El patrimonio medio por cuenta de partícipe en el Principado se sitúa en 14.015 euros, un 8,6% más que en 2023 y sensiblemente por encima de la media nacional, situada en 12.616 euros
11 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.El ahorro privado para la jubilación sigue ganando terreno en Asturias, a pesar de las restricciones impuestas en los últimos años a las aportaciones a los planes de pensiones individuales. Según el último informe del Observatorio INVERCO correspondiente a 2024, los asturianos mantienen invertidos 1.784 millones de euros en planes de pensiones del sistema individual, un 7,7% más que en 2023. Con ello, el Principado conserva el 1,9% del patrimonio nacional, una cuota estable respecto al año anterior.
Aunque el peso de Asturias en el conjunto del ahorro español sigue siendo modesto, el dato cobra relevancia si se observa su evolución a largo plazo. En 2017, el patrimonio regional ascendía a 1.542 millones, lo que supone un crecimiento acumulado superior al 15% en siete años, pese a los límites legales que desde 2021 restringen las aportaciones individuales a un máximo de 1.500 euros anuales por persona.
El patrimonio medio por cuenta de partícipe en el Principado se sitúa en 14.015 euros, un 8,6% más que en 2023 y sensiblemente por encima de la media nacional, situada en 12.616 euros. Este dato consolida a Asturias entre las comunidades con mayor ahorro medio por persona por detrás de Navarra, País Vasco, Madrid, Cataluña, Aragón, La Rioja y Castilla y León. El informe de INVERCO destaca también la preferencia de los asturianos por estrategias de inversión mixtas, en línea con su tradicional perfil conservador pero con creciente exposición a la renta variable. En concreto, el 67,1% del patrimonio se concentra en planes mixtos, mientras que la renta variable representa el 13,6% y la renta fija, el 15,9%. La proporción de productos con algún componente de acciones —mixtos o de renta variable— alcanza el 80,7% del total, una cifra récord en la región.
El número de cuentas de partícipes en Asturias descendió levemente hasta las 127.297, un 0,8% menos que en 2023, en línea con la tendencia general observada en casi todas las comunidades. Sin embargo, ese menor número de cuentas contrasta con el aumento del patrimonio total y medio, lo que sugiere una mayor concentración del ahorro entre los partícipes activos. En términos de población, el 12,6% de los asturianos mantiene parte de su ahorro en planes de pensiones individuales, un porcentaje prácticamente idéntico al de 2017 (12,7%). Este dato sitúa al Principado algo por debajo de la media nacional (15%), aunque muy próximo a otras comunidades del norte como Galicia (14,2%) o Cantabria (13,2%).
El ahorro acumulado en planes de pensiones individuales representa el 5,9% del PIB regional, el mismo porcentaje que el año anterior y ligeramente por encima de la media nacional (5,8%). En 2017, esta ratio se situaba en el 6,8%, lo que muestra un estancamiento relativo en el peso del ahorro previsional respecto al crecimiento de la economía asturiana en la última década.
El informe destaca que 2024 fue un año de revalorizaciones bursátiles y de renta fija positivas, que compensaron las limitaciones en aportaciones. Los planes con exposición a acciones fueron los grandes beneficiados de la recuperación de los mercados, y los asturianos, tradicionalmente inclinados hacia productos conservadores, aumentaron su participación en ellos. Así, los planes mixtos y de renta variable suponen ya más del 80% del ahorro, frente al 61,2% registrado en 2017.
Asturias ocupa la duodécima posición entre las comunidades autónomas por volumen de patrimonio gestionado, por delante de regiones como Extremadura, Cantabria o La Rioja. En cambio, su peso en número de partícipes es algo menor, lo que refuerza la idea de un ahorrador medio más consolidado y con mayor capacidad de inversión. En términos comparativos, mientras la media nacional de patrimonio por partícipe ronda los 12.600 euros, el dato asturiano supera esa cifra en más de 1.400 euros, situándose por encima de comunidades más pobladas y con mayor renta per cápita, como Andalucía o la Comunidad Valenciana.