Alfonso García Muriel, presidente de DXC España y Portugal: «Asturias ofrece talento, estabilidad y un entorno propicio para la innovación»
ASTURIAS
El responsable de la empresa asegura que «retener talento no es solo cuestión de salario, sino de propósito y visión» y confirma la apuesta de la compañía por las instalaciones de Avilés
11 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.DXC Technology celebra su 20 aniversario en Avilés. Durante ese periodo, el crecimiento de la compañía ha sido continuado hasta alcanzar una plantilla de más de un millar de trabajadores, lo que la convierte en el mayor empleador del sector en la comunidad. Y el objetivo es seguir creciendo, ya que Alfonso García Muriel, presidente de DXC España y Portugal, ha anunciado la contratación de hasta 325 personas en los próximos meses. García Muriel repasa en esta entrevista su apuesta por la región, las fortalezas de la comunidad autónoma y los principales retos de futuro que tiene DXC.
—¿Qué balance hace de estas dos décadas de DXC en Avilés?
—Miro atrás y lo que hemos construido en Avilés me resulta profundamente inspirador. Comenzamos con apenas cinco personas dando servicio a un único cliente, Dupont, y hoy somos más de mil profesionales trabajando para más de 80 clientes en toda España. Este centro no solo ha crecido en tamaño, sino en impacto. Ha evolucionado con el mercado, con la tecnología y, sobre todo, con las personas. Es un ejemplo de cómo una apuesta firme por el talento local y por la innovación puede convertirse en una historia de éxito sostenido.
—¿Qué ventajas hay en Asturias que no haya en otros sitios para que la región tenga ese potencial?
—Asturias tiene una combinación única de factores que la hacen especialmente atractiva para el desarrollo tecnológico. Por un lado, cuenta con una red de infraestructuras moderna y bien conectada. Por otro, el compromiso institucional con la innovación —como demuestra el presidente Adrián Barbón— es firme y estratégico. Además, el talento asturiano destaca por su preparación, compromiso y capacidad de adaptación. Todo esto crea un entorno propicio para que empresas como DXC puedan crecer y generar valor.
—¿Cuál es el «secreto» de ese éxito en Avilés?
—No hay una fórmula mágica, pero sí una serie de decisiones coherentes y sostenidas en el tiempo. Apostamos desde el principio por ofrecer empleo de calidad y estable, por crear una cultura centrada en las personas, y por fomentar la diversidad —hoy contamos con profesionales de más de 27 nacionalidades. Además, hemos sabido adaptarnos a las necesidades de nuestros clientes, evolucionando nuestras capacidades y servicios. El compromiso del equipo ha sido, sin duda, el motor de este crecimiento.
—¿Cómo combina DXC la retención de talento senior con la captación de jóvenes?
—La media de edad de nuestra plantilla es de 41 años, lo que refleja una base sólida de experiencia. Pero también estamos muy enfocados en el relevo generacional. Colaboramos activamente con universidades, centros de formación profesional y entidades locales para atraer talento joven. Les ofrecemos formación continua, proyectos reales y oportunidades de crecimiento. Esta combinación de experiencia y juventud es clave para mantener la competitividad y asegurar el futuro del centro.
Retener talento no es solo cuestión de salario, sino de propósito y visión
—¿Cuál es el principal desafío para que Asturias retenga talento cualificado?
—El principal reto es seguir generando oportunidades profesionales atractivas y sostenibles. El talento necesita proyectos estimulantes, estabilidad y posibilidades de desarrollo. Asturias tiene todo para lograrlo, pero debe continuar apostando por la inversión en innovación, la colaboración público-privada y la internacionalización de sus capacidades. Retener talento no es solo cuestión de salario, sino de propósito y visión.
—¿Cómo logran mantener esa estabilidad en un sector tan dinámico?
—Desde el inicio, en DXC hemos apostado por empleo estable y de calidad. Esto implica cuidar a las personas, ofrecerles formación, desarrollo profesional y un entorno de trabajo saludable. En un sector marcado por la rotación y la globalización, esta estabilidad nos permite construir relaciones duraderas con nuestros clientes y con el entorno. Además, aporta valor a Asturias, generando empleo cualificado y contribuyendo al tejido económico local.
—¿En qué áreas tecnológicas ve mayor oportunidad para Asturias?
—Asturias tiene una gran oportunidad en áreas como la inteligencia artificial, la ciberseguridad, la modernización de aplicaciones y los servicios cloud. Son tecnologías que están transformando todos los sectores y que requieren talento especializado. El ecosistema asturiano, con su red educativa y su capacidad industrial, puede posicionarse como referente en estas disciplinas si se mantiene la apuesta por la formación y la colaboración.
—¿Qué tipo de empresas o sectores deberían atraerse para fortalecer el ecosistema?
—Es fundamental atraer empresas tecnológicas con vocación de permanencia, que apuesten por el talento local y por la innovación. Sectores como el industrial, el energético, el financiero y el sanitario pueden beneficiarse enormemente de un ecosistema digital robusto. La clave está en crear sinergias entre empresas, instituciones y centros educativos para generar un entorno dinámico y competitivo.
—¿Qué ambiciones tienen a medio-largo plazo para Avilés y Asturias?
—Nuestra ambición es seguir creciendo, tanto en número de profesionales como en capacidades tecnológicas. Queremos que el centro de Avilés sea cada vez más estratégico dentro de DXC, ampliando su alcance internacional y su impacto local. En Asturias, aspiramos a seguir colaborando con el ecosistema regional, generando empleo, impulsando la innovación y contribuyendo al desarrollo económico y social.
—¿Qué mensaje enviaría a un joven asturiano y a una empresa que duda si invertir en Asturias?
—A los jóvenes les diría que en Asturias hay futuro, que pueden desarrollar una carrera profesional sólida y participar en proyectos globales sin tener que irse lejos. A las empresas, que Asturias ofrece talento, estabilidad y un entorno propicio para la innovación. Invertir aquí es apostar por un modelo sostenible, competitivo y con gran potencial de crecimiento.