¿Cómo se vota en Eurovisión? ¿Quién tiene plaza fija en la final? ¿Qué es el «interval»? Estas son las claves para seguir el festival

La Voz REDACCIÓN

CULTURA

Subwoolfer representan a Noruega
ALESSANDRO DI MARCO | EFE

El concurso tiene particularidades que hay que conocer para poder disfrutarlo en todo su jugo

14 may 2022 . Actualizado a las 10:02 h.

Eurovisión tiene sus curiosidades. Cualquier eurofán que se precie sabe cómo es el sistema de puntuación, por qué a última hora ha cambiado toda la clasificación con un aluvión de votos, qué países van automáticamente a la final o cuáles son los requisitos de una actuación en el certamen europeo. Pero cuando se acerca el gran día, otros espectadores se suman al seguimiento del concurso. Para no perderse, es necesario conocer las normas generales que rigen este particular universo.

1. ¿Cuáles son los requisitos de las canciones y los artistas?

Para equiparar todas las candidaturas hay una serie de normas que todos los países deben seguir. Canciones inéditas de tres minutos de duración máxima, no publicadas antes del 1 de septiembre del año anterior y sin instrumentos en directo. Sobre el escenario no puede haber más de 6 personas, aunque para esta restricción ya han encontrado solución, porque Rumanía llegó a usar maniquíes en una actuación. Donde no hay limitaciones es en el idioma. Bélgica dio buena cuenta de ello en el 2003 cuando se inventó uno en su canción Sanomi (y consiguió el segundo puesto). Tampoco está restringido el país de origen del cantante. La extriunfita Gisela representó a Andorra en el 2008. Eleni Foureira, la representante de Chipre que logró la segunda posición con Fuego, es en realidad griega nacida en Albania. Y uno de los casos más sonados es el de la canadiense Celine Dion, que ganó Eurovisión para Suiza en el 88 con Ne Partez Pas Sans Moi.

Además, los cantantes pueden repetir participaciones. La historia de Eurivisón está cuajada de ejemplos. España ya lo comprobó en los años sesenta cuando Raphael compitió con los temazos Yo soy aquel y Hablemos del amor en dos ediciones consecutivas, de 1966 y la del 1966, no ganó en ninguna de ellas, pero fue su consagraciónJohnny Logan no es que haya competido varias veces, es que ganó en dos ocasiones el concurso para Irlanda.

Tampoco se pueden tocar instrumentos en directo en el escenario. Es decir, los músicos simulan que contribuyen a la canción, pero en realidad ese sonido está pregrabado. Aquellos tiempos en los que se presentaban las canciones con un «dirige la orquesta Juan Carlos Calderón» hace años que quedaron atrás. Ni orquesta, que sí sigue presente en Sanremo, ni otro tipo de músicos tocando en directo.

2. ¿Qué es el Big5?

Además de los 20 países seleccionados mediante las semifinales, otros gozan con el privilegio de participar directamente en la final. El ganador de la edición anterior no tiene que pasar ninguna fase previa para actuar el sábado. En esta edición coincide que el último ganador es Italia, uno de los cinco grandes, pero cuando Países Bajos o Portugal lograron sus victorias obtuvieron también el pase para la última jornada del año siguiente. El conocido como Big 5, compuesto por España, Alemania, Reino Unido, Francia e Italia tienen garantizado de forma automática el billete dorado para la final. Esto se debe a que son los países que más fondos aportan a la entidad organizadora del evento, la Unión Europea de Radiodifusión (UER).

3. ¿Cuál es el sistema de votación?

Un jurado de diez miembros de cada país, otro de dos, televoto... Desde 1956 fueron muchas las formas de elegir el ganador del festival. En la actualidad, un jurado profesional formado por cinco miembros en cada país y los votos del público deciden la victoria. Cada parte vale un 50 % y desde el 2016 se anuncian por separado. El jurado, que emite su voto un día antes de cada retransmisión hace un ránking con todos los países y después de sumar las 5 listas dan sus puntos a las 10 primeras clasificadas (12 a la primera, 10 a la segunda, 8 a la tercera y del 7 al 1 a las siguientes). Esta votación se conoce los días de emisión y las comunica un portavoz de cada país. El público, por su parte, vota una vez finalizan todas las canciones de cada gala e igualmente reparten sus puntos del 12 al 1. Sin embargo, para dar más emoción, desde el 2016 la organización suma las votaciones de todos los países y da el resultado al final de la gala, haciendo más tenso el conocimiento del ganador. De hecho, en la anterior edición, Suiza (Gjon's Tears) y Francia (Barbara Pravi) lideraban la clasificación tras la suma de los votos del jurado de todos los países, pero llegó el tsunami de apoyos del público e Italia, con Maneskin, dio el sorpasso.

4. ¿Por qué participa Australia en Eurovisión?

