 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

La economía asturiana ha experimentado, y aún está en pleno proceso, una intensa transformación, primero con la práctica desaparición de la minería de carbón y una adaptación paulatina en la industria. Pero el balance de la descarbonización, a fecha de 2024, deja al Principado como una de las comunidades en las que la contaminación no sólo no se redujo sino que aumentó y además algunas de las empresas e instalaciones que forman parte de su tejido productivo se encuentran entre las que mayor polución provocan del país.

Así lo destaca el informe Descarbonización 2025: Europa, España y Comunidades Autónomas, publicado el pasado mes de junio por el Observatorio Sostenibilidad. En ese informe señala que, si bien ha habido una reducción del 14% las emisiones del sector de quema de combustibles fósiles para el conjunto del país, en el caso de Asturias «se observa el ligero incremento».

En concreto, el texto destaca que «por comunidades autónomas (sin considerar el sector aeronáutico y el marítimo) se observa el ligero incremento en Asturias y Madrid y la Comunidad Valenciana y la reducción en Galicia que lidera el fuerte descenso con un 24% seguido de Navarra un 19% y la Rioja con 14%. Si analizamos todo el período del mercado de CO2 (2008-2024) observamos que Castilla y León ha reducido sus emisiones en un 80%, seguido de Aragón, Galicia y La Rioja con reducciones superiores o cercanas al 70%».

«La economía española no se está descarbonizando al ritmo necesario», destaca el informe que incide en que, tras el fuerte impulso de las energías renovables en el sector eléctrico, las emisiones del resto del mix energético apenas han disminuido. Desde 2008, la reducción total en el mercado de carbono alcanza un 44%, pero los progresos se concentran en determinados sectores.

En 2024, los sectores incluidos en el mercado de emisiones (energético, industrial, cementero o aeronáutico) representan un 32% del total de gases de efecto invernadero, mientras que el 68% restante procede de los llamados sectores difusos, como el transporte, la agricultura, el sector residencial, la calefacción o los servicios.

El reparto por sectores refleja tendencias dispares. La aviación registra un aumento del 18%, en línea con el récord de casi 100 millones de turistas extranjeros. El sector marítimo entra por primera vez en el mercado de emisiones, con 3,5 millones de toneladas de CO2 equivalente. También se detecta un incremento en la producción siderúrgica, especialmente en hierro y acero. En cambio, el sector del cemento logra una reducción del 3%.

Las caídas más relevantes se producen en la quema de gas, petróleo y carbón (un 14% menos), principalmente en la producción energética peninsular, favorecida además por un año muy positivo para la generación hidráulica.

Las empresas más contaminantes

Según este informe, Repsol continúa liderando la lista de compañías más contaminantes en España, con 10,8 millones de toneladas de CO? equivalente emitidas en 2024, cifra que incluye los 2,1 millones correspondientes a su filial Petronor. Tras ella se sitúan Endesa, con 9,2 millones; EDP, con 5,3 millones; ArcelorMittal, con 5,1 millones; Cepsa y Naturgy, con 4 millones cada una; Iberia, con 3,8 millones; Iberdrola, con 2,8 millones; Cementos Portland Valderribas, con 2,6 millones; y Lafarge Holcim, con 2,1 millones.

En conjunto, estas diez compañías concentran el 56% de las emisiones del mercado de carbono y el 18% del total nacional. Entre las que incrementaron su huella destacan ArcelorMittal (16%), Lafarge Holcim (9%), Cepsa (7%) e Iberia (5%). Por el contrario, Iberdrola redujo sus emisiones un 20% y Naturgy un 19%.

El contexto energético en España durante 2024 estuvo marcado por un nuevo retroceso en la generación de electricidad, con una caída del 0,5% respecto al año anterior. Por segundo ejercicio consecutivo, las renovables se consolidaron como la principal fuente de energía del mix nacional, alcanzando una cuota del 56,8%, frente al 51,2% registrado en 2023.

Este cambio se tradujo en una reducción de las emisiones de CO2 asociadas a la generación eléctrica, que descendieron hasta los 27 millones de toneladas en 2024.