Las diligencias contra el acuso se han abierto por maltrato doméstico y atentado a personal sanitario
27 dic 2025 . Actualizado a las 18:49 h.El vecino de Infiesto que fue detenido el Día de Navidad después de que los servicios de emergencia encontrasen a su madre muerta y con signos de maltrato en el interior de su domicilio ha quedado en libertad provisional, con obligación de comparecer ante el Juzgado los días 1 y 15 de cada mes. Según informa el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA), en principio, y sin perjuicio de lo que se pueda ir avanzando en la instrucción, las diligencias se han abierto por maltrato doméstico y atentado a personal sanitario.
El Tribunal de Instancia de Cangas de Onís, que ha sido el encargado de tomar declaración al acusado, acordó decretar su libertad provisional después de que el Ministerio Fiscal no interesase prisión para el acusado. La causa del fallecimiento no es posible, de momento, conectarla directamente con el maltrato, pues el informe preliminar de autopsia realizada en el Instituto de Medicina Legal de Oviedo refiere «quedar pendiente de estudio», según el TSJA.
El hombre fue detenido y conducido a los calabozos de Langreo el pasado día 25 por un presunto delito de abandono de los deberes familiares después de que su madre, de edad avanzada, hubiese permanecido muerta, al parecer durante varios días, en el interior de su casa. Según fuentes de la Guardia Civil, después de que el hijo alertase el jueves a los servicios médicos, la mujer fue encontrada muerta y presentaba signos de abandono, por lo que se solicitó la presencia del médico forense y se avisó a la Policía Judicial de Langreo para que llevase a cabo una inspección ocular.
La Guardia Civil, que trabaja con la hipótesis de que la muerte se produjo por causas naturales, aunque no descarta otras líneas de investigación, procedió al arresto del hombre por un posible delito de abandono, pero también por otro de agresión a los sanitarios. Según las mismas fuentes, increpó violentamente a los servicios sanitarios en el centro de salud de la localidad, informa Efe.
Al parecer, la vivienda -un pequeño apartamento de una habitación en el que residían de alquiler- se encontraba lleno de enseres y con signos evidentes de insalubridad. Madre e hijo llevaban allí viviendo unos tres años. Habían llegado desde País Vasco y desde entonces a ella «apenas se la veía, había muchos vecinos que no sabían ni que vivía ahí su madre».
El hijo llevaba una temporada trabajando en una empresa de transportes y realizaba frecuentes viajes a Madrid, principalmente durante las noches. «Es una persona muy reservada y apenas hablaba con nadie, entraba, salía, pero no paraba con nadie y menos a hablar de algo de la madre», señalan residentes del edificio, a quienes lo ocurrido en un piso de la primera planta no les ha pillado por sorpresa. «Ya he había corrido la voz de que vivía ahí también la madre y que estaba en muy malas condiciones, la señora tenía hasta barba larga, el día que la vimos quedamos asustados...», dice un vecino.
Nunca salía de casa y era completamente dependiente de su hijo. No podía realizar las funciones básicas de cuidado ella sola y su salud estaba muy deteriorada desde hacía mucho tiempo. Al parecer, se habían mudado a Asturias después de un problema con la Justicia que habría tenido su hijo en País Vasco. Las investigaciones por la muerte de la mujer corren ahora a cargo de la Policía Judicial de la Guardia Civil y del juzgado de Instrucción de Infiesto.