Australia se estrenó en el 2015 y, a lo largo de las ediciones en las que han luchado por el micrófono de cristal, muchos espectadores se han preguntado por qué la isla oceánica participaba en un concurso europeo. El motivo: el amplio seguimiento de Eurovisión en Australia. Más de 30 años de emisión del concurso y unas audiencias que rondaban los 3 millones de espectadores (aproximadamente la cifra que se alcanzó en el 2007 en España con D'Nash) para una población de casi 26 millones sirvieron de aval para que en el 2015 el país recibiera una invitación para participar en el sesenta aniversario del concurso. A pesar de que la convocatoria era solo para ese año, finalmente se amplió sin fecha de caducidad. Desde entonces, Australia ha quedado siempre en la parte alta de la tabla incluyendo un segundo puesto en el festival del 2016 y solo se quedó fuera de la final el año pasado que, por las restricciones del coronavirus, la cantante tuvo que participar vía video pregrabado. En esta edición ha vuelto a meterse en la final.

5. ¿Cómo le suele ir a España en el festival?

Hubo un tiempo en el que los eurofans españoles no existían tal como los conocemos ahora, pero en el que los cantantes que acudían como representantes de España al festival conseguían finalizar entre los primeros puestos. En los últimos años hay muchos españoles que siguen con fervor cada festival, pero el certamen no sonríe a los candidatos patrios, que suelen acabar en las últimas posiciones. España solo ha ganado dos veces y, además, de forma consecutiva. La primera, con Massiel y el tema La, la, la, en 1968. En la siguiente edición, en 1969, repitió Salomé con Vivo cantando. Pero en esta nueva era finalizar entre los diez primeros, algo que solo lograron Pastora Soler y Ruth Lorenzo, es un triunfo para la delegación española por eso se han generado tantas expectativas con la actuación de Chanel, puesto que las proyecciones la sitúan entre los cinco mejores.

6. ¿Quién es la reina de Eurovisión?

Irlanda ha conseguido siete triunfos y ningún otro participante tiene esa marca. Sin embargo, si hay un país eminentemente eurovisivo ese es Suecia, que se ha impuesto en seis ocasiones, pero que ha partido entre los favoritos al triunfo en incontables ocasiones. El Melodifestivalen es, junto con Sanremo, la preselección más prestigiosa de todo el universo de Eurovisión, alcanzando márgenes de audiencia dignos de la final de un Mundial de fútbol. Además, Suecia cuenta con el que ha sido elegido dos veces por el público como el mejor representante de toda la historia del concurso: ABBA, con Waterloo, vencedor en 1974. De hecho, este tema es considerado por muchos expertos como la canción que mejor condensa la esencia del festival, una creación perfecta para el certamen. También manda Suecia en cuanto a responsables del concurso. De hecho el actual supervisor ejecutivo de Eurovisión es Martin Österdahl.

 

7. ¿Qué es el interval?

El interval es ese paréntesis entre las actuaciones que concursan en Eurovisión y la emisión de las votaciones. Los organizadores del festival eligen actuaciones para que el show no decaiga, normalmente con artistas nacionales y de otros países que han sido protagonistas en Eurovisión. Para su interval act, los holandeses convirtieron diferentes terrazas de la ciudad de Rótterdam en escenarios en los que actuaron diferentes cantantes y grupos. Pero, quizás el interval más celebrado por los eurofáns fue el de Suecia en el 2016, en el que Måns Zelmerlöw y Petra Mede interpretaron una canción parodia que trataba de reunir todos los topicazos eurovisivos que han utilizado distintos participantes a lo largo de la historia del festival para ofrecerle un gancho a los espectadores y que deberían ser los ingredientes necesarios para la actuación ganadora: desde un título cargado de buenas intenciones (Love, Love, Peace, Peace), hasta un patinador sobre el escenario (repescaron al campeón Eugeni Plushenko, que había formado parte de la candidatura rusa Believe en el 2008), pasando por percusionistas con el torso desnudo, abuelas, un anciano con un instrumento folk, nieve falsa, un cambio de vestuario, un piano falso en llamas y un hombre en una especie de rueda de hámster. Un auténtico festival para los sentidos de los apasionados de Eurovisión.

 

8. ¿Cómo se escoge el orden de actuación?

Tratándose del espectáculo no deportivo más visto del año, la organización de Eurovisión no quiere dejar a la suerte el puesto en el que cada participante pisará el escenario. Es por eso que el jueves, tras la segunda semifinal, el equipo del festival se reúne para decidir qué país irá en cada posición. Sin embargo, para no ser acusados de beneficiar a unos sobre otros incluyen un componente de azar. El país anfitrión es siempre el primero en saber su puesto en la final. Este año Italia, en su papel de organizador, sacó la novena posición de las 25 actuaciones. Una vez conocido eso, el resto de países al conseguir clasificarse sacan de un recipiente un papel que dirá si actúan en la primera o en la segunda mitad de la gala. Con esa distribución hecha es cuando la organización decide los puestos exactos de cada artista para favorecer el espectáculo y evitar que haya bloques con canciones similares. Este año, Chanel actuará en décimo lugar, solo dos puestos antes que la gran favorita de la edición: Ucrania.