Los vecinos aseguran que anoche escucharon a la víctima pedirle al agresor que la dejara
10 sep 2018 . Actualizado a las 20:49 h.Los vecinos del matrimonio hallado muerto en La Caridad, después de que el hombre asesinara supuestamente a la mujer antes de suicidarse, han asegurado que las discusiones entre ambos eran frecuentes y que anoche escucharon a la víctima pedirle al agresor que la dejara. Los vecinos del brasileño Abdenego de Souza y de la asturiana Yesica Menéndez, en esta localidad del concejo de El Franco, en el occidente asturiano, también han asegurado que era frecuente escuchar llorar a los dos hijos del matrimonio, de 5 y 7 años.
Según han declarado algunos vecinos, anoche se escuchó «una discusión fuerte» y las palabras «déjame, déjame», y a continuación un golpe y silencio, por lo que alertaron a la Guardia Civil. Es el relato de Jonathan Iglesias Pulido, vecino del segundo C del portal número 1 de la calle Travesías Mohices, en la vivienda anexa a la del matrimonio.
Él fue el primero en avisar a los agentes cuando, tras escuchar el golpe seco en la vivienda de al lado, vio una cuerda colgando a escasos metros de su ventana. «Nosotros estábamos en la cama y sentimos discutir, pero no le dimos más importancia porque pasaba a menudo, pero al poco tiempo sentimos un golpe fuerte y fue cuando, al asomarme, vi una cuerda y era el vecino que se había tirado desde el velux hacia la calle», ha explicado Jonathan Iglesias.
Tras avisar a la Guardia Civil, los vecinos se concentraron en un corrillo y comentaron cómo sobre las 23:30 horas habían visto entrar en el portal a Yesica Menéndez con sus dos hijos, de 5 y 7 años, por lo que se temieron «lo peor» tras ver el cadáver del marido colgado por la ventana.
Cuando la Guardia Civil accedió al interior del domicilio se encontró con el cadáver de la mujer que al parecer murió de varias puñaladas, mientras el hijo de 5 años se encontraba durmiendo y el de 7 años repetía que «ahí había mucho ruido», según ha explicado el testigo.
Virginia García, vecina del segundo D, ha afirmado que las discusiones en la pareja eran «habituales» y era frecuente «oír llorar a los niños». Los dos menores fueron trasladados al hospital de Jarrio, donde tras someterles a una revisión, fueron dados de alta y actualmente se encuentran a cargo de unos familiares.