Las principales causas de muerte en Asturias: cáncer, enfermedades cardiovasculares y respiratorias

Sergio Muñoz Solís
Sergio M. Solís REDACCIÓN

ASTURIAS

F. Sotomonte

Entre los factores externos, destacan las caídas accidentales, que afectan especialmente a los mayores de 80 años. Además, la región presenta la mayor tasa de suicidios por cada 100.000 habitantes de todo el país

18 dic 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Asturias registró en 2024 un total de 13.109 fallecimientos. Tras las cifras, publicadas por el Instituto Nacional de Estadística, se esconde un retrato preciso de las principales amenazas para la salud de la población y de los efectos de una estructura demográfica marcada por el envejecimiento. El análisis de las causas de muerte permite identificar el peso de las grandes enfermedades crónicas, pero también de los accidentes y otros factores externos, que siguen teniendo una incidencia relevante en la comunidad.

Entre las enfermedades, las dolencias cardiovasculares lideran la estadística. Las enfermedades isquémicas del corazón fueron la principal causa concreta de muerte, con 923 fallecimientos, por delante de la demencia, que causó 848 defunciones, y del cáncer de bronquios y pulmón, con 756. A continuación se sitúan las enfermedades cerebrovasculares, con 646 muertes, y la insuficiencia cardíaca, con 475. El listado de las principales causas médicas se completa con la enfermedad hipertensiva (400), la diabetes mellitus (350), las enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores (348), el cáncer de colon (317), la insuficiencia renal (298) y el cáncer de páncreas (294).

Estos datos confirman el fuerte impacto de las patologías del sistema circulatorio y del sistema nervioso en una comunidad con una de las poblaciones más envejecidas de España. La demencia y la enfermedad de Alzhéimer, que sumó 225 defunciones, aparecen entre las causas más relevantes, reflejando el peso de las enfermedades neurodegenerativas en los tramos de mayor edad. También la neumonía, con 248 fallecimientos, mantiene una presencia significativa, al igual que la covid-19, que en 2024 provocó 211 muertes en Asturias, lejos de las cifras de los peores momentos de la pandemia, pero todavía con impacto en la mortalidad anual.

El cáncer, considerado de forma agregada, fue la primera causa de muerte en la comunidad, con 3.581 defunciones, el 27,3% del total, según la estadística oficial. Dentro de los tumores, el de bronquios y pulmón destaca claramente como el más letal, seguido por el de colon, el de páncreas, el de mama, con 208 fallecimientos, y el de próstata, con 172. El cáncer de estómago cerró la lista de las principales causas oncológicas con 132 muertes. El peso del cáncer en Asturias es similar al del conjunto del país, donde también encabeza la mortalidad, por delante de las enfermedades del sistema circulatorio.

Las enfermedades respiratorias, con especial incidencia en una región industrial y envejecida, siguen siendo un factor relevante. Las patologías crónicas de las vías respiratorias inferiores y los tumores pulmonares mantienen cifras elevadas, en línea con los datos nacionales, que sitúan al cáncer de tráquea, bronquios y pulmón como el tumor más frecuente como causa de muerte en España.

Más allá de las enfermedades, las causas externas de mortalidad revelan otros datos reseñables. En 2024 se registraron en Asturias 227 muertes por caídas accidentales, la principal causa externa de fallecimiento. Este tipo de accidentes afectan más a las mujeres, con 122 casos, frente a los 105 en hombres, y se concentra de forma muy marcada en la población de más de 80 años, que suma 159 fallecimientos. La relevancia de este dato se acentúa al situarse Asturias como la segunda comunidad autónoma con mayor tasa de muertes por caídas, solo por detrás de Galicia, lo que vuelve a poner el foco en la fragilidad asociada a la edad y en la prevención en el ámbito doméstico y sociosanitario.

El suicidio y las lesiones autoinfligidas causaron 119 muertes en la región, una cifra que sitúa a Asturias con la mayor tasa de España: 11,75 fallecimientos por cada 100.000 habitantes. El fenómeno afecta especialmente a la franja de edad de 45 a 64 años, con 51 casos, aunque también resulta llamativa la presencia de 4 muertes en el grupo de 15 a 24 años, lo que subraya la necesidad de reforzar las políticas de salud mental y prevención desde edades tempranas.

Las muertes por ahogamiento, sumersión y sofocación accidentales ascendieron a 58, mientras que los accidentes de tráfico causaron 50 fallecimientos, cifras que, aunque inferiores a las de otras causas externas, siguen teniendo un impacto considerable.